AGENT PARRISH-STEVE ROGERS [1]

CAPÍTULO 6

Evelyn se apartó el pelo de la cara y ayudó a Peggy a quitarse el uniforme antes de que las dos volvieran a entrar en el edificio. Evelyn se quedó en lo alto de la escalera y vio cómo los paramédicos colocaban el cadáver de Erkisne en una camilla y se lo llevaban. Una sola lágrima rodó por su cuello y se la limpió rápidamente.

"¡Evie!" llamó Howard. Evelyn se dio la vuelta y vio cómo Howard subía corriendo las escaleras y se echaba en sus brazos. "¿Estás bien?"

"Sí Howie, estoy bien", le dijo Evelyn mientras él se retiraba para inspeccionar su cara y sus brazos, antes de volver a abrazarla.

"¿Dónde está Steve?" preguntó Howard.

"Se fue tras el tipo que disparó a Erkisne", respondió Evelyn mientras Howard le frotaba la espalda.

"Por cierto, siento lo de él", dijo Howard. "Era un gran tipo".

Evelyn suspiró. "Lo era".

"Evelyn", Evelyn se dio la vuelta y vio cómo Peggy se acercaba a ella.
"Steve está en la sala médica".

Evelyn se apresuró a seguir a Peggy mientras ésta la guiaba por muchos pasillos hasta que llegaron a una puerta blanca. "Aquí", susurró, abriendo la puerta.

Evelyn entró y vio a Steve sentado en un banco con una enfermera sacándole sangre. "¿Estás bien?", le preguntó.

Steve miró a Evelyn y asintió: "Estoy bien", suspiró. "¿Crees que tienes suficiente?", le preguntó a la enfermera que le sacaba sangre.

"Cualquier esperanza de reproducir el suero está encerrada en tu código genético", le dijo Peggy.

Evelyn se volvió hacia ella. "Sí, pero sin Erkisne, tardará años".

Peggy se encogió de hombros. "Quizá podamos replicarlo con tu ayuda y la de Stark".

"Se merecía más que esto", suspiró Steve.

"Si sólo pudiera funcionar una vez, estaría orgulloso de que fuera contigo", le sonrió Evelyn a Steve. Él levantó la vista hacia ella y luego volvió a bajarla.

"Deberíamos dirigirnos hacia ellos", dijo Peggy señalando a los hombres y a Howard que estaban mirando el submarino en el que el agente de Hydra intentó huir. Steve y Evelyn asintieron antes de seguirla.

"¿Qué tenemos aquí?" preguntó el coronel Phillips a Howard, que estaba mirando el submarino.

"Hablando modestamente, soy el mejor ingeniero mecánico de este país", les dijo Howard. Evelyn se aclaró la garganta, haciendo que su atención se dirigiera hacia ella. "Uno de los mejores", corrigió él y Evelyn le envió un guiño. "Pero no sé qué hay dentro de esta cosa ni cómo funciona. Ni siquiera estamos cerca de esta tecnología".

"¿Entonces quién lo está?", preguntó el senador.

"HYDRA", respondió inmediatamente el coronel Phillips. "Estoy seguro de que ha estado leyendo nuestros informes".

"Estoy en varios comités, Coronel", contestó el Senador con sorna.

"HYDRA es una división científica formada por Hitler, y está dirigida por Johhan Schmidt, pero las ambiciones de Schmidt son mucho mayores que las de Hitler", informó Evelyn al senador mientras el trío se acercaba a ellos.

"HYDRA es prácticamente una secta. Tienen a Schmidt como su esclavo, lo creen invencible", añadió el coronel Phillips.

"Entonces, ¿qué van a hacer al respecto?" Preguntó el senador.

"Hablé con el presidente esta mañana. A partir de hoy, el SSR será reasignado", les informó el coronel Phillips

"¿Coronel?" Preguntaron Peggy y Evelyn.

"Vamos a llevar la figura a HYDRA. Hagan sus maletas Agente Carter, Agente Parrish. Tú también, Stark. Volarás a Londres esta noche", dijo.

"Señor, si va a ir tras Schmidt, quiero entrar", le dijo Steve.

"Eres un experimento. Vas a ir a Alomogordo", respondió el coronel Phillips.

"El suero funcionó", intentó razonar Steve.

"Pedí un ejército y todo lo que obtuve fuiste tú. No eres suficiente", le dijo el coronel Phillips antes de marcharse. Evelyn tuvo que morderse la lengua para obligarse a no decir nada que hiciera que la echaran.

"Con el debido respeto al Coronel, creo que podemos estar perdiendo el punto", le dijo el Senador a Steve. "Te he visto en acción, Steve. Y lo que es más importante, el país lo ha visto. Papel." Un hombre se acercó con el papel pedido reciente. "El alistamiento en directo ha dado la vuelta a la manzana desde que tu foto llegó a los quioscos". El periódico decía "NAZIS EN NUEVA YORK. HOMBRE MISTERIOSO SALVA A UN NIÑO'. "No se coge a un soldado, a un simbólico como ese, y se le esconde en un laboratorio. Hijo, ¿sirves a tu país en el campo de batalla más importante de la guerra? "

"Señor, eso es todo lo que quiero", respondió Steve.

"Entonces, felicidades. Acabas de ser ascendido", se dieron la mano.

¿Pero ascendido a qué?