La cosa no terminó en la rueda de la fortuna, Eunwoo en verdad necesitaba sentirse querido, amado, deseado... In-Yeop llevaba un par de años alejado, no lo tocaba, casi nunca lo abrazaba, le daba besos, sí, pero nada profundo... él en verdad anhelaba sentir el amor de alguien.
Sanha era un chico que había caído rendido ante Cha, no lo iba a negar, desde que lo conoció supo por qué In-Yeop había quedado enamorado de él... Yoon quería ver feliz al azabache, deseaba darle todo el amor del mundo, sin importarle quién estuviera de por medio...
Llegando a casa del menor, ambos mantenían sus manos en unión, era un silencio total, pero nada incómodo.
—Hyung... ¿Quie-quieres dormir conmigo esta noche?
Eunwoo se giró un poco sorprendido, las cosas empezaban a salirse de su control, porque era como si Sanha estuviera leyéndole la mente, lo había estado pensando desde que iban de regreso en la camioneta de MJ.
Yoon sabía que estaba metiéndose en un lío mayor, porque probablemente no fuera solo uno el lastimado, cabía la probabilidad de que fueran los 3 quienes resultaran heridos con todo eso... pero es que esa mirada cariñosa y tierna que Eunwoo le dirigía siempre, hacía que quisiera mandar al diablo todo y disfrutar de él.
—Ya es tarde... va-vamos a dormir.
¡Claro que Cha no iba a negarse! Sanha estaba haciéndolo sentirse querido, importante y valioso, él quería más de eso.
Revisó su celular una ultima vez y... no había señales de In-Yeop.
Ambos caminaron a la habitación del menor, esa era la primera vez que Eunwoo entraba y le parecía increíble.
Las paredes eran de color oscuro, casi negro, salvo una, que era de color blanca, en donde se encontraba el respaldo de la cama. La pared frente a la cama tenía varias frases de canciones con muchos colores neón, la puerta para el baño, la otra pared tenía una enorme ventana que daba al pequeño jardín y en la otra estaba la puerta para ingresar/salir y también el armario del menor.
En el techo había estrellas que brillaban en la oscuridad, le recordaba a cuando era más pequeño, esa decoración no podía faltar en su habitación.
—Hyung. —Sanha se sentó en la cama y le tendió la mano al mayor—. Ven aquí.
Eunwoo se acercó y se sentó a su lado, ambos se sentían tímidos, pero las sonrisas en sus rostros no mentían, estaban felices de estar así.

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°• 𝘌𝘭 𝘊𝘩𝘪𝘤𝘰 𝘥𝘦 𝘊𝘳𝘪𝘴𝘵𝘢𝘭• ° 《 𝙀𝙪𝙣𝙎𝙖𝙣》
De Todo𝘚𝘢𝘯𝘩𝘢 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘣𝘢 𝘪𝘯𝘵𝘳𝘢𝘯𝘲𝘶𝘪𝘭𝘰 𝘱𝘰𝘳𝘲𝘶𝘦 𝘌𝘶𝘯𝘸𝘰𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘣𝘢 𝘥𝘶𝘳𝘮𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘣𝘢𝘫𝘰 𝘦𝘭 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘰 𝘵𝘦𝘤𝘩𝘰 𝘲𝘶𝘦 é𝘭, 𝘰𝘥𝘪𝘢𝘣𝘢 𝘢𝘥𝘮𝘪𝘵𝘪𝘳𝘭𝘰, 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘦𝘴𝘵𝘢𝘣𝘢 𝘴𝘪𝘯𝘵𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘤𝘰𝘴𝘢𝘴 𝘱𝘰𝘳 é𝘭...