Octubre
Me doy una ducha y luego miro mi armario. Qué me pongo para esta cita con Katsuki?
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Tengo una cita con Katsuki? No, no, no, no, no. NO. Solo salimos como amigos eso es. No hay nada más. Me pruebo un vestido blanco de manga larga de lana con unas medias y botines... No, es demasiado arreglado solo vamos a cenar. Mejor algo más informal. Me pongo unos pantalones negros ajustados con agujeros una camiseta blanca de la NASA y un jersey ajustado de lana de cuello alto azul cielo con unas convers blancas. Perfecto. Arreglado pero informal. Me peino, me maquillo un poco y me hecho mi colonia preferida es muy suave y dulce pero sin ser empalagoso, luego cojo el bolso, con el móvil, el cargador, monedero con dinero suficiente para dos y algo más para emergencias y el casco, porque no se a donde iremos. Miro el reloj mierda! Llego 10 minutos tarde. Me meto las llaves de mi habitación en el bolsillo trasero, pico al ascensor pero parece que no responde. Así que bajo corriendo por las escaleras.
Llego abajo un poco sudada, y lo primero que veo es a Katsuki muy enfadado.
- Llegas tarde estúpida!!- me grita con su ceño fruncido. Mientras me mira de arriba a bajo.
- Lo siento... Me he entretenido un poco.- le digo bajando la mirada.
- Venga vámonos, no quiero llegar otra vez tarde.- me dice mientras se da la vuelta. Yo sonrío y le sigo. Katsuki está muy guapo con su ropa casual. Lleva también unos pantalones negros rotos, con una camiseta blanca de manga corta y una chaqueta deportiva en granate y blanco. Nos vamos a la moto pero no la cogemos dejamos mi casco guardado ahí.
- Vamos cara redonda espabila o nos cerraran el local.- me gruñe mientras camina más rápido, como siempre me tengo que adaptar yo a su paso. Pero le cojo el ritmo rápido. Vamos caminando por la calle los dos juntos en silencio, pero no es como si me molestara. Lo que si me da curiosidad.
- A donde vamos?- le pregunto curiosa. Estamos cerca de la cuidad, pero nunca he estado por esta zona.
- Ya lo verás.- me dice. Yo inflo las mejillas, si que es reservado.
Entramos en un pequeño local pero muy acogedor y familiar.
- Bienvenidos, mesa para dos.- nos dice el camarero. Primero a Katsuki y luego a mi.
- Si.- le responde Katsuki de forma seca.
Nos acompaña a una mesa y nos sentamos.
- Que desea la señorita para beber mientras espera?- me dice con una mirada y una sonrisa dulce.
- Pues... Una cerveza por favor.- le digo con una sonrisa.
- Y para usted?- le pregunta a Katsuki
- Una cerveza de doble malta.- le responde mirando le con ojos desafiantes.
- Enseguida.- dice y se va.
Voy mirando la carta y parece que hay un montón de cosas ricas. Nos traen las cervezas y pedimos la comida. Empiezo a comer y beber, tengo tanta sed que enseguida me acabo la cerveza.
- Qué te has pedido tu? Me dejas probar?- le pregunto a Katsuki.
- Claro adelante- me dice con una sonrisa de suficiencia en la cara. A que viene esa cara ahora.
Lo se dos segundos después de probar sus fideos con caldo.Calor. Ardor. Quema. Esta comida está extra picante. Tendría que haber lo recordado, a Katsuki le gusta mucho la comida picante... Pero no sabía que tanto!!!Comienzo a llorar y sacar mi lengua, no lo resisto más y cojo su jarra de cerveza que estaba a medias y me la bebo toda de casi un trago. Mientras Katsuki no para de reírse de mi.
- Eeeh!! Esaa era mi cerveza estúpida!- me grita quitando me la jarra vacía.
- Pero como puedes comer esto, no tienes estómago.- le digo cabreada, lo ha hecho a propósito. Por eso sonreía de esa forma.
- Eres una exagerada eso no es nada.- me dice con una sonrisa.
- Todo bien por aquí?- pregunta el camarero mirando me a mi de forma amable.
- Sí, todo bien- le digo con una sonrisa.
- Yo quiero otra cerveza.- le dice Katsuki con una mirada seria.
- Por supuesto.- le dice.
- Ooh otra igual para mi, estaba muy buena tu cerveza.- le digo a Katsuki.
- Enseguida- me dice el camarero amable con una sonrisa.
Nos trae la cerveza y seguimos comiendo cada uno su plato. Antes de traer nos la cuenta aparece el camarero con un plato y me lo pone delante. Es un mochi de fresa.
- Yo no he pedido esto...- le digo al camarero pero ahora que lo tengo...
- Es un regalo de la casa, no se preocupe.- me dice con una sonrisa muy amable.
- Pues gracias- le digo con una sonrisa.
Devoro el postre feliz. Un postre delicioso y gratis que más puedo pedir. Cuando voy a pagar el camarero amable me da una de las tarjetas del local y me pide que vuelva cuando quiera. Katsuki me saca a rastras del local y con cara de malas pulgas.
- Se puede saber que te pasa?- le pregunto yo mientras Katsuki me va arrastrando.
- Me ponen de los nervios los bastardos inútiles.- me grita sin mirar me.
- Lo dices por el camarero?- le pregunto confundida.- A mi me ha parecido muy amable.
- Claro que sí estúpida porque quería follarte!- grita en medio de la calle haciendo que varias personas nos miren y se rían.
- Katsukiii!! No seas brutoo!- le riño yo un poco colorada. Será verdad que el camarero quería eso?- Eso te lo has inventado tu!- entonces él se para y se queda muy cerca mío.
- Mira la puta tarjeta que te ha dado. Me juego lo que quieras a que tiene un número escrito en la parte de atrás.- me dice serio y desafiante.
- Acepto! Si no hay número me tendrás que hacer un pastel de fresas.- le digo yo enfadada y saco la tarjeta del monedero. Mierda! No solo tiene el número, tiene el nombre y un "llamame". He perdido. Y eso se debe de notar en mi cara porque Katsuki sonríe feliz.
- Ja! Que te dije!-me dice él. Yo me pongo roja como un tomate. En verdad si que era muy amable, y yo muy inocente... Como puedes ser así de confiada? Nadie te da nada gratis, siempre hay una trampa.
- Está bien, tu ganas ese tío me quería follar, pero eso sigue sin explicar tu mal humor.- le recuerdo yo enfadada.
- Me jode que no me atiendan bien joder, por muy buena que estés yo también soy un cliente, si quiere ligar que se vaya a otro jodido lugar.- me dice volviendo a caminar pero esta vez no me coge de la mano. Y sigue con su cara de malas pulgas mientras se aleja. Yo le sigo por detrás un poco desanimada. Me lo he pasado muy bien con él en la cena no quiero regresar a mi habitación todavía. No quiero estar sola. Y como por arte de magia aparece un cartel que me llama la atención. Es perfecto. Voy corriendo hacia Katsuki y le cojo de la mano mientras lo arrastro.
- Siguemee!!- le digo con una sonrisa. Él solo levanta una ceja y me sigue en silencio. Le llevo hasta la puerta del arcade.
- Has ganado la apuesta y como no habías apostado nada he pensado que esto te gustaría.- le digo en parte es verdad lo que digo. A él estos sitios le gustan. Vinimos una vez en segundo año en una de las salidas conjuntas que hicimos. Me fije en como a pesar de sus gritos contra las maquinas sonreía. Le miro y él parece serio. Puede que no le haya gustado la idea. Bajo un poco la mirada decepcionada por si no es lo que quería él.
- Estás segura?- me pregunta yo levanto la mirada y le veo con una sonrisa torcida y ojos desafiantes.- No quiero que llores cuando te aplaste como a una cucaracha.- me dice entrando al local.
- Aaahh!!- le grito yo entrando detrás de él.
Jugamos al matatopos donde le gano yo 3 a 2. Luego jugamos al hoquey aire donde me gana él 3 a 1. Después jugamos conjuntamente a un juego de matar zombies pero perdemos casi en la última partida porque me llevo un buen susto y se me olvida disparar. Yo me río mientras Katsuki me gruñe por mi falta de concentración. Seguimos caminando cuando veo un juego de machacar a un villano, son de estos que miden tu fuerza con el puño. Es lo que necesito para descargar toda mis debilidades. Paro a Katsuki cogiendo le de la camiseta, él me mira y yo le señalo el juego que quiero, lo mira y se encoge de hombros.
Cuando vamos para allí veo que hay unos adolescentes con pintas de macarras, de 14 o 15 años, compitiendo entre ellos mientras se ríen. Yo espero impaciente mi turno, mientras Katsuki los mira mal por el escándalo que están montando.
- Ehh dejar pasar al señorito que quiere impresionar a su dulce novia.- se burla uno de los adolescentes, yo supongo que será el líder de la banda. Los otros dos se ríen. Menudos payasos.
- No seas imbécil, la que va a jugar es ella.- le suelta Katsuki mientras se acerca a él, Katsuki le saca como dos cabezas pero el macarra no se acobarda.
- Entonces hagamos una competición, si gano yo me dais vuestros tíquets. Y si gana ella os damos los nuestros.- le dice a Katsuki mientras extiende su mano. Katsuki se la estrecha. Toda esta situación me ha cabreado un poco. El tío me ha dicho que soy dulce... Otro imbécil que me ve débil. Si me lo hubiera dicho hace unas horas no le habría negado nada. Me comporte como una tonta, débil por culpa de Deku... Pensar en eso me cabrea todavía más.
