La belleza es la confianza, como te presentas a ti mismo, es al interactuar con las personas, aquello que te hace diferente, especial y único. Y en este mundo del modelaje lograr lo perfecto es lo esencial para los ojos.
Para mí modelar es arte y ah...
Una determinación definitiva sobre un asunto, es la firmeza y seguridad que tendré para llevar mi vida de ahora en adelante, siempre es así y lo seguirá siendo.
Ya no es suficiente lanzar una moneda al aire, porque estoy en las puertas de la iglesia que anuncian el cielo y la paz, pero me siento tan atada, enjaulada sin libertad, no como cuando estaba en las orillas del infierno, con el mejor de mis DEMONIOS. Llegó la hora, es el momento de ver por mí. De elegir ser feliz, o seguir fingiendo que la felicidad es la vida que creé en un mundo lleno de confusión.
***
Me mire al espejo, todos podrían decir que lucía radiante, como toda novia esperando el momento de dar el SÍ en el altar. Mi vestido es de corte sirena, con una abertura a la cintura, tirantes, y encaje en la parte de arriba, espalda descubierta, por lo cual opte hacerme un chongo sencillo; mi maquillaje sofisticado y elegante me hacía verme espectacular; pero nada de eso era capaz de curar la tristeza de mi alma.
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Quien en verdad me conocía sabía que no era una novia Feliz, que estuviera esperando su gran día en su "espectacular boda". 11 de Noviembre, mi cumpleaños, la fecha que me marcó de por vida, también fue la elección de mi prometido para que comenzáramos una etapa dónde estaríamos juntos ahora si por siempre.
Las lágrimas se asomaban por mis mejillas, y no dejaban de fluir desde hace dos días, era imposible poder continuar después de ese momento. No estaba segura de nada, simplemente sabía que mi vida no era la misma desde que tomé este camino, desde que sigo esta dirección.
Flashback on.
Su mirada era la más tierna que podría observar en mi vida, sus ojos tenían un brillo especial, uno que solo había cuando me miraba, desde que lo ví por primera vez, tenía esa magia en su mirada. Y hasta hoy me doy cuenta de lo que siempre fue esa chispa, no era simplemente deseo, no siempre hubo algo más.
Él me había confesado que las almas se reconocen antes de que sus cuerpos se sientan, y Fernando me había reconocido sin conocerme. Era único, perfecto, el mejor. Y aunque siempre sería mío no podía estar a su lado. Aunque siempre lo preferiría a él por sobre todas las cosas, no era capaz de hacerlo…
"Fernando." Ahogue mi llanto en su nombre. "Yo no sé cómo sucedió todo, de un día a otro no supe cómo irme, todo se salió de mi control." Lágrimas brotaban y no quería detenerlas, una vez más la vida jugaba a su antojo conmigo. "Amaba estar contigo aunque sea un momento, en nuestra burbuja alejados de todos conocí lo que era la felicidad. Nunca estuve tan cerca de tocar el paraíso si no estabas a mi lado. Y sé que jamás lo encontraré porque no estarás conmigo." Besé sus labios. "Perdóname por favor." Tomé su cara entre sus manos. "Perdóname por no quedarme en tu infierno para que me salves. Yo no puedo. Lo siento mucho mi amor."
