Instagram es una de las redes sociales más conocida por todo el mundo, esta misma puede conectarte con cualquier persona de cualquier país, incluso con una de las celebridades más calientes que nunca hayas conocido.
¿Que harías si un famoso te devue...
-No. A ver, deja eso- se quejó Daniel levantándose del pequeño sofá que había frente a los probadores. Yo suspire pesadamente mientras que robaba su lugar y me acostaba-; Y tú ¿que haces? ¡No llegaremos a comprar todos los vestidos si no cooperan!
-Yo ya elegí cual quiero- se cruzó de brazos Carly, indignada.
-¿Cuál? ¿El rojo?- pregunté.
-Sip. Me gusta como me queda.
-Pruebatelo de nuevo- pedí.
La verdad, que estaba media despistada esa tarde y no me había fijado muy bien en mi amiga cuando se pasó en frente nuestro mostrando el vestido rojo.
Carly bufo ante mi comentario pero de todas formas entro de nuevo a uno de los probadores y luego de cinco minutos salió vestida.
El vestido era hermoso. Tenía los hombros descubiertos y las mangas estaban en sus brazos. La tela en la parte del pecho se cruzaba de una manera que me encantaba y el largo de la falda rozaba el suelo. Tenía una pierna descubierta y se había puesto unos zapatos beige.
Me encantaba.
-Opino lo mismo. Que se lleve ese.- dije sonriendole.
-Igual yo- asintió Dani.
-¡Lo adoro!- chilló Amy-; con una trenza en el cabello irías preciosa.
-Gracias. Los amo- sonrió tan feliz como una niña mientras se veía al espejo.
Daniel sonrió mientras se giraba a mirar a Amy, la cual llevaba un vestido en la mano.
-Stop- levanto una mano en el aire, confundido-; pusiste en el chat que ya tenías un vestido.
-Je, je. Lo sé, pero es que este me ha gustado más- le guiño un ojo antes de meterse en el probador con la prenda en el antebrazo.
Salió al poco tiempo calzada con aquel vestido blanco.
Este también tenía los hombros descubiertos, pero la tela del pecho no se cruzaba, sólo tenía un especie de cinto sobre sus caderas. El largo de la falda tocaba el piso y también tenía una pierna al descubierto.
Me encantaba y a Amy le quedaba espectacular. Ni siquiera hacia falta que le dijéramos que estaba hermosa, ella lo sabía.
-¿Y tú, Samay?
-¿Eh? Ah, no se. Todavía no me gusta ninguno.
-¿Y que esperas? Levantate y sigamos viendo.
-Yo vi una celeste que me gustó para ti- habló Carly una vez que se dejó de ver en el gran espejo de la pared. Sin esperar respuesta me tomo del brazo y me llevo hasta la sección en donde había visto aquel vestido.
Por un momento dude y pensé que no me iba a gustar como el resto que había visto, pero esa vez me tomé el trabajo de verlo más detenidamente y la verdad que no me disgustó para nada.
Lo descolgue y me volví a los probadores.
Una vez dentro me saqué la ropa y con un poco de dificultad me lo puse. Me mire en el espejo frente a mi y me sonreí.
El vestido era hermoso y me encantaba. Las mangas eran dos simples tiras que estaban sobre mis hombros y al ir a mi espalda se cruzaban en triángulos. El pecho y una parte de la falda estaba cubiertas de flores bordadas del mismo color del vestido, celeste cielo.
La falda chocaba con el piso y al igual que a mis amigas esta tenía un corte al costado, mostrando gran parte de mi pierna.
Me vi a mi misma con unos zapatos marrones que tenía en mi casa y con el pelo ondulado hacia un lado. Estaba segura que quería ir así en el día de mi graduación.
Cuando salí Amy volvió a chillar emocionada y me repitió más de tres veces que le encantaba. Carly se autofelicitó por haberme obligado a probarmelo y Daniel me juro que si no lo compraba me bloquearía de todas las redes sociales.
Su comentario me hizo gracia y no pude evitar reírme junto a mis amigas.
-Deberias mandarle foto a Robert, ya que no puede venir- Carly subió y bajo las cejas de manera rara.
Fingi una sonrisa. Les había dicho que no me importaba mucho que él no se pudiese presentar ese día, cuando en realidad estaba bastante triste por ese tema.
Me hacía demasiado ilusión poder pasar ese día con él, pero lo entendía. Trabajo es trabajo.
-Tienes razón.
Me fui frente al espejo y tomé mi móvil. Cuando le mandé la foto lo acompañe con un mensaje que decía "¿que te parece?"
No tardó mucho en responder.
Roby: mierda. Me encanta.
Roby: no puedo creer que me voy a perder poder verte con ese vestido
Roby: saqué pasaje para ir allá dos días después de tu graduación
Roby: ¿puedes ponerte ese vestido para abrirme la puerta?
Yo: HAHAHAH
Yo: lo pensaré lo pensaré
Yo: si tu intención es sacármelo, entonces si
Roby: te lo sacaré, creeme
(Fotos de los vestidos)
Samay.
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Carly.
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Amy.
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