Un contrato entre caballeros

Capítulo VII

  Valentia y decisiones.

 

POV AUTOR 
 
 
 
Luego de despedirse, Luhan decidió irse ya había sido bastante por un día, dejó a su hermano con Jongdae, aún no podía creer lo cruel de como Chanyeol se había comportado, pero al igual que él y los demás sabía el verdadero significado del enojo de Yeol, aquellos dos eran tan obvios, se podía notar el amor mutuo que ambos se tenían, pero que Baek y Yeol ignoraban por completo, Luhan soñaba con tener algo parecido con Sehun, por lo menos llegar a ser tan unidos como Baek y Yeol, o tan peleadores como Tao y Kris, o tan opuestos como su hermano con Jongdae... o tener la poca valentía que Yixing poseía en luchar por su amor, obviamente Luhan nunca habló sobre Yixing pero le parecía absurdo que Junmyeon no se diera cuenta de las doble intenciones del presidente estudiantil, todos tenían algo que los unía por más absurdo que fuera, pero a Luhan y Sehun no les unía nada... eran como dos completos desconocidos y eso dolía, antes,  hablaba con Sehun como dos amigos sin llegar a ser los mejores a pesar de todo el tiempo que llevaban conociéndose, Luhan se sentía patético por no ser capaz de enamorar a Sehun o por lo menos quitarlo de su mente.
 
Sus piernas no dejaron de caminar sin mirar atrás, aún seguía enfadado consigo mismo, con su novio.

Luego de varias calles Luhan se dejó descansar unos segundos con ligeros pasos, ya eran las 17:16 según su móvil, era demasiado temprano y no tenía ganas de practicar, o llegar a casa, ni de ver a su empalagoso novio, necesitaba estar solo y pensar en lo posible, ahora Luhan pensaba si en verdad había sido buena idea haber aceptado a su Hyung como pareja, aun que hayan pasado unos meses, Luhan no sentía nada por él, sus actos de afectos le eran insípidos nada de lo que aquél hacía lo complacía emocionalmente, y su manera de actuar con él eran completamente frío, por todos los medios trató de reforzar su relación, compartiendo con aquel más tiempo, pero todo resultó inútil, después de todo "un clavo saca a otro clavo", Luhan se estaba hartando de la relación cuando éste le prohibió estar en la misma mesa con sus amigos, pero Luhan luego lo tomó bien ya que aquello le venía perfecto, no ver a Sehun beneficiaba a su corazón herido, pero con la escena de la semana pasada le advirtió que su relación no iba bien, tal vez Minseok tenía razón debería terminar cuanto antes.
 
Luhan continuó con su rumbo sin final, Luhan comenzó a recordar aquel camino, suspiró, hace mucho que no venía, su memoria refresco los recuerdos, y Luhan guio a sus pies por el camino, la caminata no fue larga, una vez en el sitio Luhan sonrió con cierta amargura, realmente deseaba que todo aquel sentimiento se acabara, que solo sea un recuerdo de su transcurso en la secundaria, Sehun no era malo, y Luhan quería recordarlo de aquella manera, y no odiarlo por no ser correspondido, deseaba recordarlo y sonreír.

 
Caminó hasta el enorme árbol que estaba cubierto por flores que comenzaban a florecer, sus dedos acariciaron el precioso árbol, el olor a madera inundó sus pulmones, la pequeña briza hacían bailar las hojas secas del suelo arrastrándolas en el transcurso, la planta de su zapatillas izquierda se deshizo de la poca tierra y hojas que cubría el suelo, para luego recostarse en ella, su espalda se dejó abrazar por el tronco del árbol, al igual que la parte trasera de su cabeza, Luhan cerró sus ojos, tratando de disipar los pensamientos, todo aquello que molestaba y ese lugar provocaba aquello, que su mente se relajara, hace tanto tiempo que no sentía una pequeña paz, su mente ya no le causaba dolor, su cuerpo ya no se sentía pesado y su corazón ya no dolía, la briza apaciguó lentamente su corazón, el dulzón de la naturaleza embriago sus sentidos.
 
—  Es un hermoso día —   Luhan abrió sus ojos al sentir aquellas palabras cerca de su cuerpo, Luhan miró a su costado y se encontró con el cuerpo de Sehun a unos escasos centímetros, su rostro se reflejaba tranquilo, sus ojos permanecían cerrados, el corazón de Luhan comenzó a palpitar, su cuerpo se llenó de nervios, Luhan se giró y trato de no mirarlo, sólo no respondió, no sabía cómo hacerlo, no negaría que escucharlo le encantaba, pero eso no era bueno, Luhan quería olvidarlo, Sehun no lo quería, al menos de la manera que el capitán de fútbol anhelaba.
 
—  Te extrañe Hyung...—  susurró Sehun con un suspiro, Luhan se estremeció por completo, aquellas palabras retumbaron en su cabeza, provocando descargas eléctricas en su pecho, Luhan apretó su mandíbula por los nervios, ¿Por qué Sehun lo provocaba?, Luhan abrió lentamente sus parpados, lo primero que sus ojos captaron fue el resplandeciente sol, un suspiro ahogado abandonaron sus labios.
 
—  Disfrutas esto Sehun...—  afirmó con la angustia en sus cuerdas vocales. —  Tan divertido es verme sufrir, sé muy bien que eres consciente de mis sentimientos, pero ¿Por qué disfrutas pisotearlos? ¿Tan gracioso te es verme tocar fondo en mi vida?...—  el labio superior comenzó a temblar con cada silaba, el dolor se hacía cada vez más fuerte con solo pensar en las risas de Sehun al provocar inseguridad.
 
