Una mexicana en Naruto [Sasuke uchiha] Sin Editar ©

18-•beschädigen•

06/08/??

Era de noche. Me había quedado hasta tarde entrenado con el pervertido de Ebisu-sensei. Estaba bien puteada. Las aguas termales estaban exageradamente calientes, parecía que lo hacía aproposito.

—No tengo dinero, ni nada que dar. Lo único que tengo es amor para dar; si así tú me quieres te puedo querer. Pero no si no puedes ni modo que hacer.

—¿Karma?—Escuché su voz.

—No, soy el chupacabras.—Intenté una voz aterradora.

—Ya se que eres tú.

—¿Cómo estás? Te vez cansado.

—Estaba bien.

—¿Estabas?—Pregunté.

—Sí. Estaba, hasta que llegaste tú y arruinaste mi paz.

—Ah. Tu sabes que eso no es cierto. Te haces, me amas y no lo aceptas. ¿Te has imaginado una vida sin mi?

—Si, lo hago todo el tiempo. Cada hora, cada segundo. Es mi pasatiempo favorito.

—¡Que bueno, me alegra un chingo!—Me senté junto a el.

—Te ves cansada. Deberías irte a tu casa.

—Estoy cansada. Gasté mucho chakra, pero alch me vale verga.

—En vez de perder el tiempo conmigo, es mejor que vayas con tu mamá y papá a descansar.

—No tengo papá.

jajaja, que casualidad.

—No sabía.

—Se que te mueres de curiosidad. Te contaré. Un día, mi mamá y mi papá se amaban mucho. Entonces, llegué yo. Pero cuando pasó eso, mi mamá le dijo a mi papá, pero a mí papá no le agrado tanto la noticia como a mi mamá. Por lo tanto, el prefirió irse por lo cigarros. Eso es todo. Pero no hay pedo.

—Chale.

—Si, chale. Pero lo tuyo está más cabrón.—Hubo un silencio. Mejor me decidí acostar. Estábamos en el pasto. Después de todo, se veía que kakashi-sensei era culero con Sasuke. Le exigía, aún así, el está a la altura. Cuando voltee a ver a Sasuke, estaba callado. Tenía los ojos cerrados y respiraba tranquilamente. Sus manos parecían golpeadas. Con algunos cayos por exceso de chakra en la palma de su mano. Mientras lo examinaba mire una gardenia blanca.

—¿Que me ves?

—Lo feo que te ves.

—A.

—E—Me reí—.Veo que tienes una de las gardenias que te regalé.

—Tsk, no lo hago por qué me la regalaste.

—¿Entonces?

—No se. Solo me gusta.