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Había pasado exactamente mes y medio desde la fiesta de Jin y Hobi, las cosas estaban mejor entre YoonGi y Taehyung quienes tenían sexo descontrolado a cada rato.

Pero, sí, también tenían momentos de dulzura donde YoonGi mimaba a su Taehyung, su pequeño bebé que pedía amor y él estaba dispuesto a dárselo, ya que nunca lo recibió.

El viaje que tendrían se había pospuesto nuevamente y viajarían la semana que entra, a YoonGi le urgía salir de Corea porque a pesar de pintarlo todo lindo con Taehyung él hacía muchos sacrificios para poder darse el lujo de follar con su lindo sumiso.

Aveces YoonGi creía que nunca tenía suficiente de Taehyung, siempre quería más, enseñarle lo que puede hacer, joderlo hasta cansarse.

Taehyung tampoco se lo dejaba fácil, le hacía quererlo follar todo el tiempo, últimamente le había dado por vestirse con ropa y lencería que él ni siquiera le había comprado, al menos no que él recuerde.

Solo hubo dos veces en las que Taehyung compró ropa, la primera fue en su compañía y en la segunda no, pero mierda, agradecia que lo haya hecho, se veía tan jodidamente bien.

Y es que con 'ropa' que él no le había comprado se refería a los conjuntos de mini faldas con escote, a los dildos con colita de conejo y de gato, a pijamas que mostraban sus delgados muslos y un traje de sirvienta que le quedaba de maravilla que utilizaba para provocarlo y de vez en cuando bailarle.

El día de hoy como era sábado, fin de semana, Taehyung decidió vestirse por primera vez de colegiala, uso una pequeña  falda ajustada a su cintura, esta misma era rosada con rayas un tono más rosadas que llegaba a la mitad de sus muslos, una camiseta blanca pequeña que solo cubría su pecho y sus pezones rositas, unas medias que le llegaban solo a la mitad de sus muslos y por debajo llevaba una braga del mismo color de la falda.

Santa y jodida mierda...

La boca de YoonGi se secó al ver a Taehyung cuando llegó del trabajo, su pequeño había cumplido su pequeño fetiche.

—Pero que tenemos aquí.—Sonrió de lado.

—Daddy~ —Pestañeó y se acercó a él.

—Te extrañé mucho Daddy~.—Gimió provocadoramente en su oído.

—Pero que princesa tan bonita tenemos aquí.—Gruñó YoonGi.—Te ves tan caliente.

Lo tomó de las caderas, se acercó a besar sus labios con fuerza, devorandolos como quería, mordiendo de vez en cuando su labio inferior.

Taehyung Gimió entre sus labios, sus piernas comenzaron a temblar y no por  los besos —o talvez si— si no por el vibrador que se encontraba hundido en su cavidad anal.

—Yoon~ —Gimió.

—Quítate solo la braga.—Murmuró. YoonGi sabía a la perfección que el menor traía puesta una braga, normalmente cuando tae se vestía así usaba bragas de color rosado, negra o roja.

Sin rechistar Taehyung metió sus manos por debajo de la falda y fue bajando aquella pequeña braga rosada que ya tenía manchas de pre-semen.

YoonGi suspiró cerca de sus labios y tomó sus nalgas entre sus manos, sin poderlo evitar besó sus labios, amaba sentirlo, amaba sentir que aquel chico era de él y nadie podía tocarlo.

Solo él podía poseerlo.

—Te voy a follar hasta que no puedas caminar.—Sentenció para después tomar sus nalgas cargandolo y después lo votó en la superficie de la cama.

—E-Estoy caliente D-Daddy~ —Jadeo abriendo sus piernas.

YoonGi tragó saliva viendo un artefacto largo de color negro enterrado en el ano de Taehyung.

❝KITTEN❞  |  YoonTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora