AGENT PARRISH-STEVE ROGERS [1]

CAPÍTULO 9

Evelyn le preguntó a Howard si podía pilotar el avión hacia la base de HYDRA. Él aceptó inmediatamente, sabiendo que Evelyn era buena para golpear a la gente y que sería capaz de cuidar bien de ella misma.

"El campamento de HYDRA está en Krausberg, escondido entre estas dos cadenas montañosas". Peggy señaló el mapa que tenía delante. "Es una fábrica de algún tipo".

"Deberíamos poder dejarlos a los dos justo en la puerta", les informó Howard desde el asiento del piloto.

"Solo acércanos lo más que puedas", le dijo Steve.

"Sabes, ustedes dos estarán en un montón de problemas cuando aterricen", le dijo Evelyn a Peggy y Howard.

"No sería la primera vez, Evie", dijo Howard.

"¿Y no lo harás?" Preguntó Peggy.

"A dónde vamos, si alguien nos grita, podemos dispararles", le dijo Steve.

"Indudablemente responderán", dijo Peggy.

"Bueno, esperemos que sea bueno para algo." Steve palmeó su escudo.

Evelyn se inclinó y colocó dos dedos sobre el escudo. A continuación, presionó en él al ver que se doblaba. "Puedo doblarlo literalmente con dos dedos, Steven", dijo Evelyn.

"No lo rompas todavía. Puede ser útil", lo volvió a doblar.

"Evie, cuando vuelvas, creo que tenemos que volver a salir a Lucerna para nuestra fondue nocturna mensual", dijo Howard.

"Claro, Howie," Evelyn puso los ojos en blanco. Se aseguró de que su funda contenía sus dos pistolas y tenía una escopeta atada a la espalda.

"Stark es el mejor piloto civil que he visto. Está lo suficientemente loco como para desafiar este espacio aéreo, tenemos suerte de tenerlo", le dijo Peggy a Steve.

"Entonces, ¿ustedes dos son...?" Steve miró a Evelyn e hizo un gesto a Howard: "¿Quieren...? ¿Fondue?" Evelyn levantó una ceja, sin tener idea de lo que estaba hablando.

Peggy cortó la incómoda tensión. "Este es su transpondedor. Actívelo cuando esté listo y la señal nos llevará directamente a ustedes dos." Peggy le dio a Evelyn el dispositivo.

"¿Estás seguro de que esto funciona?" Steve le preguntó a Howard.

"Ha sido probado más que tú, amigo", respondió Howard, haciendo que Evelyn se riera.

Entonces, de repente, el avión estaba siendo atacado. Se disparaban bombas a su alrededor, sacudiendo el avión. Steve y Evelyn se levantaron rápidamente y Steve se apresuró hacia la salida del avión. Evelyn se dirigió rápidamente hacia Howard y se agachó a su lado.

"En caso de que no vuelva", dijo.

"Lo harás", sonrió. "Pero mantente a salvo".

"Siempre lo hago." Evelyn lo besó en las mejillas y luego se dirigió hacia donde estaba Steve en la puerta del avión. La puerta ya estaba abierta y Steve estaba listo para saltar.

"Los vamos a llevar hasta el final", les dijo Peggy.

"¡Tan pronto como estemos despejados, dale la vuelta a esta cosa y lárgate de aquí!" Steve le ordenó.

"¡No puedes darme órdenes!" Dijo Peggy.

"¡Diablos que no puede! ¡Es un capitán!" Evelyn le sonrió a Peggy mientras Steve se colocaba las gafas y saltaba del avión. Evelyn también se puso las gafas protectoras y se aseguró de que su paracaídas estuviera puesto correctamente.

"Asegúrate de volver", dijo Peggy.

Evelyn se volvió para mirarla. "Te lo prometo", dijo, y luego se dirigió al borde del avión y saltó.