✿HEATHER✿

๑❥๑Capitulo 11๑❥๑

...Pero ella te gusta más
(Desearía ser Heather)
(Oh) desearía ser Heather
(Oh, oh) desearía ser Heather...

El albino acostado en su cama sin ningún ánimo, sin ganas de hacer algo o salir con alguien.

Solo quería estar solo por un momento pensaran que si en esos meses el estuvo pensando algo la verdad que no.

Estuvo observaba a Ray como mejoraba y se alegraba, apesar que le dejo claro todo que no le gustaba sentía una presión en su pecho.

Es que para el todo es confuso.

Sabía que detrás de los libros que el leía el estaba en un mares de lágrimas, y sonrisas fingidas.

Jamás pensó que Ray fuera débil en el amor...

Se sentía culpable de haberle dicho esas cosas en su adolescencia, solo eran dos chicos confusos y uno accidentado.

Suspiro levemente mirando la puerta, realmente esperaba que su madre entraba a verlo, era difícil que ella no estuviera con ella en estos tiempos difíciles de afrontas.

Según ella "trabajo" "juntas" "no tengo nada de tiempo" y otras excusas que se inventaba.

Su nana era la única que lo escuchaba, mirando al techo de nuevo, pedir perdón a Ray no sería tan fácil.

La vida para el albino no era linda como las demás, ni mucho menos cuando tus padres se pelean y te hechan la culpa de todo.

Así es Norman se crio en una casa de violencia, odio, rencor y mentiras.

El hecho de que a los nueve años tapaba sus orejas saliendo leves lágrimas de sus ojos azules.

Los golpes y ruidos de cosas tirando en su casa lo asustaba mucho, se escondía tras de un mueble para que su madre o su padre no lo viera y decir que era su culpa.

Hasta que ya en la edad de 11 años conocio a Ray un azabache con semblante serio, al entrar por primera vez al instituto se hizo amigo de Ray y luego emma.

Ese trío de amigos eran felices y aunque las cosas en la casa de norman seguían siendo las mismas, se sentía feliz al estar con ellos olvidaba lo que pasaba

No fue hasta que una noche los golpes está vez le tocó a Norman, el albino alejándose, llorando, gritando por ayuda.

Si no fuera por Ray y emma entraron a la habitación de albino con un bate de béisbol en la mano el seguro estaría en un internado.

Entendió el valor de la amistad y otras cosas que fueron prohibidas por su niñez.

Durante su adolescencia la verdad fue bastante dura y confusa, sabía que Ray gustaba de el pero no quería decir algo que lastimara al azabache.

Le tenía cariño pero no de esa manera como el azabache pensaba.

.....

Recorría la habitación recordando esos momentos dónde simplemente era feliz hasta que fue enviado a Canadá por un año, sus pensamientos abrumados y oscuros le dolía.

Si tan solo pudiese probar los labios del azabache, sería un logro.

Dejo todo en claro en ellos dos, se arrepentía pero no había vuelta atrás.

Mirando la ventana, el sol ocultándose suspiro cerrando las cortinas, el cuarto oscuro tan dolido estaba.

No lo amaba pero sentía que si era todo confuso ya frustrado se acostó en la cama -joder Ray por qué yo y no emma Gilda o Oliver... Me haces sentir tan confuso tan frágil hacia a ti.

Cerrando sus ojos dejándose llevar en sus pensamientos, metiéndose en ellos solo había niebla y más niebla.

Si tan solo todo fuera un camino de rosas y árboles con frutos, era tan fantasioso pero con imaginarlo era difícil hacerlo realidad.

Sentado al borde de la cama, la noche era ya, la Luna en su posición perfecta.

Otra noche sin saber dónde estaba su madre, suspiro débilmente.

No tenía relación con su madre, siempre eran peleas o cosas con un poco de sentido, le daba lo material cosa que el entre si y no necesitaba.

Que se sentirá un abrazo de mamá, un beso en la mejilla antes de dormir o algo así.

Su nana Krone fue más madre que su propia madre...

El albino caminaba por los largos pasillos oscuros y fríos, mirando los cuadros familiares con la luz de la vela.

Si tan solo no fueran importantes, sus padres ausentes toda su vida.

Suspiro pesadamente, sus pasos tan silenciosos el ambiente melancólico, solo era un niño que quería el amor maternal y paternal.

Su ojos estaban cristalizados apunto de estallar, mordiendo su labio inferior, sus cabello blancos como la nieve y esa media luna que tenían en su cabello estaban desordenados.

Llegando a su habitación, cerro la puerta rechinando haciendo un eco en todo el pasillo.

Los ruidos truenos hicieron la llegada de la lluvia.

-es tan fácil decir que estaré bien, solo los necesitaba en toda mi vida... Dijo en un susurro el albino.

Acostado en la cama, mirando a la nada.

La llovizna seguía y seguía más fuerte...

Tres minutos fueron bastantes para derrumbarse a llorar, está bien llorar es bueno te desahogas de todo lo que pasa en esta cruel vida.

Sus lágrimas caían como gotas en sus mejillas rojizas, sus sollozos no fueron callados a golpes, y ni que alguien lo sacará de la sala solo era el y el cuarto con el ruido de la lluvia.

Grito cuando algunos truenos se hicieron presentes.

Sentía fuego en su garganta que cada vez se iba disminuyendo poco a poco.

Le dolía la garganta pero lo necesitaba, con la respiración agitada, con la mangas del suéter se limpio las lágrimas que salían poco a poco.

4:30 am mirando el reloj, suspiro sus párpados le pesaban, la llovizna fue a calmarse un poco.

Sin truenos, sin relámpagos

El pequeño Norman hacia dormido en su cama, cobijado con las sábanas cálidas.

Al final de la tormenta siempre estará la calma

Su respiración calmada, todo estaba en paz, los ligeros rayos de luz entraban por aquellas partes de la ventana que no estaban tapadas por las pesadas cortinas.

La lluvia calmo, dejando salir un sol brillante y un ligero arcoiris.

Era sábado, así que no había problema si dormía hasta tarde.

El piloto rayo de luz iluminó sus blancos cabellos, abrazando la ligera sábana.

Después de todo, el estaría bien, el brillaría igual como Ray lo hizo...

Sus hinchados ojos se abriendo lentamente mirando a la cortina, le dolía la cabeza y ojos.

Aún así se quedó en cama todo el día, krone le traía su desayuno comida y al rato la cena.

Después de la horrible tormenta siempre habrá la calma y la paz.

Aunque Norman sabía por qué Ray lloraba en aquellas bibliotecas lo sabía perfectamente...

Continuara....

Decidí meter un poco el pasado de Norman, por qué hacía falta...
Estamos a poco capitulos para que está historia termine...