En el momento en que Bellatrix reciba una llamada de un viejo amigo que necesita un favor, se lanzará a la mayor persecución de su vida.
Poco sabe nuestra pequeña roja que todo lo que hace por ellos la lleva a uno.
El que la convertirá en la mejor...
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Me acurruqué en el cuerpo de Finn mientras nos acostábamos en el sofá. Kol dijo que iba a hablar y practicar un poco con la bruja.
Elijah y Nik están hablando con Katerina. De lo que sé que debería ser parte, pero elegí no serlo. Estaba cansada y hambrienta.
Matt y Jeremy estaban jugando en la televisión. Caroline estaba sentada en la silla en la que normalmente se sentaba Nik leyendo una revista de moda y Rebekah estaba con Derek.
Esos dos son como perros. Están prácticamente el uno en el otro las 24 horas del día, los 7 días de la semana, lo juro.
Sentí a Finn acurrucarse más en mi costado y ronronear mientras pasaba mi dedo por su cabello.
Sus ojos se cerraron y sus brazos me envolvieron protectoramente. Mi cuerpo se relajó y estaba completamente a gusto.
"Bueno, estaba pensando que deberíamos ir de compras." Rebekah dijo mientras entraba con Derek pegado a sus caderas.
Arqueé una ceja en su dirección y se muerde el labio. "¿No tenemos como cuatro armarios llenos de ropa, Bekah?"
"¡No para ti! Por el be-" se detuvo y todos se quedaron paralizados volviéndose para mirarla y yo levanto la ceja en un estado nervioso.
"¿Para los chicos? Porque no tienen ningún gusto en la ropa". Dije y escuché un grito ahogado desde el interior de la casa.
"¡Cómo te atreves! Te haré saber que tengo una moda fantástica". Kol dijo pavoneándose antes de acercarse al sofá con las manos en las caderas.
Me reí y sonreí. "Porque eres totalmente la versión masculina de Alice." Dije levantando mis manos.
Pone los ojos en blanco antes de sacar descaradamente las caderas. "Oh, lo sabes cariño." Dijo haciéndome arrojarle una almohada.
"¡Mierda! Sé con certeza que tengo un mejor sentido de la moda." Saco mi lengua haciéndolo reír.
Elijah y Nik entran con Kitty Kat y ella tiene una mirada nerviosa en su rostro.
"¿Qué ocurre?" Pregunté y traté de moverme, pero Finn era como una piedra. Toqué su brazo y él era un peso muerto.
"Finn, vamos cariño. Déjame levantarme". Hablé y él gruñó, pero déjeme levantarme.
Se quedó cerca y niego con la cabeza. Está de mal humor.
"Ahora dime cuál es el problema", un teléfono empezó a sonar haciéndome suspirar de molestia y moverme antes de indicarle a Elijah que lo conteste.
Cuando se va, Nik se acerca y me balancea haciéndome reír antes de que me dé un delicado beso en los labios.
Sonrío y lo abrazo. Entonces mis ojos se conectaron con los de Jeremy y sentí un tirón en su mirada anhelante. Confundida, retrocedo y le doy a Nik una sonrisa brillante.
