Con cada palabra que escuchaba sus pensamientos comenzaban a revolotear, imaginando los posibles escenarios que aquella rubia pudiera estar construyendo.
—Eso fue todo...— terminó de contar Tenten. Miró a su amigo, su rostro estaba serio, pero sabía que aunque no lo expresará, estaba preocupado—. No creo que sea algo de lo que preocuparse tanto Sasuke...tal vez y solo quería molestar a Sakura e Ino.— dijo con tranquilidad.
Sasuke le dedicó una tenue sonrisa torcida, pero ante los orbes castaños la intención era obvia.
La tarea que realizaban a diario había sido dejada de lado por la insistencia del azabache por saber los detalles de la conversación que había tenido durante el almuerzo con Shion.
—Aún así alejate de ella y dime si crees que intenta hacer algo que parezca sospechoso.— advirtió con seriedad.
—¿No crees que estás exagerando un poco Sasuke?, mejor olvidémonos de eso.— dijo Tenten, regresando la mirada a sus apuntes, pero las manos de su compañero tomando su rostro la hizo detenerse.
Lo miró directamente sin entender el porque del gesto, el tacto era cálido y sus manos casi abarcaban completamente sus mejillas.
Sasuke analizó la situación demasiado tarde, lo había hecho sin pensar, pero ya no podía retroceder, y tampoco quería, sintiendo la suave textura de su piel entre sus dedos. Lenta y suavemente comenzó a acariciar la piel de sus mejillas con sus pulgares, en un impulso que había tenido como todos los anteriores.
—Hablo enserio Tenten.— emitió al notar que el silencio de estaba comenzando a alargar, lo cual podría llegar a ser incómodo al no tener una justificación su accionar—. No la conocemos lo suficiente, así que prefiero prevenir.— dijo con voz profunda, pero que a la vez reflejaban una gran preocupación.
Tenten lo miró fijamente sin comprender el porqué de ese acercamiento tan íntimo, al parecer si era un tema del cual preocuparse. Le sonrió con la misma calidez de siempre, tomando sus manos para juntarlas con las suyas.
—Esta bien Sasuke, te haré caso y no me acercaré a esas chicas...lo prometo, con el corazón.
Sasuke miró sus manos entrelazadas con las de ella, sentía una calidez placentera emanar del calor que el contacto desprendía. Subió la mirada y observó sus labios, aquellos que lo estaban comenzando a tentar cada vez más y que no sabía cuánto más podría controlar las ganas de poder poseerlos por primera vez con los suyos, por lo menos que pudiera rozarlos.
—No sé que haría si algo llegara a pasarte.— susurró el pelinegro para sí mismo, sin que la castaña alcanzara a escuchar. Le avergonzaría si llegara a hacerlo, y aunque Tenten había notado las tenues palabras salir de sus labios sin llegar a entender, no preguntó, algo que Sasuke agradeció. En cambio, se limitó a sonreírle de nuevo, soltando sus manos y volviendo a prestar atención a su tarea.
Sintiendo el vacío que dejaba en sus manos al dejar de hacer contacto, Sasuke no apartó la mirada de ella, solía ser tan alegre que le aterraba la idea de verla llorar de nuevo, había pasado por momentos tan difíciles que hacerla sonreír era su objetivo diario, protegerla era su prioridad.
—Tenten...— la chica lo volvió a mirar prestándole atención.
—¿Mm?
Con la soledad y silencio que emanaba su habitación, la atmósfera íntima que los rodeaba le provocaba un aumento en sus sentimientos y emociones, sintiendo la necesidad de dejar salir aquello que había aceptado hacia un tiempo. Itachi le había dicho que sabría que hacer en el momento adecuado, y aunque en aquel momento se limitó a girar los ojos con molestia por el consejo absurdo de su hermano, ahora comenzaba a tomar sentido.
