🌈Extra 4🌈

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🌈Killing game: The motocyclist of dispair🌈

—¿De verdad? ¿No te molesta que vaya a dormirme ya? —Dijo el buen estudiante, con ojos caídos y pinta de tener muchísimo sueño.

—Claro que no, cariño, ve a dormir ya, se te ve muy cansado. —Contestó el pandillero, acariciándole una de sus mejillas.

El pequeño monitor se acostó en su cama y solo le llevó dos minutos dormirse.

Mondo sonrió al oír sus leves ronquidos, y luego de darle un pequeño beso en la frente, salió de la habitación de su novio, cerrando con llave.

Acababan de tener una cita, tenían todo el día libre y lo aprovecharon al máximo.

Mondo y Kiyotaka ya llevaban cinco meses de relación, algo increíble en una vida llena de muerte y desesperación como era el killing game, pero pronto saldrían todos de allí, de esa estúpida escuela que les estuvo amargando por casi por un año, por fin verían la luz del sol.

Solo quedaban Fukawa, Togami, Hagakure, Kirigiri, Asahina y Naegi. Y todos apoyaban la relación entre ellos dos.  O bueno, al menos, eso pensaban.

Mondo llegó a su habitación y se acostó también. Antes de dormir, le envío un mensaje a Kiyotaka.

≪Seguramente no veas esto ahora, y espero que no lo hagas porque no quiero despertarte ^^" pero quería decirte que te quiero y que mañana te recogeré por la mañana para enseñarte una cosa, sé que te gustará <3≫

Para la tranquilidad de Mondo, el pequeño monitor no lo leyó, por lo tanto no se había despertado.

El motorista tenía pensado enseñarle un pasadizo secreto que encontró el otro día, un sitio sin cámaras que estaba rodeado de enredaderas y plantas, incluso había una pequeña piscina hecha con piedra. Estaba muy escondido así que seguramente monokuma no supiera de su existencia.

Estaba tan feliz, por fin podría pasar el resto de su vida con la persona que más quería, cuando todo esto acabara, por fin estarían felices.

🌈

Ya era de mañana, monokuma recitó ese insufrible mensaje que recitaba siempre cada mañana para que los estudiantes se despertaran.

Mondo se dirigió a la habitación de su novio, muy emocionado por lo que iba ha enseñarle hoy.

Kiyotaka no le había contestado aún al mensaje, pero eso no le importaba, porque cuando llegara a su habitación se lo explicaría todo y le llevaría al sitio secreto de inmediato.
Estaba a unos malditos 18 pasos, 18 pasos de la puerta de su novio, donde estaban todos reunidos, bueno, casi todos, y todos ellos con caras que solo la desesperación les podría otorgar.

Asco, miedo, susto, tristeza.

Y allí es cuando sonó:

"A body has been discovered"

La cara de Mondo pasó de ser una de total felicidad a una de miedo, el peor y repugnante miedo.

—Mierda. Mierda, mierda, mierda, mierda. —Repetía Mondo repetidas veces, corriendo hasta la habitación de Kiyotaka, empujando a todos.

Allí encontró a su difunto novio, con un gran cuchillo clavado en el pecho y marcas en el cuello, su cama llena de sangre, y un mensaje en la pared, escrito también en la pared.

"No hay un futuro"

Las lágrimas salieron descontroladamente de los ojos de Oowada, y empezó a chillar, hasta que su voz se quebró por completo.

Todos veían la escena horrorizados. Asahina se puso a llorar al ver a Mondo así.

Mondo cogió la cabeza de su novio con cuidado, y todas sus lágrimas se derramaron en su inexpresiva cara.

—Por dios... ¿que te han hecho? Que te han hecho... —mascullaba el pandillero, con su voz totalmente quebrada.

—No toques el cadáver. —Dijo fríamente Togami.

—CÁLLATE, MIERDA. —Gritó Mondo. —PORQUE LE HABÉIS HECHO ESTO, NO LO MERECÍA.

Mondo se levantó, dejando la cabeza de Ishimaru con cuidado, y empezó a golpear y destrozar todo lo que viera.

Hagakure intentó sujetarlo de los brazos para que parara, pero fue en vano.

—¿QUE PASARÁ AHORA CON MI FUTURO? ¿CON EL SUYO? Ya no podremos tener la vida que siempre planeamos ... NO LE HE PODIDO ENSEÑAR MI SITIO SECRETO, JODER. —Eso fue lo único que se le entendió, luego empezó a gritar irreconocibles palabras que se mezclaban con el sonido de sus sollozos.

—¿Que sitio secreto? —Preguntó Togami, interesado.

—HE DICHO QUE TE CALLES, DESGRACIADO. —Chilló Mondo, y luego le dio una bofetada que resonó por toda la habitación, Togami cayó al suelo por el impacto.

Todos se taparon la boca en forma de sorpresa.

—Aquí el desgraciado eres tú, no eres nadie sin tu querido novio. —Espetó Byakuya, soltando una insolente risa como forma de burla.

Mondo perdió el control: le dio una patada en el estómago a Togami y luego salió de la habitación, para gritar y patear las paredes, o todo lo que se le interpusiera por el camino.

Cuando se cansó, se sentó en el suelo y escondió su cara entre sus rodillas. Seguía llorando, con la misma intensidad como al principio.

Naegi se acercó y le dio una suave palmada en el hombro.

—Lo siento, Oowada, debe de ser muy duro, pero encontraremos al culpable y vengaremos a Ishimaru. —Dijo Naegi, sonriendo.

Mondo, sin alzar la vista, asintió, aún llorando.

Llegaron al juicio, el cual fue desastroso por las palabras poco razonadas y llenas de dolor por parte del pandillero.

La culpable fue Fukawa. Ella estranguló a Ishimaru y luego le clavó aquel cuchillo, y cuando derramó la suficiente sangre, escribió el mensaje.
Mondo quiso matarla él mismo, con sus propias manos, allí mismo.

Obviamente no pudo, el juicio siguió sus reglas y recibió su castigo.

Mondo se prometió que seguiría adelante, que sería feliz, porque eso era lo que su novio siempre habría querido.

Cinco días después, encontraron el cuerpo sin vida de Oowada, el cual colgaba de una soga atada en el techo. Se había suicidado ahorcándose.

🌈

Hola, aquí estoy de nuevo
Perdón por no haber actualizado en tantísimo tiempo, estaba descansado de todas las redes sociales y de mis pasatiempos en general porque no estaba pasando una buena etapa psicólogamente
Pero ya he vuelto con este capítulo! Que la verdad me pidió bastante gente.
Espero que os haya gustado, y lo siento de verdad por la ausencia, intentaré estar más activo a partir de ahora <3
Aproximadamente 900 palabras

🌈30 días OTP [Ishimondo]🌈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora