𝑻𝒖, 𝒎𝒊 𝒂𝒍𝒎𝒂.

𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑡𝑟𝑒𝑠.

Wen KeXing se percató de su expresión y relamió los labios. Entonces Zhou cerró la puerta detrás de él.

-No te hicieron ningún daño, ¿o si? -preguntó Zhou Zishu de repente, dejó de mirar a sus hermanos para interesarse en su respuesta.

Wen KeXing pestañeo varias veces, incapaz de creer que le estaba hablando a él.

-¿Te hicieron algo? -insistió más ansioso por saber que preguntarle a sus hermanos que es lo que hacían en la casa sin avisarle.

"El hacer algo" era más un chiste, pero las ocurrencias de Zhou Zishu no son comúnmente escuchadas. Los únicos que entendían, eran sus hermanos que conocían que su humor no es muy bueno como para reírse.

No pudo reprimir una sonrisa.

-No Ah Xu, ellos vinieron a verte.

-¡Zhou-Ge, estamos aquí! -exclamó repentinamente Wu Xi.

-¿Qué hacen aquí? -ahora se dirigió a ellos con un extraño cambio de voz. Sus hermanos sentían que estaban en problemas.

-Queremos verte, hace tiempo que no sabemos mucho de ti -explicó en su lugar Bei Yuan, más tranquilo.

-¿Será porque estan consiguiendo trabajo fuera de la ciudad?

-¡Sí! -sonrió Wu Xi-. Así qué también estamos aquí porque tenemos una buena noticia.

-¿Han encontrado un empleo? -su voz era muy seria.

Era increíble como Zhou zishu no le gustaba hablar con rodeos.

-¿No estás contento Zhou-Ge? -Wu Xi frunció el ceño.

Wu Xi era más razonable que Bei Yuan en algunas ocasiones, la verdad es que los dos eran muy idénticos. Pero al ver a Wen KeXing, Wu Xi se comportó indiferente, sentía que ese chico no debería involucrarse en la pandilla, podría causar algunos problemas sin querer, era solo un niño de casa.

-¿Qué dices? -ahora habló con un acento cálido-, eso no me molesta, sólo me deja tranquilo, era lo mejor para ambos, ¿no es cierto?

Bei Yuan asintió. Wu Xi se quedó callado, con algo de duda.

Por su lado, Wen KeXing sentía muy bien la conducta incómoda entre los hermanos. Estar ahí era el problema de que no se pudieran comunicar cómodamente así que no dudo ningún segundo cuando después ofreció irse.

-No, no -Zhou zishu se apresuró a decir. Esa hermosa sonrisa volvió a aparecer-.No necesitas irte.

Wen KeXing no cuestionó nada.

-Zhou-Ge, ¿has estado bien? -cuestionó preocupado Bei Yuan.

Zhou apartó la mirada unos momentos para pensar en la respuesta; le costaba creer qué podía decir que si al ver a Wen KeXing a lado suyo.

Zhou Zishu creía que no podía compaginar con sujetos como Wen KeXing, eso estaba por muy encima de su imaginación. Wen KeXing, él siempre parece despreocupado. Sin embargo él es fuerte, pero sea por dentro es suave, parece estar feliz sin suerte, alguien que aunque no lo conozcas bien, todavía te puede parecer blando de corazón.

Una de las pocas cosas que Zhou Zishu tenía en claro, es que le gustaba esto tal y como está. Solo con pocos días en que ha estado con él, eran la suficiente no tener duda porque aunque sea extraño acostumbrarte a alguien más, no era malo.

Además tener la compañía de alguien como Wen KeXing lo alegraba mucho.

-Sí -dijo Zhou Zishu entre dientes. Había un poco de timidez, pero no existía tapujos.