—  No sabes lo que dices —  masculló Sehun con frialdad, pero Luhan no se inmutó ante el tono, su corazón ya dolía y aquello no lo empeoraría más de lo que se encontraba.
 
—  Sé muy bien lo que digo, al igual que el significado de "Me gustas a Te amo", pequeñas palabras muy similares pero a su vez diferentes... Sehun no voy a huir más —  Luhan se giró así topándose con la aguda mirada de Sehun en su cuerpo —  Sehun... Te amo... demasiado, lo he hecho desde que te vi por primera vez pero... ya no lo quiero hacer, quiero olvidarte por completo, tú nunca me corresponderás como yo lo deseo... y quiero decirte adiós para así continuar con mi vida, realmente no quiero seguir sufriendo por un amor unilateral...—  rápidamente se incorporó y Sehun lo siguió, Luhan escaneo aquel hermoso rostro que lo había cautivado, aquéllos ojos que lo estremecían cada vez que lo observaba, sus labios.... aquellos mismos labios que lo hicieron delirar con poseerlos, los cuales también se formaban una hermosa curvatura dejando sus blancos dientes al descubierto, Luhan estaba completamente hipnotizado por aquélla sonrisa, pasaron largos segundos en que ambos permanecieron en silencio, Luhan grababa cada fracción en su mente, pero había algo que quería hacer... sus manos empezaron a temblar, su respiración se hacía cada vez más entre cortada, Luhan movió sus dedos intentando calmar su cuerpo, sólo bastó con dos pasos para quedar frente a Sehun, Luhan deslizó con cuidado sus delgados dedos hasta depositarlas alrededor se las mejillas, su pulgar acarició con suavidad en la piel de Sehun, éste se quedó perplejo ante las acciones del capitán de fútbol, sus orbes negras examinaron las delicadas y bellas facciones de Luhan, el mayor se deleitó por cada sensación que su cuerpo experimentaba al tocar a Sehun, con el corazón a un ritmo rápido Luhan se acercó a Sehun, su piel se erizaba cada vez más, en el pequeño transcurso Luhan cerró los ojos, si quería olvidarlo primero quería cumplir algo... una última ilusión con Sehun.
 
Luhan abrió sus labios al sentir la tranquila respiración del otro, sacó su lengua y con cuidado delineo el labio inferior del otro, provocando que aquel abriera sus labios al sentir la caliente lengua, Luhan atrapó el labio inferior  y empezó a saborearlos con dulzura, moviéndolos lentamente, tratando de grabar esos labios, sus narices se rozaban estremeciéndolos, Sehun me mantuvo quieto y con los parpados cerrados, Luhan terminó el beso con un pequeño pico, alejó sus manos de las mejillas del otro, una sonrisa amarga y forzada se formó en sus labios, Luhan retrocedió un paso, Sehun abrió sus ojos al no sentir la respiración de Luhan.
 
—  Adiós Sehun —  especuló Luhan a punto de quebrar su voz, podía sentir como su corazón se retorció al formular aquélla palabra, Luhan desvío su mirada de su amor unilateral, giró su cuerpo, un gemido de dolor escapó de sus labios, Luhan dio unos pasos pero un peso extra alrededor de su cintura lo detuvo, una respiración se pegó en su nuca.
 
—  Era todo lo que quería escuchar Luhan... Te amo —  esas palabras revivieron el corazón destruido de Luhan, el nombrado miró hacia atrás y se topó con una dulce mirada que jamás había visto, Sehun sonrió con sinceridad, y para cerrar su confesión besó la mejilla de Luhan.
 
 
 
 
 
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Su cuerpo convulsionaba de los nervios, no podía aguantar el silencio, no le desesperaba estar de aquel modo pero tenía tan preguntas que deseaban ser respondidas, su mente y corazón exigía aquello, pero sus labios y voz le hicieron una mala jugada al no querer soltar las preguntas que atormentaban su pecho, Soo apretó más la manga de su polo gris, su mirada no se despegaban de sus zapatos clásicos modernos color negro, por más que intentaba levantar la mirada, sus nervios se lo impedían por completo.
 
—  ¿Crees qué Baek y Chanyeol se arreglen? —  preguntó JongIn rompiendo el abrumador silencio, Soo con dificulta lo observó de re ojo.
 
—  Son idiotas sí no lo hacen...—  murmuró, JongIn sonrió al escuchar la voz de Soo.
 
—  Los dos son idiotas...  pero supongo que uno debe dar el primer paso... Yo ya lo di —  bisbiseo con una enorme sonrisa, las mejillas de Soo se tiñeron de rojo.
 
—  ¿P-primer paso? —  preguntó temeroso, JongIn suspiró y asintió.
 
—  Yo me confesé hace tiempo, pero aún no fui correspondido —  una ligera carcajada soltó JongIn ante sus propias palabras, Soo se tensó, no sabía si los sentimientos de JongIn eran sinceros o si él era sólo un capricho, porque sí, sabía perfectamente que JongIn hablaba de él.
 
—  JongIn yo...—  Soo no fue capaz de terminar ya que JongIn se interpuso en su camino con un gesto neutro.
 
—  Tal vez es momento de hostigar a mi amor... —  el de tez oscura tomó posición de la estrecha cintura de Soo, una sonrisa ganadora aparición en los gruesos labios de JongIn. — Ya no me importa un carajo si pierdo tú amistad... yo no quiero tu amistad, quiero tú amor, y voy a luchar por ello, a partir de ahora Kyung Soo no te dejaré, seré valiente...— JongIn acarició aquel hermoso rostro de niño que lo había cautivado desde hace tiempo, JongIn presionó sus labios en los acorazonados labios de Soo.