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─SeungKwan─ Nombró Joshua recibiendo únicamente un tarareo por respuesta de parte del menor indicando que estaba escuchado ─¿No deberías estar jugando con el resto de tus compañeros?─ Señaló.
El niño se encogió de hombros y continuó escribiendo en su cuaderno ─Tengo que terminar esto─ Contestó.
─¿Tienes tarea?─ Preguntó el mayor y SeungKwan asintió inclinándose sobre el escritorio mientras balanceaba sus piernas, aún demasiado concentrado como para alzar su vista, sin embargo, de pronto detuvo el movimiento y dio un brinco en su asiento para enfocar su mirada en Joshua.
─¡Usted sabe hablar inglés!─ Alzó la voz repentinamente animado ─¿No es así, padre?─ Preguntó después.
Joshua sonrió y tomó asiento junto al niño ─Si, ¿por qué?, ¿te gusta el inglés?─ Quizo saber, pero el menor con una mueca negó, sacudiendo su cabeza de un lado a otro provocándole una risa debido al gesto infantil.
─Lo odio─ Respondió aún con la expresión de disgusto en sus razgos ─Necesito su ayuda─ Habló en un puchero y los ojos de Joshua se desviaron con interés a los pequeños labios abultados ─Mi profesor es horrible y tengo un examen la siguiente semana─ Explicó.
─Oh─ Soltó Joshua aún distraido, relamiendo sus labios para alzar su vista hacia los ojos del menor y concentrarse en enfocar su atención en las palabras ─¿Qué te están enseñando?─ Contestó, llevando su mirada al escritorio para dar un vistazo al cuaderno abierto, leyendo las palabras escritas con la bonita caligrafía de SeungKwan hasta que los delgados brazos descubiertos del niño capturaron su interés.
SeungKwan llevaba el uniforme para la clase de deportes, usando una simple camiseta blanca de mangas cortas que dejaban a la vista la suave piel de sus brazos que reposaban cómodamente sobre la superficie del escritorio, el niño tenía el hábito de hacer girar alguno de sus lápices entre sus dedos, pero ahora mismo mantenía ambas manos a cada lado de su cuaderno y Joshua no perdió oportunidad para inclinarse un poco más cerca, llevando su mano hasta posarla sobre el escritorio y luego poco a poco sobre la mano más pequeña, sonriendo al notar que era capaz de cubrirla por completo y fingió que continuaba leyendo el texto en la hoja a pesar de ser consciente de los ojos curiosos de SeungKwan sobre él.
El aroma del niño era embriagador, tanto que no podía evitar querer llenar su olfato de el y aunque se rindiera a esos instintos y lo hiciera, sabía que nunca sería suficiente, necesitaba de mucho autocontrol para no estrechar el pequeño cuerpo entre sus brazos y acabar hundiendo su rostro en el espacio libre entre el hombro y el cuello de SeungKwan, era un deseo tentador y más aún al imaginar lo suave y cálida que su piel probablemente era.
─Entonces, ¿puede ayudarme, padre?─ La vocecita de SeungKwan se oyó una vez más, ahora el niño había recostado su cabeza sobre la superficie del escritorio, alzando su mirada para encontrarse con los ojos del mayor, su mejilla aplastandose de forma adorable para únicamente resaltar el labio inferior sobresaliendo en un puchero.
Al parecer Joshua hizo notar su aturdimiento ante la imagen inocente del menor ya que tras no responder, SeungKwan encontró la manera de mover su mano bajo la del mayor hasta sujetarla en un posible intento por llamar su atención y lo logró, la cálida palma ahora rozaba la suya. Los ojos de Joshua se desviaron a sus manos unidas para luego regresar al tierno rostro y aclarar su garganta ─Si, SeungKwannie─ Finalmente habló.
SeungKwan lo quería, era el niño quien lo tentaba con sus acciones sugerentes, con su manera dulce de hablar y lo demostraba cada vez que le dedicaba una de sus sonrisas, esas en las que sus mejillas se elevaban hasta iluminar su rostro o como cada vez que pedía algo acompañaba sus palabras con un puchero abultando sus labios e inclinando sus cejas y Joshua sabía que todas esas expresiones y toques cariñosos únicamente podían significar una cosa.
O así lo interpretaba su mente porque a sus ojos, era el niño quien reclamaba su atención con intenciones inmorales y si era así, ¿cómo podía él negarse o siquiera resistirse?
SeungKwan continuaba en la misma posición, ahora con sus párpados caídos y sus pestañas rozando sus mejillas, trazando caricias con las puntas de sus dedos sobre la palma del hombre ─Tengo sueño─ Murmuró soltando un bostezo que apenas logró cubrir.
Joshua sonrió ─Pronto acabará el receso, no puedes dormir aún─ Indicó.
Las cejas del niño se fruncieron con disgusto ─Lo sé...─ Hizo saber en voz baja, casi arrastrando las palabras. De pronto, parpadeó, frotando con su mano uno de sus párpados hasta abrir con dificultad sus ojos ─Padre─ Llamó ─¿Es malo que venga aquí seguido?─ Preguntó.
Joshua se sintió inquieto ─¿Por qué?, ¿alguien te ha dicho algo?─ Habló intentando no evidenciar su preocupación, pero debía suponerlo, desde aquel día en que el niño prometió visitarlo más a menudo, acabó por convertirse en una costumbre tener a SeungKwan a su lado durante los recesos.
─Algunos chicos de mi clase dicen que soy raro por no jugar con ellos─ Explicó SeungKwan, sujetando uno de los dedos de Joshua mientras miraba su cuaderno distraídamente.
─Oh─ Joshua lo sabía, los niños suelen notar ese tipo de cosas y aunque sólo hayan pasado unas cuantas semanas desde que se volvió cercano a SeungKwan, debía ser cuidadoso ─Quizás deberías jugar un poco con ellos también─ Sugirió.
SeungKwan formó un puchero ─Pero me gusta estar aquí, usted es agradable─ Reprochó.
¿Acaso SeungKwan sentía la misma atracción?, esas declaraciones sólo lo hacían creer que era correcto y correspondido, no había duda, SeungKwan era quien no permitía que esto acabase y llevaba tanto tiempo conteniéndose por nada y es que probablemente SeungKwan ya se encontraba igual de impaciente por esperar algun avance porque el niño prácticamente ya le había entregado todas las señales. Oh, Joshua era tan gentil que incluso había aguardado deseosamente sólo para no perturbar al menor, pero supo que teniendo trece años él ya era perfectamente capaz de saber lo que quería.
─A mi también me gusta que estés aquí─ Contestó con voz suave, alzando su mano libre para acariciar la suave mejilla de SeungKwan hasta sostener uno de los mechones de su flequillo que le impedía apreciar por completo los bonitos rasgos de su rostro.
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Creo que debí haber hecho un fanfic aparte con esta historia, pero soy mala para poner títulos y portadas :(
