Perdonar...
¿Que es perdonar?
Perdonar es aprender a sanar, es intentar reparar lo que en algún punto se rompió.
Las traiciones hieren y lastiman, te queman el alma y llenan de impotencia. Aprender a curar esas heridas, el soltar el rencor frente a esa traición que en un instante nos cegó en el dolor y la furia. Enseñarle al corazón a perdonar. Hacer que la mente aprenda a superar y se desahogue en emociones, deje sanar el pequeño y a la vez gigante órgano que bombea sangre a nuestro sistema, dejando fluir el alma llena en sentimientos.
Dejar que las heridas sanen dejando marcas del daño que se causó. Cicatrices que jamás se terminaran de borrar pero en su momento indicado dejaran de doler.
Nuestro corazones se rompen y agrietan, mientras que la mente pone barreras de enojo y rencor para proteger nuestro corazoncito mientras se recupera de sus dolorosas y palpitantes heridas.
Cuando estamos preparados para perdonar, las barreras bajan guardia soltando asi el rencor que nos invade, los daños se curan y sanan, dejando asi, marcas que mostraran que a pesar de lo que pase y por muy embriagador que sea la impotencia y enojo, se superará dejando asi el recuerdo siempre presente en cicatrices, que juntas con cada traición y cada golpe, van armando un majestuoso y fuerte corazon, una obra de arte impregnada en el, mostrando lo fuertes que hemos sido, superando asi lo malo y los errores de la humanidad.
En el proceso del perdón pueden abrirse nuevamente heridas con un nuevo golpe, la mente se nublara en enfado y querrá poner más resistencia para evitar mas daños hacia nuestra alma. Algunos golpes y traiciones serán mas dolorosos y profundos que otros, unos llevaran mas tiempo por curarse. Pero al final en su momento todos sanarán, dejando solo un recuerdo, que en el momento indicado, ni tan solo causará dolor. Solo quedara ahi, como una imagen pasajera proyectada en la mente y guardada en la memoria.
Por eso vive, sufre y llora hasta que ya no duela.
Esto es perdonar, es soltar, es superar, es seguir viviendo, recordar y guardar.
De lo malo sacar algo bueno. De lo oscuro algo claro. De las heridas su belleza.
No sirve de nada guardar rencores y pesares en el corazón. Al final del día son un peso que te aplasta del que ni siquiera eres responsable.
No controlas los errores de los demás, las cosas no van a cambiar.
Lo único que te queda es sanar lo que en su momento dolió.
Perdonar no significa olvidar.
Aprende a perdonar.
Perdónate a ti para poder perdonar al otro.
Perdona para tener paz.
Perdona por tu bienestar.
Perdona para vivir.
ESTÁS LEYENDO
De mis entrañas
PoésieSentimientos, emociones, mas que todo ideas y pensamientos. Todas juntas a la vez revoloteando por mi mente, serpenteando por mi alma y fluyendo por mi ser.
