Capítulo 41.

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El cumpleaños número cuarenta y uno de Namjoon estaba a solo un día de suceder y Jungkook no había comprado su regalo. Recurrió a Taehyung para que le acompañara a un vivero, donde sabía que podía encontrar el regalo perfecto para su prometido.

Ahora, Jungkook terminaba de vestirse, ese día no quería ocultar del todo su notorio embarazo, quería mostrar a su bebé con orgullo así que buscó entre las prendas nuevas y tomó una camiseta en color negro que tenía un estampado pequeño, no era ni muy ajustada ni muy amplia, junto a un pantalón azul claro, rasgado en ciertas zonas, como sus muslos.

Soltó un suspiro y abultó los labios cuando vió el par de botines en color marrón, eran sus favoritas pero sus pies eran unos insensibles que no lo dejaban usarlos. Le echó un vistazo a sus pies y enarcó una ceja, no estaban hinchados y no le dolían, tal vez era una buena señal.

Se animó y sonrió cuando las tomó, caminó a la cama para sentarse en la orilla del colchón para colocárselas y anudar las agujetas. El clima comenzaba a cambiar, dandole una bienvenida antes de tiempo al aire fresco del otoño. Antes de salir de la habitación, tomó un gorro del mismo color que sus pantalones y se lo puso frente al espejo. Acomodó algunos mechones largos de su cabello oscuro y tomó su mochila.

Pero antes de salir vió sus pantuflas grises en el suelo, ¿y si sus pies le molestaban a mitad de su recorrido y lo arruinaban todo? Sin duda no quería accidentes así que las empacó en su mochila.

Cuando bajó por las escaleras, Taehyung ya lo esperaba en la sala, vistiendo una camiseta blanca sencilla sin estampado, una chaqueta de mezclilla en color azul claro y pantalón negro.

El tío Jin no tarda en llegar, podemos ir saliendo de casa dice Kim levantando la vista de su teléfono.

¿Namjoon no sospechará? pregunta el de cabello negro preocupado.

¡Para nada! Tú tranquilo, Jin es bueno creando situaciones para que no sospeche de que iremos por sus regalos. Claro, con el tío Yoongi ya no funcionan sus mentiras soltó una risita y Jungkook le siguió de manera tímida ㅡ. ¿Ya tienes idea de que comprarás?

Sip, quiero conseguir un bonsái para Namjoon, creo que le gustaría mucho tener y cuidar uno. Podría ser para decorar su oficina le contó con emoción mientras caminaba a la cocina en busca de una cajita de leche de plátano ㅡ. ¿Y tú ya sabes que comprarás?

Mmm, la verdad no tengo idea, tal vez le compre calcetines, aunque eso ya lo hice en Navidad.

Tae, por Dios, algo más original.

¿Qué? Podrían tener dibujos de plantas o podrías ser tú con un moño de regalo en la cabeza o el trasero se encogió de hombros pero Jeon le miró con los ojos entrecerrados ㅡ. ¡Tranquilo! Ordené algo por internet y llegó hace poco, no te preocupes.

El sonido de la bocina del auto de Seokjin hizo saltar del susto al joven embarazo, quien automáticamente acarició su pansita.

El tío Jin llegó, ¡vámonos!

La primer parada fue el vivero y Jungkook estaba casi saltando de emoción, habló con el encargado del hermoso lugar para pedirle alguna recomendación o si los bonsái tenían algún significado en especial.

Cuarenta y veinte | namkook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora