[04]

3.2K 541 419
                                    

No puede
°:•Ser•:°

Kirishima y Bakugō se han quedado varias veces a dormir en la habitación del otro.

No es ningún tema escandaloso ni para ellos ni para su vecino de piso. Shōji.

Ya que son amigos. Está bien ser cercanos.
Es saludable y el compartir momentos especiales con los amigos afianza las uniones.

El mismo Kirishima, haciendo a un lado su gusto más allá de lo amistoso por Katsuki, reconoce lo inmensamente cálido que se siente poder ser capaz de ver al rubio en un momento de "vulnerabilidad" como lo es dormir.

Ya que este suele querer demostrar fuerza y poder en todo momento. Inquieto con la sola idea de lucir débil.

Pero, aun así, permitiéndole verlo dormido. Permitiéndole dormir con él.

Es por eso que siempre procura hacer la estadía ajena en su habitación lo más cómoda posible.

Esa noche en específico, Katsuki había decidido quedarse con Kirishima luego de que, tras una prolongada sesión de estudio, notara lo frío del ambiente.

Mierda, por haber pasado toda la tarde en el cuarto del pelirojo seguro el suyo estaba igual a un tempano de hielo.

Ni de joda volvería.

Además... Bueno...

No. Nada. Ningún "además".

Iba a jodidamente dormir.

Por lo que, luego de meterse en la cama de Kirishima, ocupando el lugar junto al muro, se giró para dar la espalda al pelirojo.

Este no tardó mucho más en, también, acostarse junto a Bakugō. Manteniendo sagradamente el espacio personal ajeno, sin llegar a rozarlo ni por casualidad.

Estaba bien tener confianza y todo. Pero no quería aprovecharse de eso mismo para cometer un acto incómodo contra Katsuki.

Por lo que mantuvo su espacio y el del rubio a salvo a pesar de la estrechez de la cama. Retrocediendo en su lugar cada que el "dormido" Bakugō pasaba a tocarlo con sus brazos o espalda.

Pero este, por otro lado, se hallaba un poco irritado.

Y es que Kirishima parece rechazar casi con asco su tacto. Ni siquiera a alcanzado a pegar su espalda a la ajena antes de que el pelirojo saltará en su sitio. Alejándose con violencia.

Misma acción que llevó a que Katsuki se pregunta ¿Cuánta cama le quedará para seguir escapando?

Cosa que es respondida luego de que, tras oír un jadeo sonoroso de parte del pelirojo, un sonido de evidente golpe hiciera eco en la habitación.

Indicando que el teñido había acabado por caerse de la cama.

★°:•∞•:°★

Katsuki, a pesar de haber considerado levemente divertido lo de la noche anterior, ahora estaba comenzando a verlo con ojos de incredulidad.

¿Estaba haciendo sentir incómodo a Kirishima con su acercamiento?

Le parece extraño. Ya que suele ser, de hecho, Eijirō quien inicia los acercamientos físicos con él.

Abrazándolo de costado de vez en cuando, posando su codo sobre su hombro al caminar e incluso tocando o golpeando su pecho, brazos y espalda mientras le habla.

A Bakugō no le molesta.

Bueno, no le molesta tanto. Ya que aveces si se le hace algo irritante esa necesidad de Kirishima por siempre estar toqueteandolo y manteniendo cercanía física con su persona.

Pero es una molestia que, la mayoría del tiempo, pasa por alto. Ya que, por supuesto, le gusta el pelirojo y todo lo que este conlleva.

Lo cual va desde la masculinidad, hasta las sonrisas a cada momento y los acercamientos repentinos.

Pero le ha hecho sentir algo inquieto la idea de pensar que, en realidad, Eijirō no disfruta de su cercanía como él lo pensó.

Porque todo lo que lleva de la tarde de aquel día miércoles, en la cual ha intentado varios más acercamientos físicos con el pelirojo, se ha visto rechazado por el otro.

- Perdón -se disculpó apresurado Kirishima, quitando su mano de debajo de la del rubio con apuro y una sonrisa amplia

A pesar de que fue absolutamente su intención tocarle la mano.

Kirishima lo rechazó e, incluso, se alejó un poco (con "discreción") de él.

Así que intentó, más tarde, estando ambos solos sentados en el sofá de la sala común viendo una película, sentarse cercano al teñido.

Pero este se alejó todo lo que él avanzó.

Y es que, en la propia mente del de cabello alzado, estaba el pensamiento de que Katsuki solo estaba buscando poder extenderse en el sofá. Estar cómodo. Por lo que él, amablemente, le estaba brindando más espacio en el cual podría acomodarse.

Pero, sin ánimos de "humillarse" aún más, Katsuki detuvo su acciones y se dedicó a tratar de prestar atención al filme de acción que se mostraba en la televisión.

Sin embargo, su cerebro siguió trabajando incesante en busca de una respuesta para la situación.

Y es que, mierda, no puede ser...

¿Solo ha estado incomodando a Kirishima todo este tiempo?

No puede ser   [KiriBakuShima]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora