Capítulo 15

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Adrien...

Carajo, esto es un total desastre, Alexa llegó a mi oficina hablar sobre algunos negocios que mantengo con su padre, pero no sé en qué momento ya la tenía frente a mí, por un momento me perdí en placer e imaginado que era Marinette que no pude separarla y terminé engañando a Mari, joder en tanto la vi salir de mi oficina la seguí pero cerró del elevador, creí que tomando las escaleras sería más rápido, así que baje por ahí, tarde más de lo que me hubiera gustado, al salir vi como caminaba hacia un taxi con su compañero, le grite pero aun así entró al taxi, ¿ahora que mierda hago?

Le quite las llaves a Iván y entre al auto para empezar a seguirla, por un momento la perdí y ya no la encontraba, no sé por dónde carajos se fue, recordé que su celular tiene incrustados un ship rastreador por cualquier emergencia, solo espero que me perdone, porque si no lo hace no sé qué haré

Una vez que tuve la ubicación me puse en marcha, me di cuenta que está en un ¡¡bar!!, ¡¡un bar!!, ¿cómo carajos se le ocurre?, al llegar al bar entre y como lo supuse era un lugar de mala muerte, pude ver como niñas entre 14 y 15 años bailando como si estuvieran apunto de tener sexo, vamos no juzgo pero están en estado de ebriedad, sé que nosotros lo hombres no debemos de aprovecharnos de su estado pero lamentablemente mucho lo hacen. Me adentre más en el bar y a lo lejos pude divisar la barra y también vi a Marinette con su amigo, mi lado posesivo se puso activo me acerqué a ella, pero unos pasos antes de llegar vi como su amigo la beso y esta le siguió, el enojo me segó y la jale para que se separara

—¡¡¿Qué significa esto Marinette?!!

—Ad...adrien—dijo asustada

—dime que carajos significa esto, ¿Por qué te andas besando con este a días de nuestra boda?, ¿acaso eres una zorra?

Marinette le dio una bofetada—eres un sínico idiota, te quejas de que yo me estaba besando con el—dijo señalando a Cedreric— cuando tú estabas penetrando la boca de mi supuesta amiga

—eso tiene una expli...

—¿qué explicación tiene?, porque yo no veo ninguna

—vámonos en la casa hablamos

—¡¡no me voy a ir contigo!!

—tu vendrás conmigo así sea a la fuerza

—no me voy

—señor Agreste, no puede obligar a Mari a ir con usted—salió Cedreric a defenderla

—tu cállate idiota, Marinette es mi prometida y pronto será mi esposa y ella debe obedecerme, así que vámonos Marinette

—¡¡no!!, ya... —à Mari no le dio tiempo de terminar pues Adrien la cargo en su hombro

—te dije que no fuéramos

—bájame Agreste, ¿qué eres un cavernícola?

—no me importa en lo mínimo que pienses de mí, esto se va a arreglar y créeme no será bonito para ti —Marinette seguía pataleando para ser bajada, igual le pegaba en la espalda con sus puños para que cediera, pero no lo hizo

Una vez afuera me dirijo mi auto y sin ningún tipo de cuidado o delicadeza a vente a Mari a los asientos de atrás, rodeo mi auto para después subir en la parte del copiloto para empezar a manejar, después de un rato conduciendo en silencio Marinette habló

—Agreste ¿a dónde me llevas?, este no es el camino—dijo asustada

—lo sabrás cuando llegamos, falta poco —Marinette no dijo nada más, pero baya que se puso ansiosa

—llegamos—dijo con la voz fría

Entre al estacionamiento subterráneo de mi edificio, pues tengo un departamento el cual solo ocupaba para mis aventuras, en mi departamento tengo lo necesario para castigar a Mari, sé que sonara absurdo, pero ella se lo merece, se besó con su amigo, de seguro lo de hace rato solo era una excusa para no casarse conmigo, pero no se saldrá con la suya

MI DUEÑODonde viven las historias. Descúbrelo ahora