capitulo 12

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—¿Sucede algo Tsuyu-chan?— Preguntó Uraraka al ver a su amiga tan distraída y pensativa, algo que definitivamente no era normal, no en ella.

—Nada, puede que sea sólo mi imaginación Ochako-chan, descuida.

—Si estas tan pensativa no puede no ser nada Tsuyu-chan, así que cuenta— Pidió o mejor dicho ordenó la castaña, animándole a contarle aquello que la tenía con aquella actitud tan retraída.

—Es solo que Tamaki-chan estaba algo raro hoy, kero.

—¿Raro?, ¿A qué te refieres?— Preguntó con evidente confusión.

—Estaba más callado de lo normal y parecía pensativo— Respondió la de Quirk de rana al recordar la actitud del joven.

La castaña pareció reflexionar sus palabras, pensando en una respuesta a la preocupación de su amiga.

—Bueno, ¿Le preguntaste que sucedía?

Asintió levemente.

—Dijo que no era nada, aunque era obvio que mentía, además se comportó algo distante, kero— Pese al tono neutral de sus palabras, Uraraka pudo percatarse de que el comportamiento del azabache le había afectado.

—Descuida Tsuyu-chan, probablemente no es nada importante y si algo le preocupase te apuesto que no tiene nada que ver contigo debe de ser con respecto a sus clases, este año se gradúan debe de estar preocupado y estresado por todo eso.

Ante la posibilidad y de pensarla por unos segundos la peliverde asintió convencida de la respuesta de su amiga, probablemente la castaña tenía razón y solo estaba sobre pensando las cosas de más, si algo malo pasaba estaba segura de que Tamaki no dudaría en contarle.

—Tienes razón Ochako-chan, gracias me siento más tranquila, kero— Sonrío la de rasgos anfibios.

—Tienes razón Ochako-chan, gracias me siento más tranquila, kero— Sonrío la de rasgos anfibios

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Su suspensión comenzó ese día, no fue a clases algo que la desánimo, aún así se levantó tarde. Se ducho, cambio y bajo a la planta baja de la residencia.

—Hasta que te dignas a bajar rana— La voz de Bakugou llegó a ella en cuanto salió del ascensor, el chico llevaba unas bolsas de basura en mano.

—Lo siento Bakugou-chan, me quedé dormida, kero— Se disculpó la joven.

—Tsk, como sea, comienza a limpiar no pienso hacer todo yo sólo.

—De acuerdo Bakugou-chan.

No discutiría con él, no lo haría, intentaría que todo fuese como era cuando limpiaban el aula, en silencio, solo era por dos días.

Tras varias horas de limpieza junto al rubio finalmente habían terminado parte de la limpieza y justo antes de que terminaran las clases, sinceramente para la peliverde el tiempo había pasado relativamente rápido.

Sacó su celular con la esperanza de tener algún mensaje de Tamaki, pero nada, él chico no le había escrito ese día, extrañada por ese hecho decidió que lo mejor sería mandarle un mensaje.

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