- Biien, 450 puntoss! Superalo monada.- me dice mientras me mira descaradamente. Pero yo le ignoro. Cojo toda la rabia y la impotencia de estos días y la acumulo en mi puño y suelto un golpe de derecha. La maquina suena y hace luces.
- Felicidades eres el nuevo record 875 puntos.
- Loo logree!!- le digo chocando mi puño con Katsuki.- He superado mi record de 700. Uuaaa me siento mucho mejor ahora.- miro a los chicos que se han quedado pasmados. Los miro desafiantes y les digo.
- No deberías juzgar a alguien por su apariencia eso esta muy mal. Si queréis demostrar algo hacerlo con hechos no con palabras huecas.- les regaño como una madre, y eso que solo tengo 3 o 4 años más que ellos.
- Lo sentimos, señorita.- se encogen de hombros. Yo les sonrío para animar los un poco. Al final les digo que no hace falta que me den sus tíquets, que prefiero que sean más amables.
Después de este enfrentamiento con los chicos jugamos un par de juegos más. Paramos delante de la tienda para intercambiar los tíquets por un regalo.
- Buuaaa no se que elegir hay tantas cosas bonitas que me gustaan!- le digo a Katsuki llevamos como 10 minutos aquí y su pie ya no aguanta más tanta impaciencia.
- QUIERES ELEGIR DE UNA PUTA VEZ! AGH ME LARGOO FUERA.- me grita ya fuera de si.
- Joo... Que aburrido...- le digo pero él ya no está aquí. Al final escojo un conejito de peluche. Pero cuando aparto un poco la vista veo un llavero que me llama la atención, es la granada de mano de Katsuki con un enorme BOOM. Es increíble Katsuki ya tiene su propio merchandising. Normal, junto con Deku y Shotokun son los tres más grandes, han estado en muchas misiones y ya son famosos. A su lado veo un llavero de saturno, mi planeta preferido que también me gusta. Pero no me llega para las 3 cosas. Así que dejo el sr. Conejito y me llevo los dos llaveros.
Katsuki se está tomando algo caliente, mierda lo he dejado mucho tiempo esperando.
- Loo sientoo, lo sieentoo.- le digo acercando me a él.
- ERES MUY LENTA CARA REDONDA! CUANTO TIEMPO MÁS ME PENSABAS HACER ESPERAR.- me dice cabreado.
- Lo siento de verdad- le digo muy apenada mirando le a los ojos.
- Agh está bien, joder! Que te has cogido, ya puede ser algo bueno si has tardado tanto.- comenzamos a caminar uno al lado del otro Katsuki pone sus manos en los bolsillos y yo le enseño los dos llaveros.
- Para que cojones quieres tantos llaveros.- me dice él gruñendo. Yo inflo mis mejillas enfadada.
- Uno es para ti, tontoo!- le digo enfadada.
- YO NO TE HE PEDIDO NADA! Y NO ME LLAMES TONTO, ESTÚPIDA CARA REDONDA!!- me grita él de vuelta.
- Yaa lo se que no me has pedido nada pero yo quiero darte lo!!- le grito yo en respuesta. Mira que llega a ser orgulloso y cabezota cuando quiere.- Yo solo quiero darte las gracias, no paras de hacer cosas por mi...- le digo de forma sincera pero con la mirada baja.
- Mira que eres una estúpida cara redonda! Somos amigos, lo recuerdas.- me da uno de sus golpes en la cabeza. Y yo cierro mis ojos instantaneamente. Él coge los dos llaveros uno con cada mano.
- Elige una mano.- me ordena. No se en que mano está cada llavero. Me gusta, así no se cual de los dos me toca. Elijo la derecha y me toca el llavero de Katsuki. Sonrío de emoción.
- Y ahora vámonos, o no podremos entrar en los dormitorios.- me dice girando se.
Yo le sigo y caminamos el uno al lado del otro. Hasta que llegamos a las habitaciones. Como vamos a la misma planta Katsuki me acompaña. Una vez delante de la puerta abro el bolso y busco la llave... No está. Saco todo lo del bolso y miro en todos los bolsillos. Nada. Busco en los pantalones. Tampoco.
- Qué cojones haces?-me dice Katsuki mirando me extrañado.
- La llave de mi habitación no está!!- le digo desesperada.- Ya se les enviare un mensaje a las chicas, puede que alguna este aquí y me acoja en su cuarto.
Chat "chicas 100% plus ultra"
Ochako: Hola chicas se que es tarde pero alguna esta despierta en la habitación de la residencia? No encuentro mi llave. Ayudaa🥺😭😵
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El chico que siempre me mira
FanficSeguro que te han dicho: Mirate la punta de la nariz. Y al hacer lo ya no puedes ver nada más que no sea la punta de tu nariz. O cuando tienes una mancha y ya no puedes dejar de ver la. Puede en el amor pasar lo mismo? Fijarte tanto en alguien que n...