Paso a Paso (ZhongTao) (Genshin Impact)

12. Verdad

Abrió sus ojos de repente con la insípida sensación de encontrarse tarde para todo. Fijó su vista al poco horizonte que lograba ver de entre las ramas de los árboles y rocas. El sol apenas se encontraba saliendo. Sintió su garganta seca permitiéndose suavizarla por medio de su saliva matutina. Sintió como su rostro pegaba con algo duro y áspero. Levantó un poco su cabeza y se encontró con el rostro de Zhongli dormido. Su respiración era tan suave que le era imposible saber si éste respiraba apropiadamente por lo que, instintivamente y de una manera cuidadosa, levanto su pulgar para colocarlo enfrente de su nariz cerciorándose de que al menos estuviese tibio. Después, se separó lentamente jalando un poco la chaqueta que en ese momento, les cubría a ambos.

Le observó. Examinándolo.

Si bien anteriormente ya le había visto dormir, esta vez se sentía diferente. Tenerlo tan cerca le hizo sonreír y percatarse de los pequeños relieves entre sus cejas y frente. Sus pestañas no tan largas y su nariz remarcada. Su mentón con la barba a punto de salir le hizo gracia. Su quijada no tan perfilada le revestía el marco de una manera espectacular asemejándolo a un pentágono.

Afinó sus sentidos. Y logró percatarse del olor y el calor que su cuerpo desprendía. Negó con la cabeza; pues sintió que haberle confirmado la respiración había estado de más.

Un ligero quejido salió de los labios del hombre. Se removió en su lugar abriendo sus parpados lentamente vislumbrando perpleja por el tono amarillo tan profundo de sus retinas. Zhongli le atrajo a su pecho debido a que en su subconsciente, pensó que Hu Tao se había alejado por el movimiento nocturno. Cerró nuevamente lo poco que había abierto sus ojos, sin darse cuenta de lo que sucedía.

Hu Tao, por su parte. Tenía el rostro hundido entre el brazo que le rodeaba. De alguna forma, una corriente eléctrica subió por su espalda erizándole la piel. Se sentía... extrañamente cómoda.

A pesar de saber que no era una experta en descifrar su propio sentir. Aquello lo sentía tan profundo que claramente pudo percibir como su corazón dio un brinco a una piscina llena de ansiedad. Y sólo en ese momento, una idea tan absurda como posible pasó por su desastrosa mente.

¿Sería posible que yo... esté sintiendo algo más por él?

Una carcajada de su yo interior le hizo temblar y la golpeó con sólo lo que ella esplendorosamente podía expresar. Acidez.

El reflejo de ella misma mirándole con diversión entre una pila de cráneos apareció en su subconsciente. La sangre corría como un río que llegaba hasta sus pies. Le miraba atenta.

Él solo es tu amigo y cumple con su deber, es todo lo que ya sabes.

Hablando de lo que él representa, sólo hará que no logré ver mis propias emociones.

¿Y si realmente yo...?

¿Hu Tao?

¿Zhongli?

Un dolor en su mejilla izquierda le hizo despertar. Sin darse cuenta, se había quedado inmersa en su propia lucha. Los dedos huraños de Zhongli se encontraban estrangulando la piel de su rostro. Hu Tao le apartó y se separó bruscamente de su cuerpo sobándose la zona afectada mientras le miraba frenética y con su rostro enrojecido de vergüenza.

Zhongli se miró el dorso y después a ella. En particular, no había tenido aquella experiencia jamás. Había encontrado a Hu Tao apretando su camisa y con el ceño fruncido tensando su dentadura. Por lo que creyó conveniente despertarla de inmediato.

─ Perdona. ¿Te lastimé?

─ Lo siento. Tuve una ligera pesadilla─ dijo mirando distraída a su alrededor con solo una cosa en mente. Escapar de allí. Necesitaba algunas respuestas.