Please Not Again (Yunando Omegaverse)

1- "𝓠𝓾𝓲𝓮𝓷 𝓮𝓻𝓮𝓼?"

El canto de los pájaros y la suave luz que entraba por la ventana del cuarto de Armando Grúas terminaron de despertarlo de un hermoso sueño aunque si a el le preguntaran vivía la mas bella de todas sus fantasías, a los lejos se podía oír el llanto de Elizabeth y de Ray. El pelinegro se estiro en su suave cama y noto que el lugar a su lado estaba vacío, su amado prometido estaba levantado y tal vez pero solo tal vez preparaba el desayuno. 

Se levanto con pesadez y tras entrar al baño fue al cuarto de sus pequeños cachorros encontrándose con una imagen bella ante sus ojos, un joven castaño estaba con su hijito en brazos dándole de comer. Sonrió para acercase a la cuna de Elizabeth y tomarla en brazos, la pelirroja de ojos grises se calmo al estar en brazos de su padre y jalo el cabello de este en señal de cariño. 

El omega al oír esto volteo aun con su niño pegado a su pecho y una dulce sonrisa se formo en su rostro, dejo al infante de regreso en su cuna y acomodando su camisón se acerco al moreno dándole un beso como buenos días.

-Dormiste bien cariño? -dijo Armando acariciando la sonrojada mejilla del otro

-Beth estuvo llolando toda la noche y Lay tenia fieble, entonces imagina como dolmi -replico risueño y agarrando a su hija en brazos para dejarla en la cama, Armando se acerco a el y tomándolo por la cintura acerco sus bocas uniéndose en un beso lleno de amor. 

Bajando por el cuello pálido del chico hasta la hermosa marca que hace días le había echo, aunque después de mucho suplicar y rogar. Unos ruidos en el cuarto contiguo los distrajeron y saliendo al pasillo vieron a un joven peleando por ponerse una corbata, ambos rieron asustándolo pero corrió hacia ellos y los atrapo en un abrazo.

-Buenos días! -grito mas que contento Juanjo

-Veo que apenas y puedes ponerte el uniforme, como es que me sentiré orgulloso de mi hijo así? -dijo el mas grande acomodando la vestimenta del chico.

-les prometo que volveré con muy buenas notas-dijo en un puchero mirando a sus padres adoptivos, por que si, Juanjo ahora era parte oficial de la familia Grúas.

-Eso nadie lo niega culebla, no le hagas caso a este viejo

-Ey! Como que viejo? -soltó indignado el alfa causando una carcajada en los dos omegas

-homble que es broma! -dijo el ojiverde entre risas, Armando rodo los ojos y camino al cuarto de los cachorros cuando estos empezaron a llorar- anda Juanjo que se te hace talde

-Mierda es cierto!

-Ese lenguaje jovencito -regaño Armando volviendo con la niña pelirroja en brazos, Juanjo corrió hacia ella y repartió muchos besitos por su cara haciéndola reír, abrazo al alfa y después al castaño.

 Ambos le desearon suerte en la escuela y partió feliz a la universidad, los tiernos padres lo vieron irse en su coche y fueron a atender a sus otras bendiciones. Esa era la rutina de todos los días desde el nacimiento de Beth y Ray aunque eso cambiaria después de que ambos aceptaron el deseo de Juanjo de entrar a la universidad para estudiar informática, como se iban a negar a la única cosa que culebra les había pedido desde que lo conocían? 

Así que ahí estaba el universitario listo para dejar sorprendidos a sus padres, ellos lo habían adoptado después de su salida de los santos aunque al principio el  castaño (Yun) se había negado por el echo de que había una diferencia de tres años entre el y su hijo adoptivo pero había cedido cuando Armando le pidió matrimonio y le rogo que aceptara la adopción. 

Era una decisión de la que nunca se arrepentirían, al fin y al cabo Juanjo había sido el primer niño a su cuidado. Pero se preguntaran, en estos meses que han estado haciendo nuestro protagonistas?