Capítulo 70.

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A pesar de que los días necesarios de reposo para Namjoon habían pasado, Christian le concedió una semana completa para evitar cualquier complicación. Pero Kim entendió a que se debía a algo más que una sincera preocupación por su intervención.

En la residencia de la familia Kim-Jeon no había más que pura felicidad gracias a la llegada de Nayeon, la linda bebita que estaba a días de cumplir su primer mes de vida. Ese día, Taehyung y Hoseok cuidarían de la niña mientras que el matrimonio resolvía un asunto de trabajo.

Ellos estaban felices de ser tomados en cuenta para cuidar de ella, y también un tanto nerviosos porque a veces se volvía un poquitín complicada y exigente respecto a la hora de dormir.

Mira Hobi, ya aprendí a cambiar pañales. Creo que estoy listo para que tengamos nuestros propios bebés le guiñó un ojo a su novio mientras terminaba de colocarle correctamente el mameluco a su hermanita.

¿Pero qué hay de Yeontan? Es nuestro bebé respondió viendo al cachorro que se encontraba sentado a sus pies, ladeando su cabecita cuando notó que era observado por su papá Hobi.

Tú sabes a lo que me refiero mordió su labio inferior de manera coqueta y luego le guiñó el ojo.

N-no, no lo sé su voz tembló de los nervios y un poco de temor.

Namjoon bajó su libro de golpe y miró con el ceño fruncido a su hijo. Se aclaró la garganta de manera exagerada para que recordara dónde y en compañía de quién estaban. Con aquella mirada de ceño fruncido y mandíbula tensa, Hoseok comenzó a sudar.

¿Qué acabas de decir, Kim Taehyung?

Papá, por favor, algún día tendré hijos también. Recuerda que gracias al regalo del tío Yoongi descubrimos que también puedo embarazarme, creo que debemos hacernos a la idea de que en algún momento pasará contestó simple y con cierto tono bromista.

Y Hoseok solo quería que la tierra se lo tragara antes de recibir otra mirada del padre de su novio.

Namu, no lo molestes la voz de Jungkook se escuchó por toda la habitación, el chico salía del cuarto de baño cerrando los botones de su largo suéter en color gris que le ayudaba a disimular su inflamado estómago.

Jung podía jurar a que el amor de aquel matrimonio podía olerse en el aire, le recordaba a las flores de primavera o un bonito día fresco de otoño con una agradable brisa. Realmente vio los ojos de Namjoon iluminarse a pesar de que estuvieron separados por escasos diez minutos.

Además de sus increíbles padres, su amigo Jungkook y el señor Namjoon eran un gran ejemplo de amor verdadero. Quizá porque estuvo al tanto de su amorío desde sus inicios y estuvo presente en cada uno de sus momentos difíciles.

Ahora tenía más ejemplos en su vida para llegar al siguiente paso con Taehyung, su novio y único amor.

¿Escuchaste lo que dijo? Ya tenemos un nieto de cuatro patas, no quiero otro tan pronto.

Sí, lo escuché colocó sus manos en su cintura ㅡ. Y aunque seas su padre, no hemos sido el mejor ejemplo de esperar para tener un hijo. Él sabe que debe cuidarse, y por eso nos ayudará con Nayeon hoy.

¿Acaso me van a probar? preguntó Tae con las cejas levantadas.

No, Tae. O al menos no hoy. En serio necesitamos que la cuiden, no he terminado la presentación para la junta y Namu me echará una mano con ello Jungkook formó un puchero pequeñito.

Cuarenta y veinte | namkook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora