Gulf no podía ni ver al alfa a los ojos, estaba avergonzado, ¡y todo por culpa de su celo! Ahora mismo no quería ni siquiera que Mew se le acercará, Gulf recordaba todo lo que había pasado, además de que Mew le decía tantas cosas tiernas mientras le acariciaba su espalda y le daba demasiados mimos, ¡aún peor para él!
- Gulfi -y ahí estaba Mew entrando a su habitación, Gulf tenía que recordar que debía cerrar la puerta, pero se le olvidaba rápido-. ¿Qué quieres de desayunar, mí pequeño omega?
- N-nada -Gulf seguí acostado en su cama dándole la espalda a la puerta, no quería ver al alfa.
- ¡No digas eso! Tienes que desayunar omega, no quiero que te quedes sin el alimento más importante del día.
Mew se acercó al omega y al instante se sentó en la orilla de la cama para poder estar cerca de Gulf, en cuanto el pálido como sintió le comenzaban a dar caricias en la cabeza, la aparto de inmediato, aún se ponía muy nervioso, no le gustaba ser así.
- ¿Te sientes bien, Gulfi?
¡No se sintió bien! Para nada lo hacía, se sentía muy avergonzado, Mew había visto como se comportaba cuando estaba en celo y le avergonzaba que su lobo fuera todo lo contrario a él, eso era lo que lo molestaba, pero al parecer al alfa le había encantado aquel comportamiento , incluso pensaba que amaba a su lobo.
- Prefiero estar solo, Mew...
- No te dejaré solo -Mew se acomodó recargando su espalda en el respaldo de la cama-, estaré aquí contigo.
Gulf suspiro, sabía que sería muy difícil quitarse al alfa de encima, pero bueno de alguna forma le gustaba que lo acompañará.
- Ohm te extraña, Gulfi -Mew miraba la cabellera de su omega-, quiere que vayas a desayunar también.
- Mew -el omega se giró para poder mirar al alfa-, quiero estar solo.
El alfa sabía por qué Gulf estaba de esa manera, sabía que Gulf estaba avergonzado por el simple hecho de hecho comportado de aquella manera en su celo, a Mew no le había molestado para nada, había sido una linda forma de ver cómo era Gulf de tierno, pero cuando el celo de Gulf termino, vio como el omega se había sonrojado al verlo sonreír cada que se miraban a los ojos.
- No, ven hay que desayunar, ¡te preparare lo que quieras! -Mew le regalo una dulce sonrisa.
- Pero no quiero nada...
- Por favor Gulfi -Mew canturreo para después mirar a su omega a los ojos, de inmediato Gulf aparto la mirada-, prometo no decirle a nadie sobre lo que paso en tu celo.
- No me preocupa eso -Gulf se acomodó para sentarse en la cama y miro al alfa-, solo... ¡maldición! Siento que no me debiste ver de esa forma.
- Gulfi... no me molesto para nada verte de esa forma, además fue muy lindo verte así, sé que la mayor parte fue tu lobo, y además puede que pienses que me gusta más tu lobo, y que tu deberías comportarte como todos los omegas lo hacen... pero en eso no me interesa, eres lo suficientemente dulce para mí.
Gulf sentí sus mejillas arder.
- ¿Y-ya le diste de comer a Ohm? -pregunto aunque bajaba la mirada para que Mew no mirara su notorio sonrojo.
- Aún no, está esperando en la estancia.
- ¡N-no le hagas eso! -Gulf frunció su ceño y miro al alfa-. ¡A-alfa tonto! Alimenta primero a Ohm, los demás no importan.
- Claro que importan, tú me importas....
- ¡C-cállate!
Bueno Gulf había regresado a la normalidad, eso a Mew le encantaba, a pesar de que había sido muy grato para él haber acompañado a Gulf en su celo, definitivamente prefería al Gulf que le reclama por todo y que se la pasa sonriendo por cada travesura que le hace Ohm.
Sí, definitivamente no querría un Gulf tan dulce, le gusta Gulf tal y como es.
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La adopción es (no) una opción 1. Finalizado
AventuraGulf el omega más estudioso solo quería responder aquella pregunta que se le vino a la mente en cuanto vio aquello que lo dejo mas que sorprendido. ¿Quién deja a un bebe frente a la puerta del departamento de un chico de veinte años? ❤ adaptación ❤t...