Recuérdame.

Capítulo siete.

- Mamá.- Entré temeroso a la estancia donde se encontra ella. Estaba sentada en el sofá leyendo un libro muy cerca de la chimena. El frío helado de Wiltshire en pleno invierno no perdonaba, aunque en nuestra mansión climatizada la temperatura aumentaba lo suficiente como para no congelarnos.

Ella se giró a mirarme y yo me senté a su lado dándole un beso en la mejilla. Soltó su libro para centrar plenamente su atención sobre mí. Me removí nervioso, no sabía si lo que estaba a punto de pedirle iba a salir bien.

- Díme Draco.- Su porte elegante en cualquier situación nunca terminaba de fascinarme. Mi madre era lo que yo desde pequeño había ansiado ser, junto con con mi padre, siempre había sido mi ejemplo a seguir.

- Las Navidades se acercan.- Comencé y ella arqueó una de sus finas cejas. Me empecé a poner nervioso.- Y no creo que este año debamos pasarlas solos.

- Estoy de acuerdo. Drómeda y Teddy podrán pasar las festividades aquí.

- Respecto a eso...- Traté de proseguir.- Ellos dos no la pasan solos. Y como tu comprenderás, quieren pasarla con nosotros pero también con quienes han sido su familia todo este tiempo.

- ¿Qué me estás queriendo decir?

- Mamá, que tenemos la oportunidad de pasar estas fechas con personas que queremos.

- Con Teddy y Drómeda, ya te lo he dicho. Y Neville también esta invitado si así lo desea.

- Neville también estará.

- ¿También? ¿Quién más quieres que esté?

- Ya te lo he dicho, quienes hasta ahora han sido su gente. Harry y su familia.

- No, de ninguna manera pasaré estas fechas con ese.

- Mamá, tienes que parar.

- Draco...- Me lanzó una mirada de advertencia.

- No, ya creo que está bien de todo ese odio injustificado que sientes hacía él. Y si mamá, es injustificado. Él me hizo la persona más feliz del mundo, me amó incondicionalmente, pero yo le borré la maldita memoria, ¿entiendes? El no recuerda nada, sus años en Hogwarts con respecto a mí en sus recuerdos son completamente distintos, y por lo tanto actuó en consecuencia cuando nos conocimos. No tiene culpa y te lo tienes que meter en la cabeza, que tu y yo lo recordemos nos hace tener una perspectiva muy distinta de las cosas de las que la tiene él.- Respiré hondo y agradecí que no me interrumpiese.- Él es mi mejor amigo ahora mismo, porque a pesar de todo lo que él se cree de mí ha decidido darme otra oportunidad y ahora somos como hermanos, porque mamá, tu sabes perfectamente el corazón tan grande de Harry. Lo sabes. Tu lo querías mucho.

Vi sus ojos azules inundarse de lágrimas. Harry no le era indiferente y yo lo sabía, para ella fue como un segundo hijo, lo cuidaba y lo quería como tal y siempre compraba las cosas doble, algo para mí y algo para él. Yo sabía lo duro que le resultó que de repente Harry no recordara absolutamente nada de nosotros dos, de ella, y le costó mucho asimilar la frialdad con nosotros al principio.

- Lo quise y lo quiero Draco, y ese es el problema.- Se limpió lás lágrimas un pañuelo que a saber de donde lo había sacado.- Es muy duro ver la frialdad con la que te trató al inicio, sabiendo lo que te quería, lo que habría entre vosotros ahora mismo, que serías tu y no esa Weasley quien le hubiese desposado.

- Mamá él ya no es así de frío. Te lo he dicho, es mi mejor amigo, y él también me considera así. Sigue siendo nuestro Harry, su personalidad no ha cambiado, dale una nueva oportunidad de nuevo. Estoy seguro de que volverá a quererte mucho. Él desea agradecerte en persona por haberle salvado la vida.