¡Alquile mi Vientre!© [Completa]

capitulo 12 Momento caliente

Para cuando se bajo de su coche se dispuso a subir los escalones cuando de pronto ella apareció en la entrada y maldijo para sí mismo. Era un idiota como se le fue a ocurrir llevarla a un restaurant de los que el frecuentaba, debió saber que ella no tendría nada apropiado para un lugar así, se sentía estúpido y avergonzado. 

Ella bajo los escalones, mientras que el corazón de él se le salía por la boca. Tenía unas piernas preciosas, el vestido que llevaba era muy sencillo, negro escotado en forma de corazón que resaltaba sus senos. Se ceñía muy bien a su estrecha cintura, llevaba el cabello suelto y esos tacones por lo mínimo le habían aumentado unos centímetros más en altura.

—Creo que deberíamos cancelar esta cena. Soltando sin rodeos, para él fue como si le echaran un jarrón de agua fría.

—¿Por qué quieres cancelar?

—No estoy vestida adecuadamente para lo que tú has pensado. Dijo fijando su mirada en su traje.

—Pero si estas perfecta, el que esta demás soy yo. Se quito el saco, se aflojo la corbata, se arremango las magas de la camisa. –Ahora si estamos bien, ven sube al coche. Ella se mordió los labios y obedeció.

Llegaron a un restaurant muy bonito donde Amelia se sentía cómoda, mientras cenaban ellos conversaban sobre los asuntos de trabajo.

—Yo pensaba que podría ser la semana siguiente. Dijo de pronto Erick.

—Si claro, cuando tú quieras.

—Perfecto. Reino el silencio por unos momentos hasta que Amelia lo rompió.

—¿Por qué deseas tener un hijo de este modo?. El se quedo observando su copa de vino un rato antes de volver la mirada hacia ella.

—Es la mejor manera para mí.

—Pero puedes formar una familia si decides buscar una buena mujer y casarte. Así tu hijo crecería con su mama.

—Algunas mujeres no piensan de esa manera Amelia.

—¿Qué quieres decir?

—Estuve casado hace cinco años, todo marchaba bien entre nosotros yo le pedí que formáramos una familia, quería tener hijos. Amaba a mi esposa. Ella se embarazo, pero no me lo dijo simplemente todo la decisión de terminar con el así como empezó. Una noche tuvimos una fuerte discusión porque ella no quería ir al médico, teníamos más de un año intentando buscar un bebe pero ella se negaba. Hasta que no pudo con el cargo de conciencia y me lo confeso todo, se había practicado un aborto hace un año. A raíz de eso decidimos divorciarnos, esa experiencia me llevo a tomar esta decisión de tener un hijo de este modo.

—Lo siento mucho Erick. Le puso la mano en brazo y el contacto produjo un cambio en ambos.

Erick no sabía que lo había impulsado pero allí estaba, le puso la mano en el cuello delgado de Amelia la acerco a él y la beso. No fue un simple beso, fue uno lleno de ternura y sintió algo de torpeza  por parte de ella que lo hizo reaccionar y separarse inmediatamente.

—Lo lamento Amelia, yo. Ella estaba sonrojada y con la mirada brillante y las pupilas dilatadas, ella no decía nada estaba avergonzada y él era el culpable. –Amelia ¿Alguien te ha besado antes?

Ella no respondía, desvió la mirada y apretó los labios. Oh dios mío!  Nadie la había besado él era el primero en probar esos hermosos labios que sabían a vino.

—Lo lamento, me siento como un ladrón robándote todo.

—Está bien. Se levanto de la mesa excusándose para ir al baño.

Su primer beso, uno de verdad y con ese hombre tan guapo. Era como un sueño, nunca imagino que él la besara aquella noche, le produjo algunas reacciones que nunca había experimentado. Sentía la sensación de abrazarlo y pegarse más a él, que no la dejara de besar aunque ella no sabía muy bien lo que estuviera haciendo.