"El Cielo En Tus Ojos" | MEARIRI

28°

POV Mary Saotome

Estaba sudando, el corazón me latía como loco mi cabeza dolía este era el final de mi corta vida.

-Vine a llevarte a la Academia ya sebes por la comida de ayer- Seguía ahí afuera con su imagen perfecta.

-Vaya... que... sorpresa- Seguí bastante nerviosa que será de mi cuando noté que su gemela está aquí.

-Veo que sigues en ropa de dormir a si que esperaremos-Ambas entraron a mi casa colocándose en la sala.

-¿Komobami ya se levantó? – Preguntó Sayaka mientras miraba alrededor de la sala.

-No sigue dormida no tarda en despertar- Estaba asustada deseaba que en este momento la tierra me tragara.

-Linda casa Saotome pequeña pero acogedora- La Presidenta estudiaba mi casa.

-Yo me siento sola una casa tan grande y sin mi hermana es un infierno ahí-Podía notar como su mirada se apagaba cuando hablaba de Ririka "Ellas se extrañan"

Sabía que ambas se habían lastimado, pero no sabía si pronto arreglaran sus problemas o seguirán a si extrañándose la una a la otra.

-¿Por qué tanto ruido Mary? – Nozomi salía de mi habitación restregándose los ojos.

-Este... - No pude terminar cuando escuché un grito proviniendo de mi cuarto.

-¡Mierda!¿Por qué no me despiertan? Se van y ni tienen la atención de ponerme una manta- La Presidenta volteo rápido en dirección a mi habitación.

-Ririka... Saotome ¿Tu sabias? – Me miro fijamente y su mirada me dio tanto miedo.

Escuché la puerta de mi cuarto ser abierta y sabía que cuando esa persona saliera la tercera guerra mundial se desataría.

POV Ririka Momobami

Tenía leve frío no había dormido muy cómodamente pero después de varios días había dormido sin la necesidad de llorar.

Había dormido tranquila y felizmente.

Me desperté y noté que tanto Mary como Nozomi no estaban ya solo estaba Riaru ¿Qué hace el perro aquí? Escuche murmullos del otro lado de puerta.

-¡Mierda!¿Por qué no me despiertan? Se van y ni tienen la atención de ponerme una manta- Había visto la hora y ya se me estaba haciendo tarde eso y que sentía frío.

Salí del cuarto dispuesta a comenzar el día, pero en cuanto salí todo se volvió silencio.

Hasta que percate de dos personas.

-Igarashi buen día- La salude mientras miraba a mi hermana sin hacer ninguna expresión.

-¿También quieres destruir mi relación señorita Presidenta? – Estábamos enfrente una de la otra.

-Jamás destruiría algo que te hace feliz- Ella habló mirándome fijamente sabía que estaba triste sus ojos me lo decían.

-Hipócrita tu destruiste mi relación contigo eso me hacía feliz-Ya no sentía las ganas de llorar ya podía hacerle frente.

-Me equivoque nunca debí cometer ese error... yo confío en ti- Quería acercarse a mí, pero se lo impedí dando unos pasos atrás.

-Vete no vas arruinar esto tampoco- Iba a dar media vuelta, pero una mano me detuvo.

-Se que no debo meterme, pero... mas sufren al estar separadas- Mary me sostenía de la mano para evitar que me fuera tan fácilmente.

-Te extraño Ririka ¡Lo lamento! De verdad lo hago sin ti no soy nadie- Escuché la voz rota de mi hermana ella ya estaba al borde del llanto.