You Can't Erase The Past.

Diez.

-Oh, cariño, no pongas esa cara- Elena extiende su mano hasta mí
-¿Qué mierda están haciendo?
-No tengas miedo- susurra Seth y Elena toma mi mano
-Ven aquí- Elena me empuja sobre el regazo de Seth- bésalo- susurra y Seth junta nuestro labios

Doy un grito y me despierto de golpe. Dos brazos me rodean al instante mientras respiro agitada.

-Fue sólo una pesadilla, sólo eso, un sueño- murmura Seth en mi oído mientras acaricia mis brazos

Había soñado con el recuerdo de ambos varias veces los últimos meses pero este último fue el peor. Yo participaba en su asquerosa locura. Y de repente me siento sucia, puedo sentir la mugre que cubre mi cuerpo y me dan ganas de vomitar. Mis piernas y brazos comienzan a picar y me remuevo en los brazos de Seth.

-Necesito una ducha- me libera de su agarre
-¿Segura?- asiento mientras me levanto- está bien, yo volveré a dormir -murmura y aunque ya cerró los ojos vuelvo a asentir

Tomo mi ropa y miro el reloj, 8:45 a.m. Salgo al pasillo y esta vez evito la puerta de Jason dirigiéndome directo al baño.

(...)

-Tengo dos grandes noticias- anuncia Megan desde el teléfono
-¿Son buenas?- comienzo a secar los vasos
-Sí, escucha- hace una pausa- conseguí alguien para Jason
-¿Quién?
-Emma Thompson- parece más una pregunta que una respuesta
-¿Segura?- arrugo la nariz
-No, seguiré buscando- me rio
-¿Cuál es la segunda?- apoyo mis manos en la mesa sobre el celular en altavoz
-Redoble de tambores, por favor- ruedo los ojos mientras golpeo la mesa- soy oficialmente la novia de Jake- mis manos se detienen
-¿Qué?
-Me lo pidió anoche- doy un grito y ella también
-Quiero detalles- se ríe
-Me dijo que las estrellas deberían estar celosas de mi belleza y que si aceptaba ser su novia se aseguraría de que también lo estén los demás por nuestra relación
-Ow, ¿dónde fue?

Megan comienza a contar todos los detalles pero dejo de prestarle atención. Mi mente viaja unos cinco años atrás en el cumpleaños número 19 de Seth. Estábamos en la casa de los padres de Jason antes de que se divorciaran. La música se escuchaba por todo el lugar y había personas por todos lados.

Seth me había llevado al pequeño muelle que daba a un lago. La música se escuchaba lejana y las luces de los fuegos artificiales se reflejaban en el agua. Nuestros pies colgaban y se mecían despacio. Recuerdo nuestros reflejos distorsionados en el agua.

-Alice- levanto mi vista hasta él-¿crees que soy egoísta?- frunzo el ceño
-No- se ríe
-Lo soy, soy un maldito egoísta- respira hondo- te mereces a alguien exitoso, que... que te de todo lo que mereces y más pero- se acerca a mi cara- soy demasiado egoísta como para dejarte ir- susurra y mi corazón late con fuerza- ¿quieres ser mi novia?

Miro sus ojos. Sus azules y hermosos ojos. Quiero gritarle que sí pero mi cuerpo no parece responder. Me falta la respiración y mis manos hormiguean. Me quedo quieta en mi lugar sin mover un músculo. Él sonríe y se acerca aún más su respiración choca contra mi nariz y susurra sobre mis labios.

-Un beso sí, una cachetada no- sus labios se estrellan contra los míos

Mi cuerpo reacciona y mis manos acarician su nuca. Mis labios se mueven desesperados contra los suyos. Había soñado con besarlo los últimos seis meses que llevaba de conocerlo. Seth aprieta mis mejillas con sus manos y se separa. Su cabeza se esconde en mi cuello y siento sus labios besarme. "Mi novia" susurra en mi oído y sonrío. "Mi novio" contesto de la misma manera.

-Megan- mi voz suena apagada cuando la interrumpo
-¿Qué pasa?- murmura preocupada y escondo mi cabeza en mis brazos
-¿Por qué no puedo perdonar a Seth?

(...)

Abril.

-Por favor- hago un puchero
-No- Ian niega con la cabeza
-Por favor, te divertirás
-Ve con Megan- me sonríe
-Saldrá con Jake, por favor- tiro de su remera
-Está bien- doy un salto
-Paso por ti a las nueve- beso su mejilla

Convencer a Ian para salir había sido difícil. Últimamente se la pasaba encerrado o en el hospital. No sabía bien que le pasaba, tampoco le había preguntado pero esta noche le ayudaría a despejar su cabeza.

Después de limpiar y ordenar mi departamento me doy una ducha y me visto con unos shorts de jeans altos, un suéter gris y mis Vans negras.

Plancho mi cabello dejándolo lacio y suelto, pinto mis ojos y me perfumo. Tomo mis llaves, celular y la billetera y salgo de mi departamento.

Toco la bocina dos veces frente a la casa de Ian y él sale vistiendo una camisa a cuadros y un jean negro. Sube a mi jeep sonriendo.

-¿A dónde iremos?- pregunta
-Te llevaré a comer, no creo que recuerdes cómo es la calle- rueda los ojos

Llevo a Ian a un pequeño restaurant cerca del centro, luego de comer ahí salimos por un helado y nos sentamos en el pasto. Confesó que no salía conmigo por salir con la chica de la otra noche, Nina. Me contó que no es nada serio aún pero que le gusta mucho.

Hablamos sobre Megan y lo feliz que está por su relación con Jake y sobre Seth. Ian sigue creyendo que debo perdonarlo porque es lo que realmente siento pero no es tan fácil como suena. El recuerdo está fresco en mi memoria y hay un millón de preguntas y dudas que se le suman.

-Creo que- el sonido de mi celular interrumpe a Ian
-Lo siento- digo mientras reviso quien me llama

"Seth" se podía leer y miro la hora,  01:17, deslizo mi dedo terminando la llamada. Mi intención era hablar con Ian ya que llevábamos días sin vernos. Estoy por hablar cuando vuelve a sonar. Ian asiente en mi dirección para que conteste.

-¿Hola?- hablo
-¿Alice?- frunzo el ceño ante su tono de voz- hermosa Alice- susurra
-¿Estás bien?
-No- su voz se quiebra
-¿Dónde estás?- se ríe
-No lo sé
-¿Estás borracho?- me levanto
-Eso creo- hace una pausa- estoy tan solo, Alice
-Seth, ¿dónde está Jason?
-No sé, ¿Alice?
-¿Qué pasa?- le hago una seña a Ian para que subamos al auto
-¿Me quieres?- mi corazón se detiene por un instante
-Seth, estás borracho, dime dónde estás
-Dime si me quieres, por favor- susurra la última palabra y arranco el jeep- por favor Alice

Mis ojos se llenan de lágrimas mientras intento decidir qué contestar. Se escuchaba desesperado y temía que estuviera por hacer alguna locura. Cierro los ojos un segundo intentando retener las lágrimas mientras me muevo hacia su departamento.

Entonces me golpea de repente. Como cuando estás durmiendo y te tiran un vaso de agua. Un vaso de agua helada. La información me golpea de repente y mi mente se despeja. Estuvo ahí todo el tiempo. La respuesta era más que obvia pero yo no quería aceptarla.

Aprieto los labios asegurándome una última vez de que es lo correcto y tomo una gran respiración.

-Te amo Seth