12. QUIERO SER EL INDICADO

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Nas (Gula)

Luego de que nos sacarán algunas fotos a los tres juntos, todo se volvió un caos. De la nada empezó a llore y Carla no dejaba de dar ordenes para que desarmaran los escenarios a tiempo, Bianca tenía que quedarse a ayudar a su tía a acomodar las cosas, mientras que yo tuve que salir corriendo a casa porqué a uno de mis maravillosos hermanos se le ocurrió querer preparar la cena y eso termino siendo un verdadero desastre.

Cuándo llegué a casa me encontré a los seis intentando esconder la escena del crímen, incluso Celeste y Sebastian se vieron involucrados en esto, y es que estaban cubiertos de harina, así que los encontré con las manos en la masa, literalmente.

Tuve que encargarme de salvar la cena, como alternativa nos hubiese tocado pedir comida a domicilio y aunque al menos la mitad de nosotros ya esta trabajando no podemos permitirnos desperdiciar el dinero.

Luego de hacer una cena decente, le mande un mensaje a Carla para disculparme con ella por tener que salir corriendo tan de repente, ella dijo que no había problema pero que le gustaría que viera las fotos ya retocadas para decidir juntos cuáles serían  elegidas para la revista, así que tengo otra comida en la casa de los Aubriot. Luego de eso solo recuerdo haber caído en un profundo sueño.

Esta mañana hemos quedado en desayunar todos juntos como hermanos, así que sabiendo que soy el encargado de hacer el desayuno, me despierto un poco más temprano que los demás, voy rápidamente al baño a atender las necesidades que ahora mi cuerpo me exige y bajo a la cocina. Livi baja unos minutos después y le pido ayuda para poner la mesa, luego de un par de minutos más, mis hermanos ya se encuentran en sus puestos. Blas inicia a golpear la mesa y cantar "queremos comida, queremos comida" Mica se une a él, Kaira y Livi ríen, mientras Victoria nos mira con su típica cara de desaprobación. A veces creo que ella debería relajarte un poco y disfrutar más estos momentos, parece que viviera con un palo en el cu... Suena el timbre, supongo que son Theo, Sebastián y Celeste, pero me llevo la sorpresa que el primero no se encuentra presente cuando abro la puerta.

Celeste se disculpa diciendo que ha tenido un pequeño retraso y que tendremos que esperarlo unos minutos. Toman asiento y yo inicia a servir la comida cuándo en una esquina de la cocina aparece Theo, ninguno se mueve, ninguno dice nada, solo observamos como mi hermano mayor ha aparecido en la habitación tan de repente.

Theo nos observa y parece asustado, estoy a punto de preguntar que carajos sucede cuando vuelve a irse, así como apareció, desapareció. Vuelve a aparecer pero esta vez sentado al lado de Celeste, él parece igual de sorprendido que nosotros, incluso asustado.

—Pe... Pero —escucho la voz de Blas que quiere decir algo, pero de seguro no sabe el que.

—Se puede saber ¿Que carajos te pasa? —Victoria suena un poco alterada, aunque quiere simular serenidad manteniendo su típica postura impecable.

—Yo... Yo no lo sé, está mañana simplemente empecé a aparecer y desaparecer como si nada.

—Creo que deberíamos hablar con el tío, de seguro él sabrá que hacer —digo cogiendo el teléfono.

Me encargo de llamar por teléfono a mi tío mientras mis hermanos están armando teorías de lo que sea que posiblemente le pase a Theo. Pasa un poco más de media hora cuándo nuestro tío ya está en la casa con nosotros, el lleva una camiseta informal y un par de jeans, no se parece nada a cuándo va vestido con traje pero supongo que no siempre puede ir vestido tan formal.

Él trae un maletín y nos pide quedarnos abajo mientras lleva a Theo a una de las habitaciones de arriba para poderlo examinar, la espera se hace larga cuando nos encontramos sentados en la sala viendonos entre nosotros, los minutos parecen no pasar y yo empiezo a desesperarme.

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