AGENT PARRISH-STEVE ROGERS [1]

CAPÍTULO 63

Evelyn y Steve llegaron a la base militar. Salieron del coche y se acercaron a la puerta, mirando a su alrededor mientras los recuerdos empezaban a inundarles. Los dos entraron en la base y miraron a su alrededor. Los recuerdos comenzaron a inundar el cerebro de Evelyn de cuando llegó allí por primera vez y cuando conoció a Steve.

"Hace mucho que no pienso en este lugar", dijo Steve mientras Evelyn caminaba con su teléfono en alto para rastrear cualquier cosa fuera de lo común.

"Yo sí. Todavía pienso en cómo era entonces", dijo Evelyn. Miró a su derecha y recordó cuando Peggy y ella entrenaban a los hombres. Evelyn sonrió ante el recuerdo y siguió caminando. "Esto es un callejón sin salida", dijo. "Cero firmas de calor, cero ondas, ni siquiera radio". Evelyn miró a su derecha y se fijó en un búnker que no había visto nunca.

"Eso no está bien", le dijo Evelyn a Steve mientras empezaba a caminar hacia él.

"Las normas del ejército prohíben almacenar municiones a menos de 500 metros del cuartel", le dijo Steve. "Este edificio está en el lugar equivocado". Se quitó el escudo y abrió la cerradura.

Evelyn abrió la puerta y bajó las escaleras hasta la habitación. Accionó un interruptor y todas las luces se encendieron. "No puede ser", Evelyn sonrió levemente mientras miraba alrededor de todos los escritorios.

"¿Qué es?" preguntó Steve.

"Esta fue la primera base de Shield", dijo ella, fijándose en el logotipo de la pared y en todos los muebles antiguos.

Entraron en la oficina de Ann y miraron a su alrededor. En la pared, había tres marcos de fotos. Una del coronel Phillips, otra de Peggy y otra de Howard. Steve las miró y se alejó. Evelyn se acercó a la foto de Howard y rompió el marco, luego sacó la foto y la dobló, guardándola en su bolsillo.

"Si ya estás trabajando en una oficina secreta", Steve llamó la atención de Evelyn mientras movía la estantería. Se acercó a él mientras se abría, revelando un ascensor. "¿Por qué necesitas ocultar el ascensor?"

Evelyn se acercó al teclado y sostuvo su teléfono sobre el mismo y observó cómo éste escaneaba la contraseña. Evelyn pulsó los números 8, 5, 3 y 9. El ascensor se abrió y entraron.

En cuanto Steve y Evelyn estuvieron dentro, las puertas se cerraron y los llevaron a otra planta. Cuando se abrió, estaban en una habitación oscura, así que Evelyn encendió una llama en la palma de su mano mientras entraban. Cuando entraron en el centro de la sala, todas las luces se encendieron.

"Este no puede ser el punto de datos. Esta tecnología es antigua", dijo Evelyn mientras miraba las pantallas de los ordenadores. Un enchufe USB le llamó la atención y lo conectó, sonriendo mientras se iluminaba. Todas las máquinas empezaron a iluminarse y a funcionar y una cámara situada en la parte superior de la pantalla se volvió hacia ellas.

¿I N I C I A R S I S T E M A?

apareció en la pantalla con una voz espeluznante de fondo. Evelyn se dirigió al teclado y escribió la respuesta. "S-I deletrea sí", dijo y pulsó enter. El ordenador empezó a encenderse. La pantalla que tenían delante se iluminó y apareció un rostro.

"Rogers, Steven, nacido en 1918", dijo el ordenador.

La cámara se dirigió entonces a Evelyn. "Parrish, Evelina Rose, nacida en 1918". Evelyn podía reconocer esa voz en cualquier lugar.

"Tiene que ser algún tipo de grabación", dijo Steve.

"No soy una grabación, capitán. Puede que no sea el hombre que era cuando me hicieron prisionero en 1945. Pero lo soy". Una foto de Zola apareció en una pantalla de ordenador más pequeña.

"Esto es imposible. Llevas años muerto", dijo Evelyn.

"Mira a tu alrededor, Aniquiladora. Nunca he estado más vivo", dijo Zola. "En 1972, recibí un diagnóstico terminal. La ciencia no pudo salvar mi cuerpo. Mi mente, sin embargo, sí que pudo salvarse, en 200.000 pies de bancos de datos. Usted está en mi cerebro".

Evelyn arrugó la cara, "Ew".

