Capítulo 1

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La intensa lluvia me obliga a correr por toda la acera, pisando charcos y chocando con personas que se encuentran en la misma circunstancias que yo. A unos pasos visualizó la entrada del Hospital y suspiro aliviada. Me detengo en la puerta cuando la lluvia se suelta con mucha más fuerza.

Jamás he creído en los meteorólogos, pero les doy el crédito esta vez, mi negativa sobre si tendrían razón me hizo no cargar con un paraguas y ahora sufría en cierta forma las consecuencias. Solo unos zapatos empapados, el cabello medio crispado y mi uniforme blanco arruinado.

Me alejé de la entrada y fui directo al área de casilleros donde normalmente todas las enfermeras dejamos nuestras pertenencias. Me encuentro con varias compañeras y compañeros, el turno de la tarde tomaría su lugar en una parte de minutos y todos estaban igual de apresurados que yo.

—Diablos, el infierno esta cayendo sobre nosotros—Rock Lee llega más empapado que yo—. Mal día para usar el uniforme blanco al salir de casa— . Sakura tú también estás empapada.

Lo nota, creo que todos aquí lo vieron.

—No sé cómo trabajaré así.

—Oye, Sakura —Anko asoma la cabeza en la puerta —. El directo quiere hablar contigo.

Todos me miran como si hubiera hecho algo malo, es poco usual que el directo llame a algunos de los enfermeros al menos que haya una queja o problema de peso, no siempre se mete en asuntos insignificantes. Hasta donde sé, no he hecho algo fuera del reglamento.

—¿Ahora?

—Si, te espera en su oficina.

Cierto mi casillero y camino directo al elevador. Espero paciente a que este se abra después de haber coleccionado el piso deseado. Paso las manos sobre mi cabeza peinando un poco, no estaré presentable como debería, estoy muy mojada.

Subo al elevador segundos después y espero mirando como número se enciende al pasar de un piso a otro

Hasta que finalmente llegó a mi destino, un largo pasillo me separa de esa aterradora puerta y tocó delicadamente con el puño.

—Pase—la voz del señor Jiraiya suena del otro lado.

Entró con una sonrisa confiada y a verme hace una cara de sorpresa y solo me encojo de hombros.

—Hola.

—Me hubieras llamado, yo hubiera ido por ti.

—Está bien, no importa. Lo importante es que llegue. ¿Para que me llamaste?

—Toma asiento por favor—obedezco —. Sakura conozco a tus padres desde que fuimos unos niños en pañales, te vi nacer y se lo especial que eres. Necesito un favor de tu parte, es muy importante.

—Te escucho.

—Hay un pueblo muy lejos de aquí, fuera de la ciudad escondido en las profundidad del bosque más grande de la zona.

—¿El impenetrable bosque de la muerte? —dudo que haya un pueblo en ese lugar. Sus historias son malas y aterradoras, nadie quería vivir por esos rumbos.

—Si, ese —se pone de pie algo tenso—. Aunque parezca raro, hay un pueblo en ese lugar, lleno de habitantes, hombres, mujeres, niños y mascotas. Un pueblo con habitantes tan normales como tú y yo. Hace una semana sufrieron un ataque muy cruel y horrible. Termino con vidas perdidas y mucha gente lastimada. Un colega vive en ese lugar, y pidió ayuda una semana después por la mala señal de hay en ese punto.

—¿Que los atacó? —sentí curiosidad.

—Al parecer fue un ataque a traición por otro pueblo. No es el único, aunque sólo haga énfasis en él. El punto aquí, es que necesita una ayudante que colabore con él en todo—hace una pausa y se sienta de nuevo después de caminar de un lado a otro—. Pensé en ti.

Luna rosa [Sasusaku] [√]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora