Please Not Again (Yunando Omegaverse)

12 - "𝓝𝓸"

Nota: Los pensamientos que se verán en el capitulo son los de Yun

Acaricio su brazo recordando la calidez que sintió al despertar esa mañana y verse rodeado por los fuertes brazos de Miller, durante un segundo fue el Yun de hace años, ese que ligaba en las noches con los alfas para acostarse con ellos y robar su dinero apenas sé dormían. Sólo que no iba a hacer eso, por que ahora tenia una familia, dos hijos y un prometido a los que habia entregado su vida. ¿Por que sé sentía triste al pensar en esa vida? Despues de despertar al sheriff y disculparse una y otra vez por su gran error dejó que este sé fuera, no podría verlo a la cara sin pensar en que por primera vez desde que sus hijos nacieron y habia empezado una relacion con Armando, habia sido infiel. 

Hablo durante horas con Tonet pidiéndole consejo sobre lo que debía hacer, ambos estaban de acuerdo en que tenia que decirle al alfa pero, ¿Por que su omega sé negaba a que lo hiciera? Sé quedo parado viendo el edificio donde su familia habia estado viviendo y suspiro antes de entrar, llegó al quinto piso y toco la puerta, oyó cómo alguien sé acercaba a está y al abrirse quedo de frente con su pareja.

-Yun? Que haces aqui? -el castaño sé hizo a un lado dejandolo entrar, caminaron hasta el sillón quedando en un silencio incómodo

-Te dile que es lo que paso, sólo te pido que me dejes telminal antes de decilme algo -Armando asintio y el pelirrojo empezó su relato, claro que cambio todo en este, dijo que un hombre habia ido al taller un día. Le ordenó que arreglara su coche rápidamente, que tenia prisa; Yun sé habia molestado y habían comenzado a pelear. El menor no aguanto sus impulsos y golpeó al sujeto sin piedad, este le dijo que sé arrepentiria y varios dias despues los habían secuestrado. 

La historia era demasiado convincente y Armando cómo todo un iluso la creyó, regaño a su chico por dejarse provocar y lo abrazo demostrandole cómo lo habia extrañado en esos dos meses. 

La puerta del departamento sé abrió y entraron los tres hijos de la pareja, los gemelos corrieron hacia su madre chillando de emoción al verle, Juanjo sé unió al abrazo y la familia estuvo completa de nuevo. Sólo que nada volvería a ser lo mismo.

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Miraba la jeringa frente a él sin emoción o culpa alguna, lo que estaba apuntó de hacer lo deseaba desde hace algún tiempo. La tomo entre sus manos y levanto la manga de su camisa para enterrar la aguja en su brazo, cerro los ojos esperando con paciencia que el efecto llegara y sé dejó perder en las alucinaciones que tenia. Desde lejos su jefe le observaba con preocupación, sabia que el hombre tenia problemas, no físicos o con su familia, sólo...problemas.

Un rubio entro a la habitación y observó la escena frente a él, su víctima estaba peor de lo que creía, en ese estado posiblemente no funcionaria para el plan. Al terminar el efecto Yun parecía algo desconcertado, cómo sí estuviese despertando de un sueño profundo, una sonrisa se formó en su rostro cuando vio a Gringo.

-Quiele diveltilte un lato?

-Que tienes pensado?...

La mujer gritaba cómo loca viendo cómo esos dos hombres maltrataban a su novio, los habían secuestrado y al despertar del efecto del sedante que les dieron sé llevaron al joven para torturarlo. Hacían cortes en su piel viendo con placer cómo la sangre escurria por sus extremidades, golpeaban su rostro cómo sí sé tratase de un costal de papas y le rompían huesos sin piedad alguna. 

El de máscara de duende era el encargado de cortes y su compañero el de pañoleta roja, parecía tener experiencia en ortopedia, por que rompía el hueso en el lugar exacto donde dolía más. Cuando el hombre ya no respondía a las pruebas de dolor, patearon su cuerpo al extremo de la sala y caminaron hasta quedar frente a la chica, está sé movía desesperada por huir pero los 

amarres en sus muñecas eran muy fuertes.

-Eleh muy linda sabe'? -sé notaba el marcado acento en el hombre cada vez que hablaba

-Que quieren de mi? -pregunto la chica ignorando lo anterior dicho

-Glingo, encalgate de ella, yo tengo algo impoltante que hacel -el mencionado asintio y sé llevó arrastrando a la mujer hasta un cuarto, de nuevo, los gritos empezaron

Mientras tanto el celular del máscara de duende sonaba y este fingia una sonrisa.

-Ya voy caliño, sé complico algo en el tlabajo

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Llegó corriendo al lugar donde su pareja le habia citado, era un rústico restaurante en el bosque pero para una cita era el lugar ideal, un camarero lo llevó hasta su mesa donde Armando le esperaba pacientemente.

-Yun! -sé levanto y abrazo a su amado novio

-Peldon pol llegal talde pelo hubo un choque flente al café -eso sí era verdad, habia visto las noticias y para su buena suerte habia ocurrido ese accidente

-Algo oí, lo bueno es que estas aqui ya -tomo su mano por encima de la mesa y la acaricio con ternura

Ordenaron comida y empezaron a platicar, reían y bromeaban cómo no lo habían echo en años. Ambos estaban felices de estar ahí, juntos. Al terminar salieron del lugar y empezaron a caminar, habia un sendero que llevaba a un mirador y decidieron seguirlo, Armando esperaba el momento perfecto para su propuesta y al estar ahí, viendo la luna iluminar la ciudad de forma espectacular supo que era hora. Saco de su bolsillo una caja de terciopelo y tomando la mano de Yun sé arrodillo frente a él, este trago en seco al saber lo que sé venía.

-Yun -empezó el castaño- estos últimos meses hemos estado peleando y sé supone nos casaríamos en navidad pero creo que es correcto pedirtelo de nuevo -abrió la caja dejando ver un anillo de color negro, sencillo, pero indicado para su chico 

-Me concedes el honor de casarte conmigo? -una lágrima cayó por el rostro del omega

<<di que no>>

<<dilo>>

-Clalo que sí, melón -salto a los brazos morenos y sé aferro fuertemente a su camisa, el agarré fue correspondido.

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Cuando Yun abrió los ojos vio que estaban frente a un motel, el castaño le miraba con una sonrisa traviesa.

<<no lo hagas>>

<<no es correcto hacerle sufrir>>

Ignoro la voz y sé dejó llevar, pero fue un grave error. Y lo sabia.