"¿Cómo has llegado hasta aquí?" preguntó Steve.

"Invitado".

"Fue la Operación Paperclip después de la Segunda Guerra Mundial", le dijo Evelyn a Steve. "Shield reclutó a científicos alemanes con valor estratégico".

"Pensaron que yo podría ayudar a su causa. También ayudé a la mía. Corta una cabeza, dos más ocuparán su lugar". Apareció una imagen del símbolo de Hydra, y entonces Zola duplicó su cara para que hubiera dos de él.

"Muéstrame", dijo Steve.

"Accediendo al archivo". Las pantallas del ordenador mostraron artículos de prensa y documentos de un montón de asesinatos y atentados. Había un breve vídeo de Schmidt y su banda. "Hydra se fundó con la creencia de que no se podía confiar a la humanidad su propia libertad. Lo que no nos dimos cuenta es que si tratas de tomar esa libertad, se resisten". Había un breve vídeo del Capitán América y los Comandos Aulladores luchando contra los hombres de Hydra. "La guerra nos enseñó mucho. La humanidad tenía que entregar su libertad voluntariamente.

"Después de la guerra, se fundó Shield y me reclutaron. La nueva Hydra creció. Un hermoso parásito dentro de Shield. Durante 70 años, Hydra ha estado alimentando secretamente la crisis, cosechando la guerra, y cuando la historia no cooperó, la historia fue cambiada". Hubo un video corto del Soldado de Invierno y Evelyn matando gente.

"Esto es imposible. Llevas años muerto", dijo Evelyn.

"¿Cómo llegaste aquí?" Preguntó Steve.

"Invitado".

"Eso es imposible. Shield te habría detenido", dijo Steve.

"Los accidentes ocurrirán". Apareció un artículo de periódico sobre la muerte de Howard y María Stark, también de Fury. Un gran dolor creció de repente en la cabeza de Evelyn, que pronto estuvo en el suelo y agarrada a ella. En el cerebro destellaron imágenes, todas de ella matando gente. A algunos sólo les disparaba, a otros los quemaba hasta la muerte o les daba una paliza. En otras, Evelyn los asfixiaba con sus poderes de viento, o les congelaba las entrañas.

"Hydra ha creado un mundo tan caótico que la humanidad está finalmente dispuesta a sacrificar su libertad para conseguir su seguridad". Steve se aferró a Evelyn mientras ésta se estremecía. "Una vez que se complete el proceso de purificación, surgirá el nuevo orden mundial de Hydra. Hemos ganado, Capitán. Su muerte equivale a lo mismo que su vida. Una suma cero". Steve se puso de pie y golpeó la pantalla del ordenador, sólo para que su rostro pasara a otro. La respiración de Evelyn empezó a ralentizarse y el dolor de su cabeza disminuyó.

"Van a utilizar los Helicarriers para matar a millones de personas", murmuró Evelyn para sí misma.

"Tienes razón, Aniquiladora. Siempre estuviste en sintonía con lo que hacía Hydra", dijo Zola.

"¿Qué hay en esta unidad?" Steve preguntó

"El Proyecto Insight requiere una visión. Así que escribí un algoritmo".

"¿De qué tipo? ¿Qué hace?" preguntó Steve mientras Evelyn se ponía de pie, limpiando las lágrimas de su rostro.

"La respuesta a tus preguntas es fascinante. Por desgracia, estarás demasiado muerto para oírla". Las puertas detrás de ellos comenzaron a cerrarse, por lo que Steve rápidamente lanzó su escudo contra ella, sólo para que rebotara en la puerta.

El móvil de Evelyn empezó a sonar, así que lo comprobó. "Ah, tenemos un bogey, Steve. Balística de corto alcance. 30 segundos como máximo".

"¿Quién lo disparó?" Preguntó.

"Shield".

"Me temo que he estado dando largas, Capitán". Evelyn sacó el USB del puerto y corrió hacia Steve. "Admítelo. Es mejor así". Steve corrió hacia un respiradero en el suelo y lo abrió. "Estamos, todos nosotros, fuera de tiempo".

Evelyn saltó a la rejilla de ventilación justo cuando la bomba impactó. Steve se colocó sobre ella con su escudo protegiéndolos, mientras Evelyn levantaba las manos para intentar cerrar la parte de arriba con tierra, pero sólo se rompió. Los escombros empezaron a caer sobre ellos y Evelyn se apagó como una luz.