La adopción es (no) una opción 1. Finalizado

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- Gulfi Gulfi -Gulf despertó de golpe al escuchar aquel apodo que tanto le gustaba a su vecino decirle, no había podido dormir en toda la noche, el pequeño se había pasado la mayoría de sus horas de sueño sollozando a más no poder para pedirle que le fue a ver o que simplemente le diera algo de alimento-. Te ves terrible.

- ¿Mew? -Gulf soltó un bostezo, en verdad se fueron sumamente exhausto-, ¿Qué día es hoy? -pregunto, por alguna razón sintió que ya había pasado más de dos semanas.

- Sábado -¿en serio? ¿Sábado? ¡Ni siquiera una semana y ya sintió que podía morirse de solo cuidar de Ohm! -, tienes suerte de que me haya quedado aquí el viernes.

¿Suerte?

Claramente no la había tenido, el bebé lloraba como un poseso y Mew roncaba como si fuera lo único aceptable para dejar en claro que no iba a poder dormir esa noche, ¿Qué podía ser peor? ¡Él dormía como una piedra! Mew en verdad parecía que ni siquiera un balde de agua fría le despertaría, Gulf asegura que si hubiera una guerra, Mew no despertaría en ni un solo momento.

- ¿Por qué no te despertaste para darle de comer al pequeño?

- Porque lo hice cuando estabas más dormido y comenzó a llorar más fuerte y no quería que fuera yo quien le dé de comer, parece que te tomo mucho cariño Gulf -y eso que ni siquiera lo había cuidado por tanto tiempo. Apenas pasado veinticuatro horas de la llegada de Ohm a su vida y estaba sintiendo que ya era un desastre.

El omega soltó un resoplido, estaba totalmente rendido ante toda esta situación.

Sentía como sus parpados se comenzaban a cerrar de nuevo, Mew se sentó al lado del omega haciendo que tanto sus rodillas como sus hombros se juntasen, estaba demasiado cerca para el gusto de Gulf, al menos eso había ayudado a Gulf a despabilar el sueño casi por completo.

- ¿Por qué estás tan cerca? -la voz aún adormilada del omega llego hasta Gulf haciendo que sus labios se curvaran en una sonrisa.

- Porque me gusta estar cerca de mi pareja -Gulf quería rodar los ojos, en verdad lo quiere hacer, pero está agotado por el momento-, ¿no puedo hacerlo?

- Iré a ver a Ohm -el omega se iba a levantar, pero Mew se lo impidió tomándolo de la mano.

- Tranquilo, iré yo, debes descansar, tienes que recuperar energías, duerme un poco.

Mew se incorporó levantándose de su lugar para caminar e ir directo hacía la habitación de Gulf, en dónde Ohm dormía, cuando entro allí vio al pequeño bebé jugando con una almohada, mordiéndola, sintiendo su sabor a tela, extraño pero nada fuera de lo normal , Mew le sonrió al pequeño y se acercó a él.

- Hola pequeñín... -Mew tomo al bebé en sus brazos para cargarlo-, deja de morder eso, sé que te da cosquillas pero no debes hacerlo.

El bebé le contesto con diferentes silabas al azar y claro que Mew, no le entendía ni una sola de las palabras que Ohm intentaba decirle, pero le agradaba escuchar esos hermosos sonidos.

- Eres muy lindo, ¿sabes? Te pareces mucho a Gulfi.

Gulf se había levantado de su lugar no podía solamente quedarse como un holgazán acostado, tiene que ponerse a trabajar, Ohm podría consumir parte de su energía pero eso no haría que se rindiese fácilmente, sin más, se dirigió hacía su habitación, quería ver que tanto estaba haciendo Mew, porque ya se había tardado en ver a ese bebé que ya le había dado dolor de cabeza en solo una noche.

Cuando estuvo en el marco de la puerta tono, encontró a aquel chico dándole la espalda y con el bebé en sus brazos mientras se dedicaba a hablarle con un dulce de voz.

- Sí pequeño, tienes esos hermosos ojos gatunos, también tienes esa hermosa piel blanca, aunque no sé también te pareces mucho a alguien más -por más que Mew miraba a Ohm, no sabía si estaba en lo correcto o no, pero tenía un parecido a una persona en específico de la cual no recordaba su nombre en ese momento.

Gulf veía como Mew se movía levemente de lado a lado para hacer que el bebé por fin cerrase sus ojos para empezar a dormir. El omega no pudo evitar sonreír al ver aquella escena, se veía que Mew se encontró feliz con aquel pequeño en sus brazos, pero también sabe que era como si estaba acostumbrándose a él y eso no podía pasar.

- ¿Qué planeas hacer con esta dulzura, Gulf? -la pregunta hizo que el omega dejase de mirarlos.

- Planeaba darlo en adopción -Mew se giró sobre sus talones para mirarlo a los ojos.

- ¿No planeas quedarte con él? -Gulf apretó los labios al escuchar eso.

- No puedo hacerlo -respondió-, si lo conservo no creo poder cuidarlo como se debe y creo que ese pequeño merece una familia que sea responsable y lo quiera, él merece una buena familia.

Mew se quedó allí parado viendo al omega, a pesar de que dentro de él todo decía que debía estar de acuerdo con Gulf, sabe que el omega quiere a un dulce niño con una familia la cual pudiera cuidarlo siempre y quererlo cada día, para así verlo feliz, Mew no se sintió complacido con esa decisión, si fue por él lo conservaría y así poder tener que cuidarlo junto a su omega, verlo crecer, ayudar a caminar, todo, Mew quería estar en toda la vida de aquel pequeño y más si con eso podía darse el lujo de estar al lado de Gulf.

- Está bien -menciono el alfa rendido, no es como si pudiese obligar a Gulf a que deje a Ohm quedarse y olvidar la adopción-, entonces te ayudaré a encontrar una familia, ¿te parece?

- ¿En serio harías eso por mí?

- Haría cualquier cosa por ti, mi querido omega.

- ¡Gracias, MewMew ! -Gulf se tapó la boca al terminar de escuchar sus palabras, se le había salido un apodo para el alfa.

El alfa sonrío al escuchar eso, su lobo se había regocijado al escuchar eso, parecía que su omega lo estaba aceptando y eso era un gran motivo para inclusive bailar de la felicidad.

- No hay de que Gulfi Gulfi .

El bebé se dedicaba a mirar con curiosidad a cada uno de ellos, no entendía lo que sucedía, solamente sabía que aquel que lo estaba cargando era quien siempre hacía sonrojar al otro chico, y eso de algún modo le agradaba.