Twilight: polyamory.

||·Prólogo·||

Muchos dicen que existen diferentes tipos de amor. 

Yo les creo, y no por el simple hecho de que se escuche hasta tal punto romántico, sino porque yo lo viví. Al mismo tiempo, también se dice que todos tendremos tres amores a lo largo de nuestra vida: el de infancia, el verdadero y el imposible. Yo los clasifico de distinta manera, a pesar de que los que les he mencionado siempre son pintados como risueños, revestidos con dulces y coloridas palabras románticas, rellenas de adorables fantasías imaginativas e insensatamente novelescas que solo sirven para enredar a las personas, haciendo que se enamoren de la simple idea del amor. 

Siendo tan jóvenes e inexpertos, careciendo de verdadera soltura en el ámbito sentimental, todo eso para que te tragues todo el cuento de las perfectas y maravillosas cosas que conlleva el estar enamorado. Realmente no entienden nada, al menos no la parte más real y humana del concepto. Es cuando te golpea realmente duro, cuando se aproximan las consecuencias del solo sentir atracción por otra persona, los muchos-por no decir demasiados-riesgos que se corren al intentar estabilizar la química que lleva a dos individuos a intentar formar un "algo" entre tantos "nada". 

Multiplica todo eso por cuatro. En mi caso al menos. 

Por ahora, yo les describiré, desde mi experiencia personal, los tres principales amores que aparecerán a lo largo de nuestra vida:

~Es igual de hermoso e irreal, el amor idealista; he podido escuchar a personas describirlo como un "cuento de hadas", "historia sacada de película Disney". Maldición, me rio en la cara de esos idiotas. Lo hago aun más al recordarme a mi misma en esa situación. Malditamente doloroso. Este aparece en la adolescencia-preadolescencia en mi caso-y creemos firmemente que durara para siempre. Realmente dos palabras bastantes fuertes hasta para mi: "para siempre", no me duro tanto como esperaba. Por lo menos no la parte en la que todo es rosa barbie; es borrascoso, desordenado, incontenible...cargado excesivamente de sueños y promesas que nunca en la existencia pasarán, y maldición, en toda ella no hay dolor mayor que el saberlo y aun así no perder las esperanzas. ¡Ja! Que si lo sabré yo.

Ese es el primer corazón roto. Duele como el infierno. 

~En este sí, ya estamos entrando en ligas mayores, amigos: el amor necesitado. La sola mención me da escalofríos, joder. Leí en algún lado que, según la psicología, este tipo de amor se diferencia por el sentimiento de abandono que llegamos a sentir cuando empezamos a pasar por algunas etapas delicadas de la vida (en mi caso, maldita pubertad de mierda), encima, también las dudas que nos surgen en esos momentos. Inicia cuando nos enfrentamos a la realidad, al descubrir estrepitosamente, sin aviso, los altibajos que conlleva el enamorarse. Empezamos a sentir la "necesidad"-de ahí su nombre-de ser amados. Buscamos incesantemente amor y eso nos lleva a caer en ideales que solo terminan como...¿pueden adivinar en que?  Exacto, corazones rotos.

~A ver, el amor inesperado no es tan malo-aunque fue un poco difícil en mi opinión personal-créanme, es el más...¿pasable? No lo sé, no se me ocurre una palabra en concreto. Este tipo de amor aparece de manera imprevisible, tomándonos desprevenidos. En un comienzo es confuso y preocupante porque no da señales de ser maravillosamente perfecto y de ensueño como lo pintan. Debo admitir que es un amor más adulto, más maduro, en el que aceptamos a la otra persona tal y como es; es comprensivo, tolerante, hasta cierto punto indulgente, confabulado y sincero, todo esto siendo la clave de la relación. Como mencioné, este no es tan malo, es el más duradero porque no es como el anterior, una necesidad, sino que es nuestra elección el compartir nuestra vida con la otra persona como convicción propia. 

Hay muchos tipos de relaciones que pueden ayudar a la pareja a madurar sentimentalmente, algunos siguen adelante, otros se llevan lo aprendido y encuentran a su amor inesperado con el que gozan de las ventajas que salieron de su antigua relación. Putos suertudos.

Lo que más me da risa es que, aunque me burle y hable bordemente del tema, casi todos pasamos por toda esta montaña rusa de emociones, y les pasará también a los que aun no llegan a experimentarlo. Lo negativo de todo esto es que no hay manera de controlarlo o retrasarlo, prepararte o evitarlo; me jodió en su momento...pero maldición, estoy tan feliz ahora que les aseguro que lo volvería a hacer.

Así que ignoren mi bipolaridad por un segundo, lo entenderán...pronto.