﹚CALIGULA﹙: XiaoDery.

﹚Leo﹙

Leo lo miro. -te ayudaremos...Pero eso no quita que la ayuda sea completa.-

-¿a qué te refieres?-pregunto XiaoJun confundió. -¿Medu?-

-como el dice, somos tus guardianes nuestro poder es muy bajo. Tu eres un demonio, tu poder es alto. Te lo había dicho una vez, Calias, ¿tienes mala memoria o algo así?, te voy a dar un té para que no seas tan despistado muchachito.-

-basta, no lo trates con tanta confianza, Medu. - se quejó Leo. -mi señoría, estamos aquí para usted.-

Calias asintió. Sonriendo un poco. -gracias...- susurro. Tomandolo de la mano a el mayor y a Medu.  -ahora que los tengo a ustedes...¿podrían enseñarme a controlarme y manejar mi interior?-

-claro que lo haremos, mi señoría. Pero usted no esta bien en este momento, debe descansar y guardar su energía...-

-pero me siento bien, no tengo ningun dolor.-

- no es fácil. Mirate tienes fiebre incluso.-dijo Medu, tocando su frente el menor. -será mejor que duermas. Se te da muy bien dormir.-se burló entre risas.

Leo, lo miro amenazante. Calias sólo río.

- es lo único que hago bien aquí. ¿y cómo no?, siempre eh estado sólo desde que recuerdo, y caligula no me deja salir nunca. - respondió XiaoJun, cubriendose con las sábanas.

Las risas pararon. Cuando Medu y Leo se miraron; al escuchar el nombre de caligula.

-mi señoría...- habló Leo. -¿usted de verdad lo ama?-

-lo amo más a el que a mi mismo...lo amo demasiado.- respondió con una enorme sonrisa, llevándose sus brazos al pecho. - es por eso que quiero que ustedes me enseñen a controlarme para poder estar a su lado sin hacerle daño.-

Medu y Leo se volvieron a mirar.

XiaoJun los miro confundido nuevamente. -¿qué pasa?-

-para nada.-respondio Medu.  Sentándose a su lado. -mejor descansa. Cuando te levantes, nosotros te ayudaremos con tu poder.- dijo seriamente.

-pero ya dije que estoy bien.-

-ya te dijimos el y yo que no lo estás.-

Y Calias asintió. Para suspirar. -esta bien...- susurro, tratando de entender, pues ellos dos sabían más que el.

Medu miro a Leo, quien estaba sentado a la orilla del templo.

-no me gusta que tengas mucha confianza con el.- le dijo el mayor. Levantándose. Dándole una mirada de que salieran del templo para dejar descansar a Calias.

Medu entendió. Caminando ambos a la salida.

-y a mi no me gusta tu seriedad. "Señoría, majestad" , el no te va a matar por no llamarlo así. -respondió el menor. Caminando al lado de Leo. En la arena.

-lo sé, pero-

Medu lo interrumpió. -pero nada. Deberías de ser tan formal y dictador como tu padre.-

- no puedo...- susurro, mirándolo.

-te entiendo. Descuida.- le sonrío el menor. -¿cómo te sientes aquí en la tierra?- pregunto, cambiando de tema.

-bien, pero la energía de caligula no me gusta.-

-¿por qué?, es un tonto yo lo se.- se burló, Medu.

-el huele a codicia y a lujuria. Esos olores me recuerdan a mi padre.-

- no sabía que esas dos palabras se podían oler. -