Estamos juntos en esto (¡¿EMBARAZO?! parte 2)

Una separación

Si pensaban que ya me había olvidado de esta historia, pues no, ahora sí ya me propuse a terminarla con todo lo que ustedes mis lectores me han dicho que les gustaría ver.
Les mando un abrazo virtual.

Draco buscaba a Hermione, se había topado con Harry y Giny quienes le habían dicho que no estaba en la torre de Gryffindor, después se topó con Luna que dijo que ella venia de la biblioteca y no estaba ahí, por lo que solo le quedaba un lugar obvio para buscar; la sala de prefectos.

Abrió la puerta solo para comprobar que ahí estaba la castaña.

—Hola princesa —la saludó animadamente.

—Hola Draco —respondió sin despegar la vista de lo que hacía.

— ¿Por qué quieres terminar conmigo? —Preguntó el rubio acercándose a ella.

— ¿Quién dijo eso? —Le regresó la pregunta ocultando lo que hacía.

—Ahora me llamas Draco, ¿ya no soy tu amor? Y no diré nada de la forma nada sospechosa en que ocultaste lo que hacías —Draco se cruzó de brazos.

—Hola amor, ¿Cómo estás? —Corrigió Hermione. —Te cuento, le estoy escribiendo una carta a mis padres, la oculté porque les estoy contando sobre una sorpresa que quisiera prepárate.

—Fingiré que te creo que aún me amas —respondió de manera dramática. —Por favor no me dañes con tu indiferencia y acompáñame a desayunar.

—Claro que te acompaño —la castaña guardó sus cosas en su mochila. —Amor, ¿has tenido noticias de tu madre?

—Sabes bien que no Granger, si las hubiera recibido ya lo sabrías, su última carta la recibe hace 3 meses, tú estabas ahí, me envió mis cosas y me recordó que no me quería cerca de ti —el drama quedó atrás, ahora estaba realmente molesto.

La Gryffindor no insistió con el tema, ella sabía que al Slytherin no le gustaba hablar de su madre, ella sabía que era porque le dolía que no lo apoyaran; por eso ella le había insistido tanto a Narcissa que se reuniera una vez con Draco.

En el gran comedor sentados a la mesa de Gryffindor disfrutaron de su desayuno, no había muchas personas, lo común de un sábado por la mañana, la mayoría preferían saltarse esa hora de comida para poder dormir hasta muy tarde.

—Y bien ¿ya decidieron donde pasaran las vacaciones? —Preguntó Blaise cuando los platos vacíos desaparecieron frente a sus ojos.

—Nosotros en el colegio —respondió Ron. —Mis padres viajaran a Rumania, así que yo y Giny nos quedaremos y por ende Harry también.

—Luna ira con su padre y yo con los míos —comentó Theo mientras buscaba con la mirada a la rubia que no había aparecido para el desayuno. —Tal vez la visite en navidad.

—Yo y Blaise nos quedaremos en el colegio, es nuestra última navidad como estudiantes de Hogwarts y queremos aprovechar la poco supervisión adulta que hay en esos días —comentó Pansy mientras movía una ceja de forma sugerente.

Las miradas en la mesa si dirigieron a Draco y Hermione, el rubio aún se veía molesto pero los demás ya habían aprendido que la mayor parte del tiempo estaba enojado por la situación con su madre y que lo mejor era no preguntar.

—No lo hemos hablado aun —respondió Hermione comprendiendo la preguntas silenciosa de todos. —Aún faltan tres semanas para eso —agregó.

—Seguro que Granger tendrá que ir a casa, no creo que su padre permita que me quede a solas con ella en el castillo y no estoy seguro que sea bienvenido en la casa de los señores Granger después de la última vez —comentó sin prestar atención, como si sus palabras salieran sin pensarlas.