CAPITULO XIII

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Esto no podía estar sucediendo ahora.
Me encontraba en completa oscuridad en un lugar desconocido. No podía mover mis piernas, como si estas estuvieran pegadas al suelo hasta que un viento helado hace que me abracé a mi misma.
A lo lejos, una pequeña luz resplandece y como si fuera magia mis piernas son liberadas para permitirme correr hasta dicho rayo de luz. Al estar lo suficientemente cerca de él lentamente acerco mi mano derecha hasta posarla sobre  la bola de luz y es ahí cuando todo se ilumina permitiendome ver a mi al rededor excepto en una de las esquinas donde la oscuridad permaneció.

"Una cueva" Murmuro suavemente.

Me acerco a una de las paredes y al ver detalladamente en estas comienzan a parecer distintos dibujos y símbolos raros el cual no entendí de inmediato.

"Cada símbolo le pertenece a un Kwami" Exclaman pacíficamente a mis espaldas.

Y aunque sea suave la voz no evitó que me sobresaltara. De inmediato volteo y no puedo distinguir a la persona frente a mi.

"¿Que es este lugar? ¿Otro mundo espiritual?" Pregunto luego de sobrellevar el susto.

"Han existido muchos Kwamis, pero muy pocos sobrevivieron a aquel día" Dice omitiendo mi pregunta.

"¿Que día?" Pregunto tratando de identificar quien era la persona que me hablaba en única oscuridad de la cueva. Debía de admitir que no me daba buena espina.

"¿Crees que todos los Kwamis son buenos?" Cuestiona.

Es que no va a responder a ninguna de mis preguntas, pienso.

"Por supuesto. Los Kwamis no tienen maldad" Mi ceño se frunce.

"Detrás de la bondad camina la maldad pero algún día el mal sobrepasará y el bien ya nunca volverá. El control se tomará y los mortales a nosotros nos pertenecerán pero primero a la luz hay que apagar" Repite la mismas palabras una y otra vez. Su voz comienza a cambiar haciéndose casa vez más tétrica y, a su vez, la oscuridad del lugar se hace cada vez más grande.

No pierdo tiempo y comienzo a correr pero la oscuridad es cada vez mayor y me impide ver hacia donde voy. Simplemente corro hasta que ambos de mis tobillos son tomados y caigo abruptamente golpeando el lado derecho de mi cabeza comenzando a ver borroso.

"Sin la luz la oscuridad triunfará" Sisea.

Y cuando sentí que era mi fin una descarga eléctrica  pasa desde mi pecho a todo mi cuerpo y eso hace que un chillido de dolor se escuche. Una segunda descarga pasa por mi cuerpo y de repente comienzo a toser.

"Reacciona" Escucho de fondo. "Una vez más"

Última descarga y ahí es cuando abro los ojos tomando una bocanada de aire.
Todo pasa lento y borroso a mi alrededor. Personas con aparentes batas me decían algo, pero un pitido en mis oídos me impedían escuchar con claridad.

Solo sabía que estaba viva pero ¿hasta cuando?

"Tranquila, estaras bien" Escucho más claro y al voltear veo las máquinas del respirador e incluso una intravenosa en mi brazo. Genial, no recordaba que había pasado, me dolía la cabeza y lo único que quería en este momento era un croissant.

Siento un cansancio inexplicable y mis ojos se cierran poco a poco manteniendo mi mirada en una de las ventanas de la habitación con una hermosa vista de París.

"Nos veremos pronto" El susurro se escucha como el paso del viento y me quedo dormida como si toda mi energía fuera arrebatada.

Adrien's Sister  [Luka Couffaine x Tú] 1° temporada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora