Recuperación

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Ángel despierta lentamente y poco a poco va notando que está en un hospital gracias al sonido del monitor y el olor, también va notando una silueta estando de pie a los pies de la cama,. Se va aclarando la imagen y ve a una chica con el color de pelo rojo y con una postura de estar molesta.

Héctor: -Hola Alexa- dice poniendo una sonrisa nerviosa al verla.

Alexa: -Lo único que pido y no lo pudiste cumplir- se cruza de brazos enojada con él al verlo hecho pedazos.

Héctor: -Lo siento, no creí que terminaría así a decir verdad - confiesa mientras intenta enderezarse pero todavía le duele el cuerpo, -¿Cómo supiste que estaba aquí?- pregunta quejándose un poco del dolor.

Alexa: -Un día que estaba por tu casa noté a tus padres muy preocupados, salieron de la casa rápidamente y los seguí hasta aquí- contesta a su pregunta aún molesta.

Héctor: -¿Y dónde estamos?- pregunta para saber hasta donde lo movieron.

Alexa: -En la CDMX, por lo que sé estuviste de hospital a hospital hasta llegar aquí- responde resolviendo su duda, suspira por un momento y se pone a su lado para que no se tenga que mover.

-Hacia tiempo que no te veía así- dice al haber pasado su enojo cambiando su expresión a una de preocupación mientras se sienta en una silla al lado de la cama-¿Qué te pasó?-. 

Héctor: -Me enfrente contra un tipo como yo- responde.

Alexa: -¿O sea...?- vuelve a preguntar para saber a qué se refiere.

Héctor: -Un super soldado, creí poder vencerlo pero no lo logré... creo que no lo pensé bien y fui a él sin dudarlo. Confíe demasiado en mí y esto- se señala a sí mismo -Fueron las consecuencias-.

Alexa: -¿Piensas volver?- pregunta boca abajo con esperanzas de que se quede.

Héctor: -Tengo que, me necesitan para ganar esta guerra, además ya tengo una idea de como pelea en caso de que lo vuelva a ver, solo espero que no me llegue a matar- contesta con un poco de gracia al final, haciendo sacar un hermosa sonrisa a su novia.

Alexa: -Es bueno saber que no huyes de las situaciones y llegas a aprender de ellas- dice mientras pasa una de sus manos por la frente de Héctor reconfortándolo.

Héctor: -Lo aprendí del gran Rafiki- contesta haciendo mención a la película.

Alexa: -¿El mono con bastón del Rey León?- pregunta no estando segura de a quién se refiere.

Héctor: -Es un babuino- la corrige.

Alexa: -Es lo mismo- responde sin intención de diferenciarlos -¿Y qué fue lo que había dicho?- pregunta ya que no se acuerda mucho de esa película.

Héctor: -"El pasado puede doler, pero puedes huir de él o aprender", y vaya que si me dolió- con lo último hace salir una risita encantadora de ella, en cambio Héctor cambia a una expresión molesta.

-Que inculta eres al no saber su frase, ¿Cómo llegué a se tu novio?- dice con los brazos cruzados mientras niega con la cabeza decepcionado.

Alexa: -Pero sí me sé la de hakuna matata, además sabes que ya no me interesan las películas animadas- se defiende ante su acusación pero sigue sin cambiar su postura.

-Te propongo algo, cuando acabe la guerra nos veremos todas la películas que tú quieras- propone y su novio cambia de expresión en un abrir y cerrar de ojos.

Héctor: -¡Haré que se acabe mañana!- responde emocionado por la idea y con suficiente motivación como para que se enderece a pesar del dolor en su abdomen pero al final suelta un leve quejido.

Alexa deja salir una pequeña risita cautivando así a Héctor y se vuelve a recostar en la cama, abre su mano vendada en dirección a ella y Valeria lo agarra enredando sus dedos con él, sostienen sus manos dando tranquilidad a ambos.

Héctor: -¿Recibiste lo que te envié?- pregunta ya con una expresión seria.

Alexa: -Sí-

Héctor: -¿Y...?-

Alexa: -Todavía no lo he hecho- contesta antes que formulara la pregunta.

Héctor: -Está bien, úsalo cuando sea necesario ¿ok?- dice con un tono ligero de preocupación 

Alexa: -Ok- ante eso Héctor jala suavemente de la mano de su amada y lo lleva a sus labios donde le da un tierno beso.

-Ya me tengo que ir, tus padres no tardarán en regresar- lo dice a la vez que se levanta de la silla.

Héctor: -¿No quieres que te presente con ellos de una vez?- pregunta soltando su mano ya que ellos aun no saben de su relación.

Alexa: -Preferiría que lo hicieras en otra situación- contesta señalando el lugar y el estado en el que está.

Héctor: -Tienes razón, lo haré apropiadamente cuando llegue el momento- le muestra una sonrisa y ella se la devuelve, luego ella se acerca y le da un beso en la frente para luego abrazarlo con fuerza sorprendiendo a Héctor.

Alexa: -Regresa con vida ¿ok?- le pide intentando contener las lagrimas que se estaban formando.

Héctor: -Lo haré y veremos las películas juntos- contesta respondiendo a su abrazo sobandole la espalda para hacerla sentir mejor. Ella se separa mientras pasa sus manos por los ojos para que no la vea llorar yéndose de ahí y dejando solo a nuestro protagonista.

Luego de unos días...

Ángel va bajando de una camioneta ya estando en la base militar de la zona del silencio  totalmente recuperado y se dirige a las barracas en las que se encuentran sus amigos.

Amigos: -¡Eeehhhh!- al atravesar la puerta los chicos levantan las manos en celebración mientras que Paulina suelta un gran suspiro aliviada de que esté vivo.

Daniel: -Me debes 100 pesos pendejo- le exige a Emiliano señalándolo.

Emiliano: -Chale yo pensé que ya te habías petateado- dice un poco molesto por haber perdido la apuesta.

Daniel: -Nah, se va a necesitar más que eso para matar a este cabrón- señala mientras Ángel se sienta en su cama.

Ángel: -Que amigos tengo como para que se pongan a apostar si muero o no- habla mientras se acuesta.

Daniel: -Esos son lo mejores- dice con una sonrisa y con un pulgar arriba.

Paulina: -Yo sabia que ibas a estar bien y no aposté con ellos- se intenta salvar para no quedar mal con él.

Emiliano: -Mentira, eras la que más estaba preocupada de él, hasta te molestaste cuando hicimos la apuesta- replica para que Ángel no le crea.

Paulina: -¡Tú cállate!- lo regaña mientras Daniel se ríe de la discusión, Ángel voltea a ver a Gabriel y lo nota tranquilo.

Ángel: -¿Y tú por qué no apostaste?- le pregunta.

Gabriel: -Sabes que no me gusta apostar en este tipo de situaciones, además ya sabia el resultado final- dice serio con los brazos cruzados.

Ángel: -Veen, ese si es un verdadero amigo, no como otros- lo señala mientras mira a los demás.

Emiliano: -Ay, me parece que fue una indirecta muy directa- comenta a lo que dijo y sacando una sonrisa en los demás.


UN ÁNGEL EN LA GUERRA, El Surgimiento del Ángel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora