• <❈ ≫──•◦𝕺𝖗𝖎𝖔𝖓 𝕭𝖑𝖆𝖈𝖐◦•──≪❈ > •

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╔╦══•❖•ೋ° °ೋ•❖•══╦╗𝕷𝖔𝖘 𝕻𝖗𝖎𝖒𝖊𝖗𝖔𝖘 𝕬𝖒𝖔𝖗𝖊𝖘𝕾𝖎𝖊𝖒𝖕𝖗𝖊 𝖘𝖔𝖓 𝖑𝖔𝖘 𝖖𝖚𝖊 𝖒𝖆𝖘 𝕯𝖚𝖊𝖑𝖊𝖓╚╩══•❖•ೋ° °ೋ•❖•══╩╝

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𝕷𝖔𝖘 𝕻𝖗𝖎𝖒𝖊𝖗𝖔𝖘 𝕬𝖒𝖔𝖗𝖊𝖘
𝕾𝖎𝖊𝖒𝖕𝖗𝖊 𝖘𝖔𝖓 𝖑𝖔𝖘 𝖖𝖚𝖊 𝖒𝖆𝖘 𝕯𝖚𝖊𝖑𝖊𝖓
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──── ∗ ⋅𝕱𝖑𝖆𝖘𝖍 𝕭𝖆𝖈𝖐⋅ ∗ ────

Orion caminaba fastidiado por los pasillos del castillo, era la primera vez que Regulus le daba problemas, aquello no le gustaba para nada, si seguia como hasta ahora terminaria igual que Sirius, solo pensar en eso le daba dolor de cabeza, no es que no amara a su hijo, pero ver por el camino que iba no le gustaba, parecia que su hijo mayor no entendia la gravedad de sus actos, todo quedaria en su registro, cada trabajo que pidiera veria aquel pedazo de papel, si no se dejaba ayudar por su familia era dificil verle en algun futuro con un trabajo decente que le permitiera darse las libertades que este quisiera.

Bufo molesto, no sabia que hacer, Walburga no ayudaba en nada negado a Sirius, soltando palabras hirientes, acusandolo de haber traicionado a su familia, no ayudaba en nada, detestaba eso, el nunca quiso eso, el amaba a su hijo, cada tonteria, cada regaño que recibia, cada puchero en el... odio el momento en el que quedo en la casa de leones, no porque odiara la casa, al contrario estaba orgulloso, pero Walburga buscaria cualquier excusa contra el para tratarle mal o desquitarse con el, maldecia a sus ancestros por haber arreglado su matrimonio con aquella mujer.

Maldecia a todos mientras caminaba hasta que choco contra una persona logrando que perdiera el quilibrio, pero se recompuso rapidamente, a diferencia del mas bajo quien estuvo a punto de caer de no se porque tomo su cintura deteniendole.

- ¿Que...? - No pudo decir nada, no al verlo, alli en sus brazos un pequeño niño, no debia tener mas de trece o catorce a lo mucho.

Cabello largo por debajo de sus hombros, ojos igualmente negro, una nariz levemente ganchuda pero no tanto, labios delicados, de un rojo natural, un mechón sobresalía cubriendo su rostro, mejillas palidas un tanto remarcadas por la falta de alimento al parecer, lo que le hizo fruncir el ceño fue ver el moreton en su mejilla, no noto la posicion en la que estaban hasta que el menor con un rostro inexpresivo dijo.

- ¿Podria soltarme? voy tarde a mi clase - se removio en sus brazos

- Claro - dijo tratando de sonar firme y desinteresado, pero era todo lo contrario a lo que sentia, queria saber mas de ese niño.

- Con permiso - le vio moverse tratando de seguir su camino

- Espera - le vio detenerse - ¿Cual es tu nombre? -

- ¿Por que deberia decírselo? - Lengua afilada, mirada firme y penetrante, aunque era pequeño a comparación suya, no le importaba mantenía su mentón elevado, ese niño no bajaria la mirada ante nadie, ni siquiera le conocia y eso ya le gustaba. - No conozco el suyo -

&quot;𝕷𝖔𝖘 𝕾𝖊𝖈𝖗𝖊𝖙𝖔𝖘 𝖉𝖊 𝖑𝖆 𝕺𝖗𝖉𝖊𝖓&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora