Capítulo 33

383 41 25
                                    

El tiempo paso y ya el cuarto del pequeño Lucas estaba listo.

Emilio quiso llamarle así a su hijo, Lucas llevaba el segundo nombre de su padre y él quiso ponerle su segundo nombre a su pequeño hijo.

La habitación de Lucas había quedado muy linda. Estaba algo sencilla, pero Emilio no quería ponerle mucha cosa era para un niño y el la veía perfecta como estaba.

(...)

Emilio no la hizo solo, pues tuvo ayuda de Azul y de sus dos hijos y aunque no crean, Joaquín también había ayudado en algo.

Era una tarde como cualquier otra, Azul estaba en su habitación descansando, sus hijos estaban en sus habitaciones y Joaquín estaba en su despacho.

Emilio tenía unas ganas enormes de comer pastel de limón. Era otro de sus antojos y definitivamente no iba a molestar a Joaquín así que el salió de la casa y fue hasta el super a comprarse su pastel.

Tan pronto lo pago, comió un pedazo calmando sus antojos. Cuando iba de regreso a casa iba cantando una canción que había en la radio.

Un fuerte ruido se escuchó, había ocurrido un accidente. Un camión impacto contra el vehículo de Emilio dejándolo inconsciente y sangrando.


Joaquín

Había escuchado la puerta cerrarse, seguro fue Emilio que salió un momento.

Sentía una sensación rara en el pecho como si fuera a pasar algo, fui hasta la habitación de los niños y los vi que estaban bien, eso me tranquilizo, pero aun sentía el dolor en el pecho.

Regrese a mi despacho a seguir trabajando. Emilio se había tardado mucho en regresar por lo que decidí llamarlo, pero él no contestaba las llamadas, eso aumento mi preocupación.

Minutos después recibí una llamada de un numero desconocido.

—¿Bueno?

—¿Joaquín Bondoni?

—Si, ¿quién habla?

—Le habla el doctor Smith, le aviso que su esposo el señor Emilio Marcos tuvo un accidente y lo tenemos en emergencias. Venga lo antes posible

—Iré enseguida

Colgué el teléfono temblando y con lágrimas en los ojos, subí corriendo a la habitación de Azul para avisarle lo que había ocurrido.

—¡Azul, despierta! Emilio tuvo un accidente y está en el hospital. Quédate con los niños iré a verlo

—¡Oh por Dios Joaquín! Ve rápido no te preocupes por los niños, avísame por cualquier cosa por favor

Sali corriendo sin ni siquiera despedirme de los niños y subí a mi auto y conduje de inmediato al hospital.

Cuando llegue pregunte enseguida por Emilio, estaba demasiado asustado. Ese era el dolor de pecho que tenía.

—Señorita, soy Joaquín Bondoni el esposo de Emilio Marcos ¿cómo está el?

—Ahora mismo lo están operando, tuvieron que hacerle una cesárea de emergencia

—¿Que? ¿pero él está bien? ¿él bebe está bien?

—No sé nada más, tendrá que esperar a que el doctor salga para que pueda hablar con el

Me aleje de la enfermera y me senté en la sala de espera, llame a Azul y le conté lo que pasaba. Le dije que viniera, necesitaba su apoyo. Llamé a Diego y le conté lo que había pasado.

Tiempo después Azul había llegado con mis hijos y Diego había llegado junto con Roy.

—¿Qué te han dicho Joaquín?

—No sé nada Azul, llevo casi dos horas aquí y nadie sale a decirme nada. Estoy muy preocupado, espero que ambos estén bien

—Todo va a salir bien Joaquín quédate tranquilo. Emilio es un hombre muy fuerte y estoy seguro de que él bebe también va a estar bien

—Eso espero Diego, tengo mucho miedo

Empiezo a llorar y todos empiezan a consolarme incluyendo a mis niños. Minutos después salió el doctor.

—Familiares de Emilio Marcos

Casi corriendo nos acercamos al doctor.

—Yo soy su esposo y ella es su hermana. ¿Como esta Emilio doctor? ¿Él bebe como esta?

—Afortunadamente ambos están bien.

Todos suspiramos con alivio luego de escuchar esas palabras.

—A pesar de que el pequeño nacido de 7 meses está bastante bien, es un bebe muy fuerte. Tuve que realizarle la cesárea de emergencia porque había empezado a sangrar y si dejaba él bebe dentro era muy posible que uno de los dos muriera y mi intención era salvarlos a los dos. Él bebe está en el área de cuidados para infantes y el señor Marcos aun está en sala de operaciones, estamos esperando que se despierte de la anestesia para llevarlo a cuarto. Pueden pasar a ver él bebe si lo desean

Todos asentimos y seguimos el doctor hasta la sala donde estaba él bebe de Emilio y al verlo sentí mi corazón estrujarse al punto que dolía.

Estaba dentro de una incubadora, tenía varios cables conectados a su cuerpo, se vea tan pequeño e indefenso que las lágrimas no tardaron em salir de mis ojos.

(...)

—¿Por que tiene tantas casas en su cuerpo? Usted me dijo que estaba bien

—Y en efecto él bebe está muy bien, pero al nacer de 7 meses sus pulmones aún no están muy bien desarrollados y tenemos que tenerlo con oxígeno. Por el momento no pueden pasar, solo podrán verlo a través del cristal

—Entiendo...doctor ¿puedo hacerle una pregunta?

—Si claro

Nos alejamos del grupo mientras los demás se quedaron viendo al pequeño a través del cristal.

—Doctor, ¿podría pedirle una prueba de ADN del bebe? Quiero estar seguro de que es mío

—Claro que sí señor, si me da un momento podremos hacerle la prueba. Déjeme ver si puedo sacarle sangre, si no le haremos una prueba con la saliva

—Gracias doctor

El doctor entro a la sala donde estaba mi hijo y hablo algo con una de las enfermeras.

—¿Todo bien Joaquín?

—Si Azul, solo pedí un ADN

—¿Me estás hablando enserio Joaquín? ¿Aun sigues creyendo que no es tuyo?

—Solo quiero estar seguro es todo, tengo derecho ¿no?

—Todo el derecho del mundo, solo me molesta que pienses que mi hermano te engañó cuando tú mismo sabes que sería incapaz

Roy y Diego se quedaron mirándonos boquiabiertos, pero no dijeron nada.

El doctor salió y se acercó a mí.

—Ya le tomé la muestra de sangre al bebe, me falta la suya, acompáñeme






El final será mañana :)

In the name of love |Emiliaco|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora