CAPITULO 10

743 48 10
                                    


Mentiría si dijera que no estoy nervioso. Parezco un niño cuando va a su primera cita con la chica que le gusta. Y básicamente es algo así.

Tengo una "cita" con Eva, para hablar de nosotros. De todos estos años. Me interesa saber cómo ha estado, que ha hecho, lo que ha vivido. Si ha tenido pareja o no, la verdad que no sé si quiero saberlo. Pero ha sido parte de ella estos años, y si me lo quiere contar, la escucharé encantado aunque la sangre me hierva al pensar que otro hombre ha ocupado el puesto que yo tenía en su vida.

Me encuentro en la ducha, y sonrío como un tonto al recordar nuestra primera cita. Pero la de verdad, hace muchos años. Éramos unos niños, a penas teniamos 14 años.

Hace unos años....

-Entonces... te recojo en tu cabaña a las 8? -le digo a Eva con un nerviosismo en mi cuerpo que nunca había tenido, mientras me rasco la nuca
-Perfecto, allí te espero -deja un beso en mi mejilla y se marcha.

Llego a mi cabaña corriendo, dando saltos de alegría. Nunca había tenido una cita. Solo me he dado algún beso con alguna chica. Estoy verdaderamente nervioso.

Eva y yo nos conocemos desde los 9 años, fue la primera vez que vinimos al campamento. Con esa edad no piensas en chicas casi, solo en jugar con tus amigos, en cantar. No sé, lo normal.

No he crecido mucho más, solo tengo 14 años, pero ahora en esta época de crecimiento, estoy experimentando sentimientos, a parte de que voy creciendo, en todos los aspectos.

Y Eva, que decir de ella. Me cautivó desde el primer día que la vi. Es una chica súper guapa. Su pelo largo, castaño. Esos ojos azules. Pueden volver loco incluso a la persona más cuerda del mundo.

Y yo, yo soy una de las personas que está loco por ella.
Me ha costado la misma vida acercarme a ella en este aspecto.

Nos llevamos muy bien de siempre. Esperamos todo el año a que llegue junio para venir al campamento, y lo primero que pienso es en ella. Siempre. Y a la medida que han pasado los años, me he ido fijando más y más en ella.

Conozco cada facción de su preciosa cara. Las caras que pone cuando no entiende algo. Su voz de enfadada. Las miles de expresiones que tiene cuando se sube encima de un escenario, imita a las diosas. Bueno, es una de ellas.

Le cuento a los chicos que me ha dicho que si. Que tengo una cita con Eva. Un gran sueño.
Me felicitan, se alegran mucho por mi, llevo mucho tiempo esperando este momento.

Me arreglo como puedo. Unos vaqueros y una camisa abierta hasta el pecho. Siempre me dijo que le gustaba. Y ahora si, voy a por ella a su cabaña.

A los minutos sale de esta la castaña, y mi corazón parece latir más rápido de lo normal.

-Wow, estás guapísima -le digo cuando ya está justo en frente de mi. Lleva un vestido de flores súper bonito. Le queda genial.
-Tú también rubio -me dice sonriendo- vamos?
-Vamos -caminamos los dos juntos, hablando de cualquier cosa. Llegamos al camping. Mis amigos me han ayudado a prepararlo todo.

Una gran manta sobre el césped. Unos sándwich que me han dado las señoras del comedor, que son geniales. Un par de Coca Colas. Y unas chuches, que le encantan.

-Que bonito Hu, me encanta -dice sonriendo mientras se sienta en la gran manta que hay en el césped. Yo imito su acción. Me siendo en frente de ella. Y comenzamos a comer. Y entre risas y bromas, pasan las horas.

-Cantamos algo? -le digo mientras cojo la guitarra
-Sii, has compuesto algo más? -me dice ansiosa. Siempre que compongo algo, es la primera a la que se lo enseño
-Tengo algo, pero no la he acabado -le digo mientras afino las cuerdas de mi preciosa guitarra
-Va, cántame lo que tienes -me dice y yo asiento sonriendo

Posdata; te quiero Donde viven las historias. Descúbrelo ahora