Capítulo 38

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—¿Cómo esta? —pregunto su esposo tan preocupado como siempre, desde que llegó de ese accidente que casi le cuesta la vida y que aún sigue en el limbo entre la vida y muerte

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—¿Cómo esta? —pregunto su esposo tan preocupado como siempre, desde que llegó de ese accidente que casi le cuesta la vida y que aún sigue en el limbo entre la vida y muerte

—esta mejor, cada día va mejorando más, al parecer quiere seguir luchando por sus vidas

—oh gracias Dios, gracias —dijo en un susurro —usted cree que despierte antes de que nazca

—no lo sé, pero si sigue como ahora lo hará—y con eso dicho salió de la habitación dejando al hombre con esperanzas

—espero que si—dijo em un susurro

Por la mañana Adrien estaba viendo dormir a su linda esposa, está estaba delado solo siendo cubierta por la fina sábana blanca que apenas y cubría su torso desnudo y está apenas y alcanzaba a cubrir su trasero, sin duda la mejor vista de Adrien, e...

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Por la mañana Adrien estaba viendo dormir a su linda esposa, está estaba delado solo siendo cubierta por la fina sábana blanca que apenas y cubría su torso desnudo y está apenas y alcanzaba a cubrir su trasero, sin duda la mejor vista de Adrien, este comenzó a pasar sus dedos por la esbelta espalda de Marinette para después darle uno que otro beso, saboreando sus piel, recorriendo su cuerpo con la vista viendo aquellas marcas que no se irían en un par de días, orgulloso de eso sonrió de lado para seguir viendo como dormía el amor de su vida, sintiéndose Feliz por tenerla en su vida, sabía que sus decisiones pasadas no fueron las mejores, pero esperaba poder mejorar todo eso para poder vivir feliz con ella, eso era lo único que deseaba y solo quedaba en el si eso se hacía realidad o no

Marinette sintió los besos de su esposo obligándolo a despertar, esta sonrió al ver cómo su esposo la estaba mimando, eso le agradaba mucho, y la sonrisa boba en su rostro demostraba cuanto le gustaba que su esposo tuviera esos detalles con ella, quizás ahora si podían ser felices, quizás a partir de ese momento todo sería diferente, eso esperaba, no quería tener otra desilusión, no la aguantaría

—Buenos días princesa —dijo Adrien a su oído al verla despierta—¿Cómo te sientes? —pregunto algo preocupado

—pues normal, como cualquier persona después de tener la mejor noche—dijo soltando una sonrisa pícara

—hum, entonces te duele cuerpo —dijo riendo

—así es, así que por el momento me tendrás que cargar porque no creó que pueda caminar

MI DUEÑODonde viven las historias. Descúbrelo ahora