𝐋𝐚𝐬 𝐂𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐐𝐮𝐞 𝐎𝐝𝐢𝐨 - 𝐓𝐚𝐞𝐆𝐲𝐮

☂︎ 𝑺𝒆𝒏𝒕𝒊𝒎𝒊𝒆𝒏𝒕𝒐𝒔 𝑬𝒏𝒄𝒐𝒏𝒕𝒓𝒂𝒅𝒐𝒔 ☂︎

La noche llegó tan pronto que TaeHyun se sentía un tonto por pensar que su tarde de películas duraría un poco más. Se removió entre los brazos de BeomGyu, que parecía no querer soltarlo.

- Hora de dormir - anunció - ya es tarde.

- Nos hemos quedado hasta más tarde, ¿por qué ahora no? -

- Porque mañana tenemos clases y un exámen - logró soltarse - a la cama.

- ¿Vas a dormir conmigo, Tae? -

Kang rodó los ojos, pero sus mejillas se tornaron rojas. Se dio vuelta, intentando parecer serio.

- No, ya eres muy grande como para que duerma contigo -

Se levantó y caminó a su cuarto, entrando y tomando su mochila. La abrió, buscando su diario.

Oh sorpresa no lo encontró.

Sus nervios empezaron a actuar, haciendo memoria de donde podría haberlo dejado. Se sentía estúpido por perder algo de tal valor, que podía ser malinterpretado por muchos.

La puerta se abrió y el evitó gritar del susto. BeomGyu sonrió y amarcó cual princesa, tomando de paso la pijama del menor.

- ¡Bajame! ¡bajame! ¡bajame! -

- Cosita gruñona, ¿realmente creiste que te saldrías con la tuya? -

Pasaron a la habitación de Choi, quien cerró la puerta con el pie y tiró en la cama a TaeHyun, quien parecía molesto.

- ¡Quiero dormir en mi cuarto! -

- Y yo quiero seguir viendo mi serie. Lamentablemente, no todo se puede tener en ests vida -

Se acercó y depositó un beso en la frente contraria. Luego tomó su pijama y se desvistió por partes, dándolenla espalda a Kang. Cuando terminó, esperó veinte segundos antes de girar y encontrar a TaeHyun, cambiado y hecho un tomatito.

- Te odio - le susurró, casi gruñendo.

- Ajam, también te quiero TaeTae -

Apagó las luces y ambos se acomodaron bajo las cobijas, mientras el calor poco a poco invadía la cama y el frío se quedaba en la habitación.

La oscuridad aislaba las mejillas ardientes de Kang y la sonrisa burlona de Choi.

- Buenas noches -

- ¿Estás nevioso? -

- ¿P-Por qué lo estaría? -

- Siempre te pones nervioso cuando te recuestas conmigo -

TaeHyun negó, y BeomGyu pasó sus brazos por la cintura contraria y lo atrajo a su pecho, convirtiendo un momento en dormir en algo íntimo.

- E-Eres un to-tonto -

- ¿Lo ves? -

Sintió un leve golpe en el pecho y soltó una risita corta.

- Ya...de-descansa -

- ¿Y mi beso de buenas noches? -

- ¡Di-Dije buenas noches y ya! -

BeomGyu se hundió en las sábanas en busca de los labios de TaeHyun, que buscó tras soltar la cintura del menor y subirlas al rostro de este, apricionandolas.

- Buenas noches, TaeTae - susurró, antes de juntar sus labios inocentemente.

El pecho de TaeHyun explotó en miles de fuegos artificiales y las mariposas en su estómago le perforaban el mismo con sus delgadas patas.