Kagehina ~ Larga vida al sol (AU Museo/Planetario)

Capítulo 11 ~

Cuando se percataron ya habían llegado al planetario y Kageyama ya estaba prendiendo el proyector, abriendo la cúpula.

Los ojos de Hinata se deleitaron con un mar de estrellas, como aquellos que veía en películas. Tenía la suerte de vivir en una ciudad relativamente pequeña para que el cielo no esté tan contaminado. Además el clima, por ahora, parecía estar a su favor.

— Es hermoso, ¿no? - preguntó Tobio, acercándose desde atrás.

— Totalmente. - respondió con los ojos fijos en el techo.

Kageyama se sentó en el suelo, mirando hacia arriba. Hinata jamás lo había visto tan relajado, hasta parecía que su típica cara amargada se había endulzado. Shoyo se sentó junto a él con una sonrisa boba y los ojos brillantes.

— Wow, sabía que se vería bonito, pero no esperaba... esto. - dijo una vez que su mirada se había vuelto a concentrar completamente en la cúpula.

— Lo sé, yo estaba igual la primera vez. ¿Puedes captar algún planeta o alguna constelación? - preguntó curioso Kageyama, con un tono suave, muy extraño para él.

— Ahm... ¡ahí! Ahí está la constelación de Cáncer. - dijo Shoyo increíblemente rápido.

— Wow, no tardaste nada. La conoces bien. - respondió Tobio, muy sorprendido.

— Es que es mi signo. - respondió Hinata, un poco avergonzado.

— ...¿crees en la astrología? - preguntó el más alto, listo para burlarse de alguien.

— Creo en que la energía y los astros pueden afectar en lo que somos, pero no creo que los signos zodiacales describan exactamente como pasa esa conexión. Solo me divierte ver cosas de como supuestamente soy. Además los memes están buenísimos. - explicó el pelirrojo un poco menos apenado, le gustaba tomarse su tiempo hablando cuando alguien que realmente lo oía estaba del otro lado de la línea.

— ...es una forma interesante de verlo. Hablando de signos, ¿sabes que mes es cual? Nunca supe mi signo porque eso de los horóscopos me parece una idiotez.

— Me acuerdo de la mayoría, ¿cuando naciste? - respondió Shoyo.

— Veintidós de diciembre. - dijo Tobio, indiferente.

— Veintidós de diciembre... ¿y tienes veinticuatro? - exclamó sorprendido el pelirrojo.

— ¿Si? ¿Algún problema? - preguntó un poco a la defensiva.

— No, solo me sorprende de que sea mayor que tú, ¿que te dio tu madre de comer para ser tan alto?

— La pregunta es: ¿que te dio tu madre de comer para ser tan enano? - retrucó el mayor rápidamente.

— Cállate Bakayama. - respondió Hinata haciendo un puchero.

Tobio se soltó a reír, algo que para él no era nada común. Hinata no pudo evitar reír también, había algo en ver a Kageyama con esta extraña faceta que lo hacía sentirse especial. Como si solo él pudiera ver ese lado del malhumorado astrónomo.

— Pero, ahora enserio, ¿eres mayor que yo? - preguntó Tobio una vez que se calmó, genuinamente intrigado.

— Al parecer si. Yo también tengo veinticuatro pero cumplo en un mes, el veintiuno de junio.

— Ah. Entonces la diferencia es poca. - respondió en un tono bajo.

— Supongo... Ah, ya se me olvidaba. Tu signo es Capricornio. - dijo Hinata, despegando por primera vez su mirada del techo para analizar con cuidado las facciones tenuemente iluminadas del otro.