You Can't Erase The Past.

Cinco.

Marzo.

Pongo una caja de cereales y sigo empujando el carrito. Me estiro para alcanzar un tarro de café y lo sumo a las compras. Unas manos tapan mis ojos y dejo de caminar.

-Hola preciosa- saco sus manos de mi cara y volteo
-¿Qué quieres?- Dylan sonríe
-Te quiero a ti- pongo una mano en su pecho para evitar que se siga acercando
-¿Me estás persiguiendo?
-Te seguiré hasta el fin del mundo
-Diablos, realmente eres patético- miro sobre el hombro de Dylan encontrando a Seth
-¿Qué mierda haces aquí?- gruñe el castaño
-Vengo con Alice- Dylan voltea a verme
-¿Es cierto?- Seth me guiña un ojo y yo sonrío
-Sí
-Entonces te veo luego- habla entre dientes y comienza a caminar
-¿Ni un golpe?- Seth abre los brazos- oh, ya entiendo… estás solo- Dylan se frene y voltea

Se va directo contra Seth pero él levanta un brazo y  estrella su puño contra la cara de Dylan. El castaño cae al piso tomando su nariz y tapo mi boca con las manos.

-¿Qué vas a hacer ahora?- Seth patea el abdomen de Dylan y tomo su brazo
-Ya, déjalo
-Bien- Seth lo patea una vez más
-¡Seth!
-Era el último- alza las manos y camina hasta mi carrito- ahora corramos porque me meterán preso

Troto hasta su lado y nos alejamos lo más rápido que podemos del pasillo hasta las cajas.

-¿Qué haces aquí?- pregunto y apoya sus brazos en el carrito inclinándose
-Te estaba siguiendo- alzo las cejas
-El acoso es una enfermedad
-Tú me tienes enfermo- arrugo la nariz, eso no sanaba a Seth- con razón Dylan todavía es virgen, hasta yo quise salir corriendo- comienzo a reír

(…)

-¿Quieres algo para tomar?- Seth niega y enciende un cigarrillo
-¿Quieres ir al cine?- pregunta y dejo caer la botella de agua empapando mis zapatillas- ¿eso es un no?- me agacho para levantar el desastre evitando su mirada
-Eh, em, yo…
-Si no quieres no vamos- su cabeza se asoma por arriba de la mesa
-No, está bien- me levanto- iré a cambiarme- él asiente y huyo a mi habitación.

Saco del ropero un short negro alto y una remera blanca sin mangas. Me pongo unas sandalias de plataforma negras y una campera de jean. Guardo mi celular en el bolsillo trasero y paso al baño. Peino mi cabello, pinto mis ojos y cepillo mis dientes.

Llego al living y mi corazón se achica. Seth estaba acostado en el sillón, tenía su cabeza en un extraño ángulo y los brazos cruzados, su respiración era tranquila. Me acerco despacio sin despertarlo.

Me paro frente a él admirándolo. La manera en la que peinaba su cabello perfectamente dejando caer unos mechones sobre su frente, su nariz,  la línea de su mandíbula, sus pestañas, la palidez de su piel y como sus labios se entreabrían dejando escapar pequeños suspiros.

Seth era hermoso y si te tomabas el tiempo necesario para conocerlo descubrías que también lo es por dentro. Con pequeños detalles como saber el sabor del chocolate que me gusta, esperarme todos los días a la salida del colegio, cuidarme como si fuera de vidrio, su sentido del humor y un millón más de pequeñas cosas que pueden hacerte enamorar de él.

-Te he dicho que no me mires mientras duermo- habla con voz ronca y ruedo los ojos
-No entiendo por qué- saco el perfume de mi bolso y perfumo mi cuello
-Es extraño- se levanta
-Es romántico- él ríe y cruzo mis brazos. Habíamos tenido esta conversación muchas veces antes
-¿Nos vamos?- ruedo los ojos y paso por su lado saliendo del departamento

(…)

-La peor película de la historia- me rio mientras salimos del cine
-No estuvo tan mal- Seth se detiene  y volteo a verlo soltando otra carcajada al ver su expresión
-Se vuelve gay y se enamora del hermano de su novia- habla despacio
-Está bien, era muy mala- sonríe satisfecho y mantiene la puerta abierta para mí
-¿Quieres manejar?- mueve las manos de su moto frente a mí
-Nunca aprendí- me encojo de hombros
-Perfecto- frunzo el ceño ante su sonrisa