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Una larga semana...

Y no solo para Mew, quien no había parado de tratar de disculparse con el omega, también lo había sido para Gulf, no es que no pudiera cuidar de Ohm, simplemente se sentía solo a pesar de que sabía que él bebe estaba con él.

Había sido un largo día, y más por tratar de esconderse de Mew, lo había logrado pero aun así no se sentía bien al estar escabulléndose solo para escuchar sus tontas excusas, suspiro mientras seguía con su labor de acomodar la ropa, la dejaba bien doblada en su cama, Ohm solo se la pasaba mirando.

Ohm de inmediato noto que el alfa no estaba, y se sentía triste por eso, se había acostumbrado a verlo, y más cuando dormía, casi siempre Mew se quedaba cantándole una canción de cuna para que pudiera dormir, ahora lo hacía Gulfi, pero... extrañaba al alfa, él bebe miro a peluche para después abrazarlo.

Gulf suspiro, sabía que Ohm no estaba feliz, toda la semana se la había pasado desanimado, y no lo culpaba, él también lo estaba, era cierto que Gulf estaba molesto porque el alfa no había confiado para nada en él y había sido un comportamiento demasiado infantil el ir a espiarlo, pero aun así la falta de Mew en aquel departamento era mucho.

- Ohm -él bebe no lo miraba solo estaba concentrado en seguir abrazando al peluche, Gulf se sentó en la cama mirándolo-. ¿Quieres salir a dar un paseo?

Él bebe lo miro pero por los ojos de Ohm, Gulf pudo ver que no tenía ganas de hacerlo, apenas iban a ser las seis de la tarde, para Gulf los días pasaban demasiado lento, y para Ohm aún más.

- Gulfi -balbuceo él bebe.

- ¿Qué ocurre pequeño?

El omega miro como él bebe acercaba otro de los peluches de kumamon hacía él y los ponía juntos.

- Gulfi -señalo al peluche que pertenecía a él-, Mew -señalo al peluche que pertenecía a Gulf-, Gulfi... Mewi...

Gulf sentía un nudo en su garganta, no sabía la razón de porque quería llorar en esos momentos, pero es que el pequeño Ohm lo había dicho con tanto anhelo que lo quería hacer llorar, suspiro y le acaricio su pequeña cabeza, él bebe disfrutaba de las caricias mientras se dedicaba a abrazar a ambos peluches, los cuales aún no separaba.

- Veo que no soy el único que lo extraña... -menciono el omega mirando con una sonrisa triste a Ohm.

El omega extrañaba al alfa, quería verlo por el departamento, quería verlo jugando con Ohm, quería ver como hacía sonreír a Ohm, y ¡vaya! Quería tenerlo allí para que lo abrazará, ¡quería a ese alfa allí!

- Te odio un poco Mew -susurro mientras apartaba su mano de la cabeza del bebe-, ¿Quién lo diría? Te he tomado cariño... y Ohm también lo hizo.

Ohm seguía abrazando los peluches de kumamon, de cierta forma le gustaba estar así, podía sentir que aún Gulf y Mew estaban en el departamento juntos.

- ¿Sabes, Ohm? Mew ha estado buscándonos por la escuela, inclusive viene al departamento, no ha parado de pedirme disculpas, y no hago nada, quiero estar molesto con él por lo que sucedido, no debió de actuar tan impulsivo e ir a espiarme... -Ohm lo miro-, pero no puedo, cada que viene quiero abrir la puerta, cuando escucho que nos está buscando quiero ir y decirle en dónde estamos.

También Ohm quería eso.

- ¿Crees qué ese alfa tonto merece otra oportunidad? 

Ohm tomo al peluche que pertenecía a Gulf y se lo entrego al omega.

- Mew... -dijo él bebe y Gulf miro al peluche para luego sonreír.

- Tomaré eso como un 'sí'

Ohm sonrió.

Mew estaba recostado bocabajo en el sofá de la estancia del departamento de Off, se sentía muy devastado, se había quedado allí debido a que quería poder interceptar a Gulf para poder hablar con él y seguir disculpándose.

Off entro a la estancia y soltó un suspiro, estaba cansado de mirar a su amigo todo desanimado, Mew apenas y podía dormir, de vez en cuando lograba despertarlo debido a que podía escuchar que hasta en sus sueños le pedía disculpas al omega.

- Mew -Off movió su hombro para ver si estaba despierto.

- Déjame Off... quiero morirme -Off rodó los ojos, ¿podría ser más dramático?

- Mew, ¡no es para tanto!

El mencionado se acomodó en el sofá y miro de mala gana a Off.

- ¡Es para mucho! Mi omega me lanzo fuera de su departamento, no puedo ver a Ohm, los extraño a ambos y para colmo estoy viviendo contigo porque no me queda otra opción.

Y Mew volvió a bajar la mirada y acomodarse de nuevo en el sofá, que no era tan cómodo como los que estaban en la estancia del departamento de Gulf.

- ¿Has pensado en hacer algo más? -pregunto Off-. No puedes quedarte toda la vida así.

- ¡Claro que puedo! Y lo planeo hacer hasta que Gulf acepte mis disculpas.

Off soltó un resoplido.

- ¿Sabes Mew? Deberías de ponerte en su lugar, ¿acaso a ti te hubiera gustado que te espiarán?

- ¡Por supuesto que no! Creo hasta hubiera hecho lo mismo que Gulf.

- ¡Exacto! Llevan una semana así, no creo que esto dure más...

Mew se incorporó sentándose en el sofá.

Extrañaba demasiado a esos dos, extrañaba al omega que casi siempre estaba corrigiendo lo que él hacía, extrañaba que Ohm le lanzará esos peluches de kumamon, ¡maldición! Extrañaba todo, pero claro era su culpa, no debió haber realizado su 'grandioso plan'.

- ¿Crees que me perdone? -Mew se sentía devastado.

- No lo creo -le regalo una mala mirada a su amigo-, ¿qué? Es la verdad, aunque... Gulfi no es rencoroso, supongo que te perdonará, pero no creo que te deje volver a su departamento.

Eso no hacía que Mew se sintiera mejor.

- Estoy perdido -dijo Mew bajando la mirada.

La adopción es (no) una opción 1. FinalizadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora