Paso a Paso (ZhongTao) (Genshin Impact)

05. Viaje (Parte II)

Una explosiva queja de cansancio salió de su boca. Sentía los pies de plomo. Su espalda, que se encorvaba cada vez más conforme avanzaba, comenzó a causarle una gran irritación. El mal humor empezaba a desnivelar esa balanza de autocontrol que poseía. Cada vez le era más difícil sostenerse, incluso en esos momentos en que se encontraba apoyada por su báculo, ya no le era suficiente.

Su acompañante le dedicó una mirada rápida antes de echar un vistazo alrededor intentando ubicarse en el mapa. Tomó una fotografía de la posición del sol en su memoria, cerciorándose que alcanzasen en aprovechar algunos minutos para reponer energía. De alguna forma, tenía que confirmar que ambos pudiesen parar sin afectar su avance hacia su destino.

─ Creo que podemos tomar un descanso.

La joven respondió agradecida mientras se dejaba caer en el camino de tierra acompañada de su arma. Él resopló levemente tomando un poco aire. También se encontraba algo cansado. A pesar de encontrarse en buena forma, debía admitir que el calor había causado que sintiera que su mente se abrumaba sin realmente pensar en alguna otra cosa que no fuese yacer a la sombra de un árbol.

Después de escanear la zona con sus ojos, pudo encontrarse con un pequeño grupo de manzanos que se hallaban un poco más adelante. Zhongli miró hacia Hu Tao para indicarle que debían avanzar un poco más, pero se sorprendió al percatarse de que la joven se encontraba casi corriendo hacia ellos. Se sonrió mientras observaba la hilarante escena de su jefa caminando de forma similar a un pato quejándose por el dolor de sus piernas. Sintió algo de curiosidad. ¿No se suponía que correteaba todo el tiempo por el puerto durante el día? Él pensaba que aquello sería suficiente para brindarle más que una buena condición física. Además de encargarse siempre de hacer inspecciones en la Colina Wuwang cada cierto tiempo.

Agachó la mirada mientras se le escapaba con lasitud un ligero suspiro. Después se unió a Hu Tao, quien se encontraba con sus ojos cerrados al pie de uno de los árboles descansando.

─ Que bien se siente poder sentarse─ comentó como si aquello fuera lo mejor del planeta mientras estiraba todas sus extremidades.

Zhongli se sentó después de reposar su arma al lado de la de Hu Tao. Dejaron que la brisa les acariciara sus rostros relajándose; permitiéndose sentir el silencio que traía consigo la estación de verano.

Tras algunos minutos, Hu Tao sintió su estómago rugir. No habían podido comer nada desde que salieron, pues debido a la distancia que tenían que recorrer, ellos habían acordado no detenerse para poder arribar a la Aldea lo más rápido posible. Sin embargo, no contaban con que el tiempo les haría la travesía más exhaustiva de lo que pensaban.

Zhongli, al escuchar el ruido proveniente del estómago de la joven, se permitió abrir sus ojos dispuesto a recoger algunas manzanas que colgaban del árbol para que ambos pudieran comer. No obstante, se encontró con una escena que le dejó pensativo. Hu Tao se encontraba reposando sobre una de las ramas del árbol mientras devoraba la fruta. En otro momento quizás hubiera dudado de su capacidad de sigilo, pues la joven no era para nada tranquila. También el recordar que no podía ni seguir sus pasos le hizo dudar. Por otro lado, sabía a la perfección que nada la detendría de poder saciar su necesidad.

Así era ella, una persona rápida y de acción.

Siguiendo el mismo camino, Zhongli carraspeó su garganta llamando su atención. La joven bajó su vista entendiendo la señal, y después le arrojó una manzana directo a su mano. Él la atrapó sin problemas antes de comenzar a comerla.

No tardó mucho en escucharse un crujido, y con ello, el desprendimiento de la rama donde se encontraba la joven.

Sus reflejos, que se encontraban bastante pulidos, le advirtieron de la caída saltando justo antes de la tragedia. Lo que no predijo, fue que su compañero reaccionaría a su rescate logrando que la rama que había utilizado como impulso, golpeara en su rostro.