Nᴀʀʀᴀᴅᴏʀ— Bien, tienes algo con entrar sin permiso a mi oficina.— Comento al verlo sentado en uno de los sillones que había dentro.
— Necesitamos hablar, noe.— La miro moverse por la oficina mientras buscaba algunos papeles en los archiveros.
—Yo creo que no, pero te escucho.— Sonrió tomando asiento en su escritorio. Él se levanto y se sentó frente a ella.
— Quiero que vayamos a tokio, solo nosotros dos.—Propuso ganándose una mirada confusa de la morocha.
—¿Por qué haríamos eso?
Él soltó un suspiro pesado antes de seguir hablando.— Quiero arreglar las cosas, y estando aquí no voy a poder o no me siento capaz de hacerlo.
Solto un risita.—¿Y qué te hace creer que lo quiero arreglar? Yo estoy bien aquí, han. Lo arruinaste y ya, no vengas a buscar otra oportunidad.
—Tus nervios al tenerme cerca me hacen creer que aun tengo una oportunidad, como me miras, como tiemblas con mi cercanía, todas tus acciones me hacen creer que aun tengo una oportunidad contigo y no quiero dejarla ir.
—Han, no, enserio.—Intento frenarlo.—No imagines cosas donde no las hay, yo no quiero nada.
— ¿No? ¿enserio? —Apoyo sus manos sobre el escritorio para acercarse al rostro de medusa.— Mirame, chapi. Ni siquiera puedes mantenerme la mirada por más de cinco minutos, porque te pones nerviosa, y esto te pasa desde que nos conocimos.
—Han, basta.
—Bien, mirame a los ojos y dime que no quieres nada conmigo, que ya no sientes nada por mi.— Sentencio.— Dímelo y esta misma noche me voy.
Su mirada estaba baja mirando sus propias manos, se sentía tan vulnerable ante la mirada de él.
—¿Te encanta, no? Te encanta saber que tienes un poder sobre mi que ningún otro chico tiene.—Comento mirándolo.
Negó.— Me encanta saber que aun me quieres a pesar de que me comporte como un cobarde, me encanta saber que no te perdi al ser tan idiota.
—Te odio, quiero que lo sepas. Enserio lo hago, odio como me haces sentir.— Se sincero.
—Eres una mentirosa, me quieres como nunca has querido a nadie.— Aseguro con una sonrisa.— Incluso, me quieres más de lo que has llegado a querer a brian.
—Maybe.
—Entonces, dime, tú y yo, tokio, juntos. ¿Qué dices?— Volvió a preguntar.— No tienes razones para decirme que no. Ni siquiera esta el italiano.
—No metas a alessandro en esto, él no tiene nada que ver con esto.— Lo defendió ganándose una mala mirada por parte de han.
Alessandro, hace algunos días se había vuelto a hong kong con Wang para ver algunos negocios que tenían en ese lugar. Y ellos no iban separados a casi ningún lado, eran como ella y jade.
—Contesta la pregunta, chapi.
—¿Me dejarías pensarlo? Necesito hablarlo con giovanni antes de tomar decisiones, no puedo tomar decisiones sin consultarlo con él.
Él asintió con una sonrisa.— Bien, tienes todo el día para pensarlo, pero en la noche quiero la respuesta.
—Bien, en la noche tendrás la respuesta.
—La esperare.— Dejo un beso en la comisura de sus labios antes de irse de la oficina dejándola sola.
—Maldición, han lue.— Se susurro a si misma soltando un suspiro.— Gio, necesito que vengas a mi oficina.— Le mando un audio al instante.
—Lo vi salir de aquí, quiero saberlo todo.—Entro el ruso con una sonrisa picara en el rostro.
—No vas a poder creerlo...
[NOTA ANTIGUA]
IGNORARHey! Tengan bonito día❤
Pregunta: Ustedes irían a tokio o evitarian hacer eso?
Teniendo en cuenta la circunstancia en la que estan ellos dos👀👀
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SHE'S THE BOSS • Han Lue ©
أدب الهواةsʜᴇ's ᴛʜᴇ ʙᴏss | ᴾʳᵉⁿᵈᵉ ᵘⁿᵃ ᵛᵉˡᵃ, ʸᵒ ˢᵒʸ ᵗᵘ ˢᵃⁿᵗᵃ Hɪsᴛᴏʀɪᴀ sɪɴ ᴇᴅɪᴛᴀʀ Bᴏʀʀᴀᴅᴏʀ ᶠᵃⁿᶠⁱᶜ - ᴴᵃⁿ ˡᵘᵉ ᶠᵃˢᵗ ᵃⁿᵈ ᶠᵘʳⁱᵒᵘˢ Pᴀʀᴛᴇ 1: ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵃ Pᴀʀᴛᴇ 2: ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵃ ᴸᵃˢ ᵈᵒˢ ᵉⁿ ᵉˢᵗᵉ ˡⁱᵇʳᵒ ♡