Capitulo 2

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Luisa

En el funeral, todos estaban recordando alegres a mi abuelita, todos decían que era de las mejores personas que existían, que siempre tenía una sonrisa y era muy alegre, todo eso era cierto, ella era una mezcla de todo lo bonito que había en el mundo.
La funeraria olía a pan y café tal como mi abuelita, mis amigos fueron a verme pero sus palabras eran inaudibles para mí, solo podía escuchar mis sollozos y como mi corazón se iba rompiendo a cada segundo.
Cuando el velorio iba a terminar fui a verla una última vez, al verla ahí, sin vida, murieron mis sueños, mis esperanzas, mis alegrías y todo aquello que podía poseer, solo quedaron penas y lamentos.
Al día siguiente la sepultaron y con ella se fueron todas mis ganas de vivir.
El novenario acostumbrado a realizarse en mi familia fue un completo tormento en el cual no podía dejar de ahogarme en lágrimas cada vez que escuchaba su nombre.
Ella prometió quedarse conmigo ¿Porque no estaba aquí?
En que momento mi felicidad se me escapó de las manos, acaso el mundo tan lindo del que ella me hablaba no existía, mi mundo empezó a fragmentarse y ya no había nadie que pudiera salvarme.
Los días pasaban lento y no encontraba nada que pudiera hacerme sentir como me sentía a su lado.
Ni siquiera yo podía reconocerme ¿Cómo es posible que de un día a otro la vida cambie tan severamente?
Yo era una buena niña ¿Que hice yo para merecer esto? ¿Yo tenía la culpa? Talvez estaba demasiado cansada de contarme historias o de jugar conmigo, tal vez era tiempo de que la vida me enseñará de la peor manera que nada es para siempre.



𝓛𝓸𝓼 𝓶𝓸𝓾𝓷𝓼𝓽𝓻𝓸𝓼 𝓺𝓾𝓮 𝓶𝓪𝓽𝓪𝓻𝓸𝓷 𝓪 𝓛𝓾𝓲𝓼𝓪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora