El ᥒιñ𑄉 de l𑄉𝘀ׅׄ e𝕥erᥒ𑄉𝘀ׅׄ [Drarry]

Capítulo 8

Capítulo 8: Primeros días.

La mañana recibió a Harry con oscuridad, sabía que eran las cinco y media de la mañana porque a esa hora estaba acostumbrado a levantarse en casa por lo que no se sorprendió.

Lo extraño fue sentirse restringido, por lo que con la vista un poco nublada buscó la fuente de su aparente falta de movimiento y encontró una cabellera rubia a la altura de su nuca, seguido de ello se percató de los brazos y piernas que se unían a las suyas.

Harry sonrió un poco y con cuidado fue sacando cada parte de él, no tomó mucho por lo que pronto estuvo libre.

El niño rubio sólo hizo un ruido de descontento antes de acomodarse para seguir durmiendo. El gesto genero la risa suave de Harry.

–"Veo que despertaste"–el siseante sonido llamó a Harry desde la cama de Draco.

–"Lux, no te vi desde que bajamos del tren, temía que no me encontrarás"– dijo Harry acercándose a su amigo serpiente.

–"Tonta cría, yo siempre sé dónde estás, además, estuve con la gran serpiente todo el tiempo, sintió tu presencia al llegar así que le conté sobre ti"–dijo el reptil trepando por el brazo de su niño disfrutando del calor humano.

Gellert se quedó quieto un momento mientras procesaba la información. El basilisco, se había olvidado de él, pero era obvio que despertaría al sentir la magia de la familia Slytherin en su cuerpo. El nuevo heredero había llegado.

–"Deberé visitarlo en algún momento"–dijo Harry acariciando las escamas negras de Lux.

–"Hazlo y llévale de comer, está hambriento"–dijo el macho disfrutando de las atenciones de su humano.

Gellert lo consideró y temió que debería pedirle a su padre la ubicación de la cámara lo antes posible.

–"Bien, por ahora debemos prepararnos para clases"–dijo el niño soltando a Lux en la cama nuevamente–"debo bañarme, si mi amigo despierta, por favor no te acerques hasta que yo salga"

La serpiente se limitó a asentir para enrollarse en sí mismo. No le interesaban los humanos además del suyo.

El niño sonrió antes de entrar a su baño para darse una ducha y poder estar listo para el día.

Como todas las mañanas desde el inicio de su entrenamiento, Harry dejó que su magia saliera en pequeñas porciones mientras se bañaba. El agua se movía en bonitas formas mientras la magia la tocaba, aunque era divertido de ver, el niño no podía perder la concentración, un error podía costarle todo.

Su magia parecía más curiosa con su entorno y cómo no hacerlo cuando vibraba con la magia antigua. No era como la sintonía de estar en casa, donde todo era familiar.

El control se le escaba mientras su magia intentaba interactuar con la magia de las paredes, tensó sus músculos recordando sus ejercicios, no podía perder el control o su papá vendría por él.

Respiro, una y otra vez, una y otra vez, todas las veces necesarias hasta que su magia se volvió a esconder dentro de él.

El niño terminó recargando su cuerpo en la fría pared jadeando por el esfuerzo, era apenas su primer día y estaba luchando por contenerse, debía ver a su abuelito pronto.

El pequeño terminó su baño rápidamente, no podía ver a su abuelo hasta que terminaran las clases pero aún tenía una imagen que mostrar, no sólo era su primer día en el colegio, era su primer día como Slytherin y los ojos estarían sobre él.

Al salir del baño, Harry vio que Draco seguía dormido, al igual que Lux.

En silencio, el niño se arregló, vistió su túnica, arregló su cabello y se puso sus zapatos. Así vestía como el perfecto caballero.